Los partidos de pretemporada son lo que son, bancos de pruebas para hacer ajustes, y ante el Gipuzkoa Basket, el Monbus Obradoiro tuvo la primera oportunidad de probar la marcha en la cancha tras cuatro semanas de trabajo.
El encuentro dejó pistas sobre el nuevo proyecto, así como una constante que es innegociable para el colectivo de Moncho Fernández: si no está bien atrás todo es mucho más complicado. Entre los detalles merece mención especial el caso de Laurynas Beliauskas, que llegó a mediados de la última campaña como reemplazo de Earl Calloway.
El lituano venía de hacer sus mejores números en su país jugando como escolta. El año pasado tuvo que ponerse al mando del equipo. Y puedes hacerlo, pero te ves mucho más relajado sin las exigencias de la dirección del juego, enfocado en buscar tus opciones de disparo.
Las cosas cambiaron tras el primer descanso porque el equipo multiplicó su actuación defensiva, cerró mejor el rebote y bajó ostensiblemente el acierto de Gipuzkoa. La fluidez que perdió GBC fue ganando el Obradoiro con un ataque más coral en el que Beliauskas seguía brillando y al que Czerapowicz se unió con la sobriedad que se le recordaba. En el descanso, 48-39.
Arrancó el tercer cuarto como el primero, pero antes de que transcurrieran tres minutos y tras encajar un 0-6 parcial Moncho Fernández pidió tiempo muerto, al ver que el equipo estaba de nuevo en el agua y no podía cerrar el rebote. con un arreón para estabilizar las diferencias en el entorno de los diez puntos y llegó al último acto con ventaja de once y la preocupación por ver cómo Kartal Ozmizrak tenía que irse al banquillo por un esguince de tobillo.
En la cuarta parte el choque se movió a tirones. Parecía controlado para los de Obradoiro a poco más de dos minutos del final, tras una buena canasta de Birutis: 77-68. A partir de ahí se atascó y GBC forzó la prórroga, luego de que un triple de Beliauskas no entrara sobre la bocina. El lituano iluminó al equipo en los tres primeros cuartos. Brillaba en la anotación y también en el pase. Pero se disparó en el tramo final.
Moncho Fernández afrontó la prórroga disparando de oficio: Pozas, Czerapowicz, Daum, Cohen y Birutis. Daum y Cohen se responsabilizaron en ataque y Obra logró la victoria, con Rafa García manejando los cables en los últimos 38 segundos, en los que el equipo entró con una renta de tres puntos.
Monbus Obradoiro 92: Pozas (8) Beliauskas (18), Czerapowicz (14), Daum (19) y Birutis (7) (FI), Álvaro Muñoz (4), Ozmizrak (3), Rafa García (1), Enoch (7), Cohen (9), Álex Suárez (2) y Martín Fernández.
Gipuzkoa 86: Span (19), Pere Tomás (9), Oroz (1), Radoncic (9) y Viny Okouo (16) (FI); Faggiano (10), Magarity (10), Olaizola (4) y Cugini (8).
Parciales en cada cuarto: 21-27; 27-12; 17-15; 12-23; y 15-9
Árbitros: Jacobo Rial, Roi Trillo y Jaime Álvarez-Ossorio
Incidencias: Primer partido de pretemporada del Obradoiro, disputado a puerta cerrada en Sar.