SAS perdió un increíble partido tras tres suplementarios
02:07 18/12/2014 | Partidazo: en una noche con tres prórrogas y con una lluvia de triples, los Spurs cayeron 117-116. Manu sumó 21 puntos, 8 rebotes y 8 asistencias.
En un partido tremendo, a puro triple y con un final no apto para cardíacos, San Antonio Spurs no pudo contra Memphis Grizzlies y cayó por 117-116 tras el desarrollo de tres tiempos suplementarios. Fue un juego de altísimo voltaje donde el tiro externo adquirió un protagonismo único por momentos, las conversiones agónicas se hicieron presentes más de la cuenta y el básquet demostró una vez más la razón por la cual es un deporte de lo más apasionante.
Los Grizzlies tuvieron un arranque bastante arrasador. Con Gasol, Randolph y Lee lograron adelantarse por 6-0 en los primeros minutos y obligaron a los Spurs a correr desde atrás desde el inicio. San Antonio no encontró eficacia, se cargó de faltas muy rápido (con Duncan sobre todo) y en el meridiano del parcial ya pasó a perder por 17-6.
No tardó mucho tiempo para que Manu haga su ingreso al parquet, anotando un triple pero sin poder evitar un pasaje inspiradísimo de Carter (tres bombas desde el perímetro). Memphis fue más que los texanos, se encendió desde fuera de la pintura no solo con Carter sino que también se apoyó en Conley y en los dobles de Koufos. ¿El resultado? Un avasallante 34-19 al finalizar el primer periodo.
En el segundo periodo el dominio de Memphis siguió por un par de minutos, llegando a sacar una ventaja importante de 41-21 gracias a la continuidad de Carter y su tiro de tres puntos. Sin embargo, San Antonio se fue poniendo en partido de a poco, tímidamente y sin desesperarse por encontrar un descuento prematuro. El elenco de Popovich lo supo madurar y se despertó en ese segundo cuarto.
El reingreso de Manu fue importante para que los Spurs se revitalicen en el juego, pero antes de eso aparecieron insinuaciones interesantes de Diaw y dos bombas de un especialista como Belinelli. Ya para el retorno del bahiense a la senda anotadora, los Spurs recortaron la desventaja a catorce unidades (48-34) y se animaron a más.
Los Grizzlies no iban a tirar toda la noche con el elevado porcentaje de cancha que venían teniendo, por eso San Antonio supo esperarlo y en los últimos tres minutos lo apretó. Memphis solo anotó cuatro unidades en ese tiempo, la mitad de los puntos que sumó solamente Manu en ese lapso (8 tantos sobre el final del cuarto para contabilizar un total de 11 unidades en el primer tiempo), y con ese déficit los texanos pudieron arrimarse a 52-45 al entrar a los vestuarios.
Tras el descanso largo, el partido se planteó de una forma totalmente distinta. Independientemente de que Memphis tuvo un arranque nuevamente superior ante unos Spurs otra vez escasos de gol, el trámite ya no tenía aquellos marcados pasajes favorables para uno u otro elenco.
Los Grizzlies pudieron estirarse a una nueva brecha de diecisiete tantos (62-45), pero lo cierto es que fue mérito tanto de Memphis como producto declive de los Spurs. San Antonio estuvo durante 5m30s sin convertir, hasta que llegó un doble salvador de Duncan (62-47) y la fluidez ofensiva volvió a correr su curso.
La desventaja ante Memphis era importante para ese entonces con quince de distancia, pero el cierre por demás positivo sirvió para que los texanos volvieran a renacer. En lo fue una lluvia de triples por parte de los Spurs, Green (2 triples), Manu (2) y Diaw (1) se despacharon con bombazos que valieron de oxígeno, sin poder dar vuelta el score antes de que finalizase el tercer cuarto pero consiguiendo arrimarse una vez más: 73-68 a favor de los Grizzlies.
