NBA 2016/17

Scola hizo un repaso íntegro de su carrera: Argentina, NBA y más

18:38 02/11/2016 | El ala pivote argentino fue entrevistado por Adrian Wojnarowski, en una charla de una hora en la que tocó temas muy variados. Esto fue lo mejor.

Scola habló de todo con Woj

Luis Scola participó de una riquísima entrevista junto al periodista Adrian Wojnarowski, de The Vertical, en la cual habló de todo. A continuación, repasamos algunos de los puntos más salientes de la charla de casi una hora.

La Generación Dorada

"Una de las razones por la que nos sentimos tan orgullosos de la Generación Dorada, es porque lo hicimos durante muchísimo tiempo. Obviamente en el final fue más difícil conseguir resultados, pero incluso los últimos Juegos Olímpicos, donde tuvimos la peor ubicación, fue mucho más grande que lo que soñábamos antes de nuestros primeros Juegos".

"Cuando nos conocimos con Manu, él no era considerado el mejor proyecto de nuestro básquet. Nos conocimos en un equipo Sub 20, él con 19 años. Y llegamos porque 5 o 6 jugadores de esa selección, todavía estaban jugando en la final de la Liga Nacional. Por eso nos llamaron como reemplazantes. Obviamente el progreso de Manu fue increíble y a los tres o cuatro años ya se había transformado en el jugador que terminó siendo. Pero creciendo no era uno de los mejores proyectos. Es curioso, porque generalmente no ves ese tipo de evolución".

"Todo lo que queríamos era clasificar a unos Juegos. Cuando clasificamos a Atlanta, fue histórico. Todo lo que queríamos era clasificar y llegamos a 1999 con esa mentalidad. De ese equipo se bajaron muchos jugadores, por distintas razones, y empezaron a llamar a los jóvenes: Manu, Oberto, Pepe Sánchez, Nocioni a mi... y antes del torneo la gente pensaba que íbamos a perder cada partido por 30 puntos. Pensaban que nos iban a matar. Pero fuimos y casi clasificamos. Llegamos a las semifinales, donde terminamos jugando con Estados Unidos debido a un triple empate. Nos fuimos con la sensación de que nos iban a pasar cosas buenas en el futuro, pero nunca nadie creyó que eso sería una medalla dorada. No lo pensamos hasta el 2002".

Además, Woj le consultó por una frase de RC Buford, quien declaró haber visto al equipo argentino luego de la final perdida en el 2002, compartiendo una cena junto a sus familias y fue entonces que se dio cuenta de lo que le faltaba a Estados Unidos: formar un verdadero equipo. "Sí, recuerdo ese día. De hecho, 12 años después volví a ese restaurante cuando viví en Indiana. De hecho, ese día RC pagó la cuenta. Fue un día raro: fue triste por lo cerca que habíamos estado. Pensábamos que nunca íbamos a estar de nuevo en esa situación. Pero por otro lado, llegamos al torneo pensando que podíamos pelear por un quinto o sexto lugar. Terminamos jugando la final y debimos ganarla, simplemente no supimos como cerrarla".

El título en Atenas: "Estados Unidos llegó a Atenas con la mentalidad de que lo que había pasado en Indianapolis no podía ocurrirles de nuevo. Y lo sentimos. Todos los equipos lo sentimos. Puerto Rico les ganó en el debut. Lituania después. Ellos sentían que fue un accidente y no hicieron nada para arreglar su situación. Podíamos ganarles, pero nosotros teníamos nuestros propios problemas. De hecho, no jugamos ni cerca de lo que lo hicimos en el 2002. Nunca alcanzamos de nuevo ese nivel. En los cuartos de final estábamos abajo con Grecia y con la segunda mitad que hicimos, pudimos darlo vuelta. A partir de ahí volvimos a nuestro juego y nuestra confianza creció".

¿Qué significa el respeto que han conseguido como equipo a lo largo del mundo? "Significa y mucho más ahora, que estamos más grandes y nos damos cuenta de lo difícil que es llegar a esa posición. Es increíble el respeto que ganamos del resto del mundo. La gente ni siquiera sabía que en ese país se jugaba al básquet".

