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Gregorio Martínez se convirtió en las últimas horas en el nuevo entrenador del seleccionado argentino de básquet femenino y dialogó con Básquet Plus para analizar todo lo que se viene en el presente y en el futuro.  

-¿En qué momento te llega esta chance? En otras épocas estuviste cerca, con otro contexto totalmente diferente, ya que ahora está Fabián Borro en la CABB y, para bien y para mal, han pasado muchas cosas en el femenino en los últimos tres años.  

. Me llega en un buen momento, tengo experiencia y el recorrido suficiente. Mi historia habla por mí a esta altura. Es un buen momento desde lo personal y en donde estamos bastante convulsionados con todo este tema de las chicas. Obviamente que no es el mejor y esperemos poder contribuir para ordenar todo esto que es lo primero que tenemos que hacer. Generar buenas y no malas cosas. Salir del conventillo y de estar en los medios por malas cosas. Trataremos de ordenar y pacificar esa situación, poniendo las cosas en su justo término. Es una condición necesaria para poder hacer un buen trabajo. No es lo único, pero es necesario para poder trabajar tranquilo y bien. Esperemos poder desarrollar el trabajo que estamos haciendo. La verdad que ya perdí un poco las ilusiones de estar en la selección, pero uno nunca sabe y ahí apareció esta oportunidad que es muy linda y en la que me dan todos los condimentos para poder hacerlo. Yo no iba a llegar de cualquier manera, porque cuando no se dieron de esa forma me fui, y se dieron las cosas. Estoy contento de estar ahí en este contexto, por el desafío que eso implica. 

-¿El contexto es bueno? No te voy a mentir, no soy un gran seguidor del básquet femenino, pero sí conozco lo que es a grandes rasgos. Hubo una época, no sé si la mejor, en la que se llegó al bronce con la juvenil, con mucho tiempo sin participar en torneos grandes. Se participó en algún momento y les fue mal. Ahora con alguna expectativa que se cayó mucho en los últimos torneos. Los Panamericanos en los que también por un lado parecía que era un equipo que podía ser medallista, y después pasa lo que pasa en el Preolímpico. ¿Cómo está hoy el contexto deportivo? 

. Esta misma camada de jugadoras tiene una chance de ir al Mundial. Nosotros tenemos un sueño que son los Juegos Olímpicos de 2024. En la actualidad Argentina está en el puesto 27 del mundo, lo que es muy bajo. Esto es fruto de que la selección no tuvo un buen año, porque aparte de los Panamericanos en la AmeriCup de FIBA le fue mal. Después cuando se hizo el cuadrangular con Estados Unidos, Colombia y Brasil tampoco se ganaron partidos. Fue un año de retroceso en ese aspecto, pero me parece que antes de eso el equipo había vuelto al Mundial. En el proceso de Cristian se ganó un Sudamericano después de 70 años y se salió segundo en la AmeriCup que se hizo en Buenos Aires. Se fue al Mundial y, si bien no nos fue bien, volvimos al torneo que es muy meritorio. Ahí se corta el proceso de Cristian (Santander) y el año pasado tuvimos un mal año entonces parece que estamos muy mal. La realidad objetiva es que estamos en el puesto 27, que nos pasó lo que nos pasó en Lima que lo único que hizo fue poner en manifiesto cómo se manejaban las cosas. Estoy seguro que vamos a cambiar eso. Podemos ir al Mundial, el ranking indica que no, pero yo confío en que vamos a hacer todo lo posible para lograrlo. Es la oportunidad que va a tener esa camada de 27, 28 años para poder reivindicarse. Es la que logró el bronce en Tailandia. Esa camada tiene la oportunidad de ir al Mundial de 2022, sumado a toda la generación de Gretter, Llorente y las que jugaron el U19. Estamos haciendo una lista de jugadoras para presentar mañana o pasado, y nos vamos a contactar con ellas de manera personal para invitarlas a formar parte del proceso de selección. Es una lista de 35 jugadoras, ya que queremos ampliar la base de jugadoras para contactar. También vamos a tener una lista de 30 chicas de U18 que tienen el AmeriCup y el Mundial el año que viene. Ellas son con las que más tenemos que trabajar y con las que menos tiempo tenemos para hacerlo. 

- Obviamente que el básquet masculino difiere casi en todo con el femenino, entre otras cosas porque imagino que sabrás que para que te vaya bien tenés que estructurar la actividad. No sé si eso es parte de tu idea o no te querés meter en eso.  

