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Argentina tuvo su debut en el FIBA Américas U18 de Tijuana, México, pero no pudo ser con triunfo ante Brasil, y cayó 60-55. Aunque no hubo una figura particularmente destacada, el mejor en el equipo de Herman Mándole fue Nicolás Stenta, el chico de Boca, con 14 puntos. 

Argentina jugó una primera mitad muy floja ofensivamente, cayendo 24-35 ante un Brasil que, sin demasiadas armas, pero mejor puntería de tres puntos (5/16 contra 0/8 de Argentina), sacó una amplia diferencia en relación a su dominio. 

Argentina, como ya ocurrió en el Sudamericano, fue a este torneo obviamente con la intención de clasificarse al Mundial de la categoría del año próximo, pero siempre con el foco en el desarrollo de una camada de chicos muy altos y atléticos, donde una buena parte se está formando en Europa. De hecho, de los 12 del plantel, hay 4 en España y 1 en Italia. Y varios más que no vinieron, sobre todo Lucas Fresno, el pibe de la Stella Azurra. 

En ese sentido, se vio un plantel, como en el Sudamericano, pero mejorado aún, con un tamaño inusual (2.00 de promedio y 8 por encima de esa talla) y una calidad individual muy atrayente. Lucas Giovanetti ya mostró su talento en selecciones formativas, pero al que se vio muy mejorado fue a Bautista Rodríguez, el pibe del Baskonia, perimetral de 2 metros y una contextura física de un mayor. 

La segunda mitad del partido se dividió en 2 partes. Brasil sacó una muy amplia ventaja en el tercer cuarto (máxima de 17), pero Argentina se recuperó en el último, siendo más agresivo en defensa, atacando un poco mejor, aunque siempre con la falencia del triple (1/17), algo que estos pibes deberán mejorar mucho porque ya mostraron baja puntería en el Sudamericano. También estuvieron muy flojos en libres (8/18).

Brasil lo terminó ganando con lo justo porque Argentina justamente no tuvo el tiro de tres como alternativa para descontar más rápido y porque arrancó de muy atrás el período y no le alcanzó el tiempo. La derrota fue 60-55 y esto puede complicar un poco sus chances de llegar al Mundial porque, si cae puestos en su grupo, le tocará un partido de cuartos probablemente más difícil. Stenta fue el goleador argentino con 14, mientras que en Brasil se destacó Klafke, hijo del recordado Rogerio, también con 14. 

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