La llegada a la NBA y los Spurs

"Al principio, para ser honesto, no me moría por jugar en los Spurs. Me hubiese gustado, pero solo quería llegar a la NBA. Estaba obsesionado con la NBA. Llegó un punto en el que no era algo sano la obsesión que tenía. Sentía que pertenecía y quería jugar con los mejores. Pero ahora pienso que hubiese sido divertido. Con Manu jugué muchos años, pero me hubiese encantado jugar con Duncan y ser dirigido por Popovich. Además de haber podido ganar algunos de sus campeonatos".

"La Generación Dorada tuvo una réplica en la NBA. Pero es extremadamente difícil que vuelva a ocurrir. Son todos jugadores a los que le gusta ser dirigidos y tienen a un gran entrenador como Popovich. Es muy complicado que vuelva a pasar, pero pasó antes con algunos equipos de los Lakers y de los Pistons. Con la forma que la NBA funciona hoy en día, entiendo que ya nadie persigue esa meta". 

"A veces sentía que había llegado a la liga dos o tres años tarde y que debía haber estado desde antes. Pero mirando para atrás, no me tenía que quejar de eso. Tuve una gran carrera, con la chance de jugar 10 años en la NBA. Terminó siendo un buen timing, porque ya era maduro por entonces. No sé qué hubiera pasado si llegaba a la NBA con 24 años. Podía no haber funcionado".

La racha de 22 victorias seguidas con los Rockets en su temporada de novato: "El quinteto era Rafer Alston, Shane Battier, Tracy McGrady, yo y Yao Ming. Pero Tracy y Yao se lesionaron durante la racha. Mutombo iniciaba de pivote y fue increíble lo que hizo durante ese mes. Ganamos 22 partidos seguidos, fue increíble. Fue mi primer año en la NBA, la gente estaba muy emocionada".

Su rol en el traspaso de Chris Paul a los Lakers, que finalmente fue vetado por la NBA. "Después de un tiempo que se rumoreara, finalmente me llamaron y me dijeron que me habían traspasado a New Orleans como parte de aquel movimiento. Que todavía no estaba definido, pero que lo estaría en 20 minutos. Y al día siguiente a la mañana, empecé a leer todo lo que había pasado con la NBA. Fui a practicar y todos estábamos bromeando. A las pocas horas se reflotó la chance del traspaso y nadie sabía lo que estaba pasando. Finalmente, me escribió Morey un mensaje para decirme que el cambio se había caído y les respondí con una broma, que con todo lo que había pasado, ahora yo demandaba un traspaso".

"Fue difícil dejar Houston. Realmente me gustaba la ciudad, la gente, el equipo, la dirigencia. Pero bueno, ahora mirando para atrás, es poco realista imaginar que vas a jugar por un solo equipo".

Presente y futuro

"Pienso que todos aquí en Brooklyn quieren crear la atmósfera correcta para trabajar y ganar. Para construir eso tenés que tener buenos hábitos. Quiere reconstruirse como equipo, pero haciéndolo de la manera correcta. Jugando para perder es difícil crear esos hábitos".

"Siento que hoy disfruto el juego más que a los 15 o 16 años. Porque sé que cada partido o cada práctica puede ser la última. Estoy más cerca del final. Sé que va a terminar y acepto eso".

¿Cómo sabrá cuándo retirarse? "La respuesta educada sería decirte que voy a jugar hasta que me siga divirtiendo. Otra respuesta es decirte que voy a seguir hasta que me tengan que sacar con la policía. Y probablemente la verdad esté en el medio de ambas respuestas. Es tan divertido jugar al básquet y estar en la NBA. Pero la verdad es que no necesito estar acá, no estoy obligado. Y si algún día no tengo un lugar, me iría a jugar a otro lado".

¿Posibles destinos fuera de la NBA? "Siempre estuve muy intrigado por China. Realmente quiero aprender mandarín. Intenté, pero me fue imposible. Usé ropa china durante 10 años y estuve en el país muchas veces, gracias a Yao. Me encantaría jugar ahí".

Si bien falló con el mandarín, Scola tuvo un aprendizaje poco ortodoxo del inglés y así lo recuerda: "En España aprendía inglés con la serie Friends. Compraba los DVD de Inglaterra, para que no tengan subtítulos. Era un fanático de ese show y lo veía con un diccionario. El primer episodio me llevó como tres horas, porque cada vez que no entendía una palabra, la buscaba en el diccionario. Eventualmente empecé a mejorar".

 
Fuente: 
The Vertical

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