. No solo es parte de mi idea, sino que es una de las cosas que me piden el presidente y el Gringo Pelussi. No lo voy a estructurar yo, pero sí aportar ideas. En el futuro hay que ampliar la base y que más chicas jueguen al básquet en Argentina. Las EDA son un paso muy importante para nosotros. Digo nosotros porque siempre me consideré parte del básquet femenino. Esto nos permitirá desarrollar el básquet en el país, que será femenino y con chicas menores de 12 años, en lugares donde el básquet femenino no esté desarrollado. Es un trabajo a largo plazo que dará frutos en 10 años. Nosotros no lo vamos a ver, pero es la forma de mejorar realmente esto. Después intentaremos estructurar una Liga Nacional, lo que en este contexto no es sencillo. Armando la lista de mayores tenemos 20 jugadores en el exterior que son pasibles de convocar. Por primera vez también vamos a tener jugadoras en la NCAA, con mucho futuro. Hay dos jugadores en la A1 española, muchas en A2 y otras en los niveles uno y dos de Italia. Nuestra jugadora más alta juega en una universidad de Gales, en donde está haciendo un posgrado. Primero se fue a Canadá y ahora está jugando ahí. Tendremos que rastrear, trabajar y moverse para hacer lo mejor posible sin cuidar los objetivos inmediatos porque queremos siempre competir.  

-¿Es viable una Liga Nacional? 

. Sí que es viable. Hay que conseguir sponsors e ir a buscarlos, hay que dejar de hablar de igualdad de género y que realmente haya igualdad de género. Es viable, no me parece algo que no se pueda hacer. Obviamente que no hablamos de una liga de 20 equipos, pero sí me parece que se le puede dar continuidad. En este aspecto tuvimos mala suerte, porque la Liga había tomado la decisión y en el segundo año crisis económica y ahora lo de la pandemia. La crisis también provocó que muchas jugadoras vayan al exterior porque una chica allá gana 500 euros en Europa y acá eso es imposible. Esas son cosas que atentan con lo que estamos trabajando, pero trataremos de aportar en lo que se pueda.  

-¿Cuántos clubes creés que pueden estar interesados en jugar una Liga Nacional? 

. Seguramente ocho equipos que quieran jugar se pueden encontrar. Pero hoy es bastante complicado por los plazos y la cantidad de jugadoras. Uno de los problemas es la base de jugadoras. Estoy armando una lista de 35 y alrededor de 20 están en el exterior. No va a ser sencillo. Aparte no solo eso, capaz que en otro momento no se iban al exterior porque lo que ganaban no era una cifra alta. En la actualidad ese número sirve mucho más de lo que servía antes. Hoy 500 dólares no lo gana ninguna chica en Argentina jugando al básquet. 

-¿Se puede conseguir profesionalismo en el básquet argentino femenino? 

. Es alta, pero se puede intentar, sobre todo porque las pretensiones del profesionalismo que tienen las chicas no es lo que tiene el masculino porque, si bien no digo que esté bien, se adaptan mucho más fácil. Entonces, es probable que las pretensiones para ser profesional sean mucho menores que en el masculino. 

- Hoy es impensable que una chica veterana, en el sentido de más de 22 años, no tenga que trabajar.  

. Es imposible, puede haber algún caso, pero no es lo general.  

- Seguro que tuviste tu análisis con todo lo que pasó con las becas. ¿Tenés tu postura? Porque al que está afuera no termina de entender cómo funciona eso. Porque al elegir una u otra jugadora le estás cambiando el sustento a una u otra.  

. Hay que hacer lo mejor para el equipo. Si lo mejor es que estén estas jugadoras serán estas jugadoras. Esta lista de las que tenían las becas no las hice yo, tampoco sé cómo se hizo. Por el momento siguen estas jugadoras con las becas, pero luego daremos la lista de algunas que tendrán una beca a partir de este momento. No estoy empapado de cómo es el proceso, mi idea no es cambiar nada por el momento, pero el entrenador después dará una lista. La función de la beca es que puedan tener un ingreso que les permita tener una dedicación profesional. Es algo más filosófico, porque hay algunas que están en el exterior que tendrían que cobrar y otras que están acá que no están en la selección y deberían cobrar. Es una rosca enroscada, valga la redundancia. Pero hay que hacer lo mejor para el equipo y vamos a ir objetivamente por ese lado.  

-¿Hay 35 becas? 

. Que yo sepa no. Esa va a ser una lista de seguimiento, y voy a hablar personalmente con cada una de esas jugadoras para decirles que yo las tengo en cuenta para el proceso. A partir de eso se verá qué hacemos con el procedimiento administrativo.  

- Me habías dicho que tenías la intención de ir visitándolas todo el año. 

. Yo quisiera poder viajar antes de fin de año, pero hay que ver cómo está la competencia, si todo se inicia como está estipulado. Querría hacer un viaje por Europa, no sé si por Estados Unidos, en noviembre, ya que ahí tenemos más de diez o 15 jugadores.  

