Basquetplus.com

Leonardo Martín Gutiérrez es sinónimo de selección argentina, es un símbolo patrio, es mucho más que un jugador, como tantos otros que tuvo el representativo nacional. El oriundo de Marcos Juárez, una localidad del interior cordobés que actualmente tiene 30 mil habitantes y con muy poca injerencia en el deporte de la pelota naranja hasta 1978.

El 16 de mayo de dicho año nació Leo Gutiérrez, con opiniones opuestas entre unos y otros, pero para muchos, el jugador más importante e influyente que tuvo la Liga Nacional argentina. Eso es en base a las opiniones de los fanáticos y el público en general, desde la frialdad de los números, Leo es el jugador más ganador de la historia de la Liga y con varios equipos lo hizo.

La mayor parte de su carrera la desarrolló en Argentina, apenas sumó poca experiencia en España y Colombia. En época de grandes estandartes en el representativo nacional, Leo a fuerza de mucha constancia y entrega, se fue ganando su lugar. Desde 1999 cuando dio su salto a la selección mayor, el equipo argentino tuvo grandes figuras: Manu Ginóbili, Luis Scola, Fabri Oberto, Carlitos Delfino, Pablo Prigioni, Chapu Nocioni, Hugo Sconochini, Pepe Sánchez, entre otros, pero había uno que siempre estaba: Gutiérrez.

Leo, de a poco, se fue convirtiendo en un bastión importante de la selección argentina. Tal como hicimos mención anteriormente, sacando las opiniones personales al respecto y solo desde la frialdad de los números, Leo cuando le puso punto final a su carrera, terminó siendo uno de los jugadores con mayor cantidad de partidos jugados y uno de los más ganadores. Nada más y nada menos.

Solo debió ausentarse, y con mucho pesar, en 2011 cuando el equipo argentino se coronó campeón del FIBA Américas jugado en Mar del Plata, ciudad en la cual ya estaba instalado el cordobés jugando para Peñarol. Leo estuvo en los momentos importantes del seleccionado, en los títulos, en las clasificaciones heroicas y en las derrotas tristes que calaron hondo. Pero también estuvo presente en la rebelión cuando pidieron la renuncia de Germán Vaccaro, por entonces presidente de la CABB.

Tras su retiro como profesional, Leo comenzó su carrera como entrenador. Con el ingreso de Fabián Borro a la presidencia de la Confederación se le abrieron las puertas para sumarse a los procesos de selecciones formativas y tras la salida de Oveja Hernández y la llegada del Che García primero y Pablo Prigioni después, Gutiérrez integró el cuerpo técnico del seleccionado mayor.

Como jugador, Leo ganó el Sudamericano 2001, FIBA Américas 2001, Sudamericano 2004, Juegos Olímpicos Atenas 2004 y Sudamericano 2012; mientras que como entrenador, en su rol de asistente técnico, acaba de sumar la Americup reciente en Brasil. 

Leo volvió a la selección y la selección volvió a ganar. No importa cómo ni de dónde, lo cierto, pero ahora sin la frialdad de los números, es que Leo Gutiérrez fue, es y será un sinónimo de selección argentina.

Federico Radulovich / [email protected]
En Twitter: @basquetplus
En Twitter: @FRadulovich