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San Lorenzo 84 - Boca Juniors 67
San Lorenzo no tuvo demasiados inconvenientes para superar a Boca y defender su liderazgo en el Sur. El elenco de Julio Lamas, de local en el Roberto Pando, arrasó por 84-67 en lo que ha sido su quinta victoria consecutiva. Gabriel Deck (20 puntos) y Nicolás Aguirre (15), que volvió tras ausentarse varios juegos por lesión, fueron las figuras del equipo de Boedo.
El primer cuarto fue parejo, casi sin sacarse diferencias y con los dos equipos mostrándose intensos desde el inicio. Boca sacó un poco más de ventaja en el principio, de la mano de Lucas Pérez y con el habitual peso del juego interior de Lampropoulos y Vasirani (este último mucho más en los rebotes). De todas formas no hubo un dominio claro de Boca, San Lorenzo siempre estuvo al acecho y lo hizo gracias a su aporte variadísimo.
Díaz fue una carta constante de gol, y lo mismo sucedió con Meyinsse que lastimó en varios sectores. El aporte del banco fue productivo también, porque Sandes ayudó en los tableros y porque el ingreso de Aguirre fue decisivo, con el Penka clavando un triple para darle a San Lorenzo ventaja de cinco (25-20) al terminar el periodo inicial. El Ciclón, con algunas alternativas más pero sobre todo mejorando atrás, lo cerró más equilibrado.
En el segundo periodo el partido se desvirtuó, porque San Lorenzo apretó el acelerador y se vio beneficiado por el juego que quiso proponer Boca. El Xeneize buscó un juego rápido, de golpe por golpe, y esa fue una decisión desacertada contra un San Lorenzo rapidísimo para las transiciones y con muchísimos argumentos en cancha y en el banco.
Por eso la brecha se fue estirando cada vez más, haciendo una historia muy difícil de revertir de la mano de Aguirre y Deck. Tanto el base como el alero dieron enormes soluciones, siendo protagonistas (junto a Calfani y Sandes) de una racha que estiró diferencias a 48-28 al ingresar al descanso largo.
Boca mejoró en el reinicio de las acciones, por momentos apretó desde el juego interior de Vasirani y Lampropoulos (excelente lo del griego), pero nunca fue suficiente. San Lorenzo había sacado +26 (57-31) con un gran aporte de Mata, una de las figuras del tercer periodo, Boca expuso su trabajo en la pintura hasta bajar a -17 (57-40) pero los de Boedo volvieron a imprimir una ráfaga para entrar al último cuarto por veinte de ventaja: 67-47 y partido prácticamente definido.
Restaba ponerle un resultado final, sobre todo porque Córdoba ya había decidido darle minutos a los más chicos del equipo (a López Banegas y Caffaro se sumaron Bione y Cavallero) en una señal que demostraba cierta resignación a dar vuelta un partido en el que San Lorenzo era muy superior desde hace varios minutos. Terminó siendo por 84-67, en otro triunfo más para un Ciclón letal que mantuvo su liderazgo.