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San Lorenzo 76 - Boca 74

San Lorenzo volvió a festejar en Boedo y mantuvo el invicto como local en la actual edición de la Liga Nacional, pero el 76-74 ante Boca dejó una gran preocupación: Nicolás Aguirre, quien se retiró en el inicio del segundo tiempo como consecuencia de una molestia en el muslo posterior de la pierna izquierda; este jueves se le realizarán estudios para determinar el grado de la lesión. El Ciclón no tuvo la frescura y la intensidad que acostumbra plasmar en cancha, algo que es lógica teniendo en cuenta que recientemente jugó en tres noches consecutivas por Liga de las Américas (de hecho no jugó Marcos Mata). Igualmente se las arregló para sacar adelante un juego duro que le planteó Boca, a partir de la gran tarea de Dar Tucker (20 puntos), Mathías Calfani (8pts-8reb) y Joel Anthony (9pts-9reb-4tap). En el Xeneize se destacó Adrián Boccia, quien totalizó 22 puntos para ser el goleador de la noche.

Ningún equipo pudo carburar en el inicio del partido; la paridad y la poca dinámica fueron denominadores comunes. Sin embargo, el Ciclón no tardó mucho tiempo para tomar el comando del ritmo de juego, sobre todo a partir de la supremacía que ejerció en tablero propio, lo que le permitió correr la cancha. Penka Aguirre y Maxi Fjellerup -de gran entrada- lideraron el parcial 10-0 (en 4:30 minutos) con el que los dueños de casa cerraron el primer cuarto 18-8 arriba en el marcador. En ese lapso final Boca se secó porque el azulgrana le negó la posibilidad de llegar a la pintura y no tuvo efectividad externa como para contrarrestarlo. En cuanto a los triples, los dos estuvieron flojos en el arranque: SL 1/7 y el Xeneize 0/3.

Boca cambió la cara en el inicio del segundo cuarto y mucho tuvo que ver el buen aporte de Bruno Sansimoni. El Xeneize mejoró en intensidad y eso hizo mella en un San Lorenzo que cuenta con mucho cansancio acumulado: Calfani salió por una molestia en la rodilla, pero ingresó posteriormente, mientras que Aguirre -molestia muslo posterior de la pierna izquierda- se retiró y ya no regresó al juego. Luego de un tanteador 8-22, la visita comenzó a recortar al punto de ponerse a seis (22-28) y configuró un partido con desarrollo diferente al que se estaba dando, sobre todo porque pudo emparejar en la zona pintada con el crecimiento de Jasiel Rivero. Pero en el cierre el Ciclón ajustó defensivamente y apareció el poder de gol de Tucker, para llegar al entretiempo 37-26 arriba en el marcador.

San Lorenzo no fue constante en cuanto a la actitud defensiva y ese fue un poco el termómetro del juego. Los locales bajaron un poco la intensidad en el inicio del complemento y eso permitió que Boca volviera a acercarse, sobre todo a un pasaje de gran efectividad por parte de Adrián Boccia. Así fue como lograron acercarse a cinco puntos (43-48) cuando restaban 3 minutos en el reloj. Boca encestó su primer triple en los últimos segundos del tercer parcial por intermedio de Alex Galindo y volvió a castigar en el inicio del último cuarto, lapso en el que metió un parcial 7-0 para ponerse a 1 puntos del azulgrana (55-56)

Ese fue el pero momento del equipo de Gonzalo García (que esta noche fue suplantado por Carlos Duro por un inconveniente físico): el Ciclón perdió circulación en la faceta ofensiva, lo que generó que tuvieran que ejecutar tiros incómodos y de bajo porcentaje. Pero pudieron revertirlo de atrás hacia adelante. Joel Anthony fue un faro defensivo para secar al Xeneize y en el otro costado apareció el tiro exterior: Mathías Calfani metió dos triples casi consecutivos y Dar Tucker también sumó, para volver a darle cierta luz a los dueños de casa (66-57 a falta de 4 minutos). Pero a San Lorenzo le faltó la chispa final para quebrarlo definitivamente, mientras que Boca nunca se dio por vencido. Intentó la remontada y se quedó realmente cerca, pero la victoria quedó en manos del dueño de casa por un ajustado 76-74.

Juan Martín Orellano / [email protected]

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