- En lo referido a la selección puntualmente, si tuvieras que marcar tres ejes que hay que enfocar mirando a París 2024, ¿dónde están los puntos organizativa y basquetbolísticamente hablando?  

. Organizativamente dejame hacer un poco de pie, porque no tengo en claro cómo está la parte logística y administrativa puertas adentro. Quiero saber dónde estoy parado, me parece que el tema logístico es importante para cualquier equipo y en especial para la selección. En cuanto al juego me parece que hay una camada de jugadoras que tiene una oportunidad de llegar al Mundial nuevamente. No creo que esas jugadoras no estén para hacerlo, todavía tienen hilo para dar y es una buena oportunidad para hacerlo. La forma de juego es la que siempre intenté de hacer. Con la mayor va a ser complicado porque no tenemos tanto tiempo para entrenar. Pero vamos a tener que idear alguna cosa, tengo la ventaja de que ya dirigí a algunas de ellas. No las más chicas, pero las más grandes me conocen y saben cómo es el método. Eso es una ventaja que tenemos que tratar de aprovecharla.  

-¿Hay una nueva era en cuanto a la forma de jugar en el femenino? 

. Sí, es algo general. Se juega mucho más rápido y dinámico. No sé si tiro de tres puntos, porque eso hay que ver si tenés material para hacerlo. En eso tengo algunas reservas. Por ejemplo, Obras no era un equipo que lanzaba mucho. No porque no queríamos, sino porque no teníamos especialistas. No creo que haya que tirar rápido, sino jugar rápido y tratar de tirar el mejor tiro posible en el menor tiempo posible. No estoy tanto de acuerdo, me encanta el tiro de tres, pero me parece que hay que hacer buena selección de tiro. Es más, el año que salimos quintos terminamos con 28% en lanzamientos de tres puntos. Sí jugar rápido y generar situaciones rápidas, pero éramos un equipo que terminaba mucho en la zona porque ahí éramos eficientes. Hay que buscar la eficiencia. Me encantaría tomar 25 o 30 triples por partido, pero hay que ver si tenemos el material posible.  

-¿Cuerpo técnico? 

. Sebastián Silva y Sandra Pavón son los asistentes y Federico Bernal el preparador físico. Estoy buscando un asistente más.  

- Me habías dicho también de armar dos kinesiólogos y dos preparadores físicos.  

. La idea es que Federico tenga un profesor más y aparte un utilero y un médico, obviamente.  

-¿Qué es lo próximo que hay, a lo primero que tenés que enfocar? 

. En diciembre tenemos el clasificatorio U18 para el Mundial U19 de Colombia, que se pasó para diciembre en Colombia.  

- Hoy publiqué una nota con Bedoya que medio que dejó dicho que no habrá nada este año. 

. Lo próximo que tenemos, que es lo que más me preocupa, es el clasificatorio U18, porque a partir de eso se clasifica al Mundial de Hungría U19.  

-¿Y ventanas cuándo hay? 

. El proceso de mayores es el Sudamericano en mayo, los cuatro primeros se clasifican a la AmeriCup de junio del año siguiente y los cuatro primeros de ahí se clasifican a las ventanas, que tienen 16 equipos y 12 van al Mundial. Esas ventanas son cuatro cuadrangulares y se clasifican tres por zonas.  

- O sea que es casi tan difícil ir al Mundial como ir a un Juego Olímpico. 

. No, casi no. El proceso es el mismo porque son dos equipos y la verdad que se definen con cuatro cuadrangulares y se clasifican tres. Sin campeón de los Juegos Olímpicos, porque ahí va Estados Unidos. Nosotros jugamos la AmeriCup con ellos, Brasil, Puerto Rico, Canadá. Primero hay que entrar entre los cuatro del Sudamericano, después entre los cuatro de la AmeriCup y después hay que entrar en una zona en la que te tocan dos europeos. Es una masacre. Vuelvo a decirte, nosotros somos 27 en el ranking.  

-¿Antes de París tenés algún objetivo intermedio? 

. El primer objetivo grande es ir al Mundial 2022. Después en el 2023 tenés Sudamericano, AmeriCup y clasificatorios para los Juegos de 2024.  

-¿Las ventanas son después del Sudamericano? 

. Sí, no creo que sean en noviembre porque están las Olimpíadas en el medio. No sé si se va a jugar AmeriCup en junio, Olimpíadas en agosto y ventanas en noviembre. Son cuatro sedes. No sé si será noviembre o noviembre y febrero, pero no tengo claras las fechas. Son zonas de cuatro que se clasifican tres. Las ventanas no son de América, sino mundiales. No podés jugar una semana, creo que lo tenés que hacer en una sola sede. Ellos lo presentan como una ventana, pero es un Preolímpico, porque te toca por ejemplo Nigeria, Polonia e Italia.  

Fabián García / [email protected]
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