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Meli Gretter tuvo una gran actuación en la final del torneo continental y el estadio de Obras, que estaba repleto como en sus mejores noches, fue una motivación más para una base que ha demostrado una vez más su jerarquía. Ante Canadá aportó 23 puntos, 5 rebotes, 4 asistencias, 2 robos y un corazón gigante. Tuvo las últimas tres posibilidades argentinas en la derrota 67-65 ante las norteamericanas, pero la pelota no quiso ingresar. Sin embargo, esas eventualidades no empañarán para nada un torneo que quedará en las páginas doradas del básquet feminino.

De hecho, la armadora fue elegida en el Quinteto Ideal de la AmeriCup, junto con la paraguaya Paola Ferrari, la portorriqueña Allison Gibson y las canadienses Miranda Ayim y Nirra Fields (MVP). Un reconocimiento totalmente merecido para una armadora de juego que ha cosechado los siguientes números a través de toda la competencia: 13.2 puntos (40.6 por ciento de campo), 5.3 rebotes, 3.5 asistencias y 1.8 recuperos, en 29.8 minutos de juego. En adición, 14.7 fue su valoración media.

Más allá de que Meli se quedó con la condecoración de la FIBA, es una obligación reconocer el trabajo de Cristian Santander y todo su cuerpo técnico, así como también a las restantes 11 jugadoras del plantel: Burani, Rosset, Aispurúa, González, Boquete, Santana, Durso, Marchizotti, Fiorotto, Pérez y Armesto. La medalla podrá ser de plata, pero el corazón es de oro macizo.