Ya en el capítulo final llegó la tan buscada remontada de los Spurs. Después de un intercambio de golpes, los actuales defensores del anillo dieron vuelta el score momentáneamente a raíz, una vez más, de los triples. Primero Belinelli se encargó de empardar en 77, y luego Green clavó otra bomba para adelantar a San Antonio por 80-77, sin embargo Memphis no se rindió e iba a ofrecer pelea hasta el final.
En un cierre impactante, Ginóbili y Duncan tuvieron su aporte pero Green volvió a ser decisivo. ¿De qué forma? De la misma manera que lo hicieron los Spurs toda la noche: desde los triples. Green clavó un triple vital a falta de un minuto para el cierre, dándole la ventaja de 88-86 a San Antonio y empujando el encuentro a un final apasionante.
Pero en ese último pasó de todo. Primero Duncan estiró la ventaja de los Spurs desde la línea anotando uno de sus dos intentos en libres (89-86), Conley respondió en la siguiente posesión y clavó una tremenda bomba para empatar en 89, pero San Antonio se guardó un último triple para llevar el partido a 92-89 con dos segundos por jugar. Increíblemente, cuando el tiempo parecía muy reducido, Gasol metió un nuevo triple y empardó las cosas en 92-92. Así, con la emoción a flor de piel, entraron al suplementario.
El tiempo añadido también siguió con el mismo panorama reñido que tuvo el periodo regular del encuentro. San Antonio marró libres importantes que podrían haberle dado un mayor respiro en el score y por eso Memphis pasó a liderar 98-95 a falta de 2m37s para el cierre. La respuesta de los Spurs llegó nuevamente mediante los triples, con Green y Diaw anotando una bomba cada uno para poner el partido 101-100 a 1m21s del final.
El suplementario se fue agotando y la intensidad de ambos parecía evidenciar un nuevo tiempo extra para definir al ganador. Y así fue como sucedió, ya que Duncan falló uno de sus dos simples y San Antonio solo pasó al frente por 102-100, algo que se equiparó en la siguiente posesión y nuevamente de Gasol, el verdugo en el tiempo regular. Con el juego igualado en 102 llegó el segundo suplementario.
Para este nuevo tiempo extra San Antonio pagó cara su falta de efectividad. Por momentos el equipo de Pop parecía que solamente podía anotar de tres puntos, debido a su escaso porcentaje en dobles y sumándole a eso que Duncan estuvo con una noche bastante errática en los momentos decisivos. Sin embargo, después de fallar varios intentos el ala pivote se sacó un poco la mufa y anotó el 111-111 sobre le chicharra del cierre del parcial, empujando el encuentro a un tercer y nuevo tiempo añadido.
En el suplementario final, San Antonio se quedó sin nafta a pesar de que siempre estuvo en partido, incluso hasta en la última bola. Sin embargo, el buen inicio de periodo de Randolph fue determinante, anotando seis puntos consecutivos y dándole una ventaja de 117-113 a los Grizzlies a falta de un minuto para el cierre. Los Spurs buscaron la heroica remontada, y de hecho casi lo consiguen ya que se arrimaron a tan solo una unidad tras un triple de Green (117-116). Con 40s por jugar, Conley y Lee fallaron sus ofensivas y la última bola le quedó a Manu, que buscó un nuevo triple con tres segundos en el reloj pero que desafortunadamente no tuvo eficacia.
La síntesis marcará un ajustado resultado final de 117-116, pero todas las emociones que tuvo este partido son difíciles de explicar en palabras. Nervios, euforia, sufrimiento, desahogo… Spurs y Grizzlies regalaron un espectáculo enormemente digno de la mejor liga del mundo, independientemente de lo que reflejen los números finales.
. Los números de Manu Ginóbili: 21 puntos (3/11 en dobles, 4/9 en triples y 3/7 en libres), 8 rebotes, 8 asistencias y 3 pérdidas en 41m10s.
Lucas Leiva / [email protected]
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