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De manera unánime ha logrado ser en dos ocasiones el jugador más valioso y tiene planeado continuar con su buen rendimiento hasta el final de la temporada. Steph está poniéndose al equipo al hombro y ya parece haber pasado lo peor de la tormenta, aunque el equipo sigue todavía en posiciones no de playoffs. Pero si no está más abajo, es gracias a las noches mágicas de Steph, que promedia más de 31 puntos por juego en esta temporada.

Similar a lo que sucede en la batalla de La Tomatina, un evento de Valencia (España) en el que miles de personas se reúnen para arrojarse tomates y pasar un día inolvidable. Stephen Curry está decidido a crear noches mágicas a los fanáticos de los Warriors y de la NBA en sí. No se trata de un milagro, pues, anotar más de 40 puntos en una de las ligas más prestigiosas del mundo no es para nada sencillo, y Curry lo ha hecho 3 veces en el último mes.
 

Pero, la increíble actuación del capitán de los Warriors ha dejado claro que está allí para ayudar a su equipo a salir adelante con estadísticas muy positivas, que dejan en claro que Stephen Curry está en su mejor nivel a la edad de 34 años. Una noticia positiva para lo que supone una temporada que comenzó como para el olvido de su equipo.

Los Warriors quieren volver a ser

Después de la racha de octubre, en la que perdieron 5 partidos consecutivos y generaron rumores del tipo ¿es el fin de los Warriors?, parece que han encontrado la senda exitosa nuevamente en una Conferencia que no está siendo tan poderosa como en años anteriores. De todos modos, si los Warriors siguen en este proceso de recuperación, como parece estar ocurriendo (ganaron 5 partidos de sus últimos 7), los rivales empezarán a temblar.

Y es que la base del campeón de la temporada 2021/22 está intacta, y no solo eso. La ha mejorado. Es cierto que perdió a algunas figuras secundarias que tenían roles importantes, como Gary Payton II y Otto Porker, pero es mucho más importante lo que ha sumado: el retorno de James Wiseman, la experiencia de JaMychal Green y, sobre todo, el crecimiento de su próxima estrella, Jordan Poole. Ahora que pasó la tormenta, Steve Kerr puede estar tranquilo. El futuro para esta temporada vuelve a ser promisorio. El problema será el año próximo, cuando haya que reformular contratos y ver quién se queda y quién se va.