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Los Angeles Clippers no pudieron continuar por la buena senda y este jueves sufrieron una derrota en su visita a Illinois. El elenco de Doc Rivers cayó ante Chicago Bulls por un ajustadísimo 83-80, en una noche donde padecieron toda la potencia y calidad de Pau Gasol. El español fue la figura del United Center con 24 puntos, 6 rebotes, 2 robos y 2 tapas.

Blake Griffin fue lo más destacado en la visita con 18 puntos y 11 rebotes, independientemente de haber sido expulsado por una falta flagrante en el tercer periodo (sobre Taj Gibson). Aunque el equipo no pudo ganar, los Clippers mostraron mejores momentos sin la presencia de uno de sus jugadores estelares (de hecho empataron el juego poco después de que Griffin fuese expulsado). Pablo Prigioni no tuvo minutos.

El impulso de Griffin y un buen soporte defensivo permitieron que los Clippers arranquen la noche un poco más finos. De la mano del ala pivote, con ocho de los primeros trece tantos, los angelinos se mostraron más intensos y arrancaron 13-6 arriba.

Sin embargo la historia empezó a equipararse rápidamente, gracias a los puntos de Gasol y en constante asedio a la ventaja de la visita. Un triple del español sobre la chicharra dejó a los Bulls abajo por la mínima de 24-23, en un primer parcial cambiante y con pasajes productivos para ambos bandos.

La vía de los triples fue clave para Chicago, sobre todo en el comienzo de un segundo parcial donde fue ampliamente superior. Los Clippers perdieron intensidad, el anfitrión combinó un par de lanzamientos externos (Brooks y Mirotic) con un buen balance en los dos aros y sus virtudes se potenciaron: carrera de 13 a 0 para pasar al frente por 36-24.

Luego el trámite se diluyó un poco, y aunque los Clippers acabaron con esa marcada sequía sin anotar tampoco tuvieron demasiada fluidez y se les hizo difícil descontar en gran medida. Con ventaja de 44-35 a favor de Chicago, el partido ingresó en su descanso largo.

Griffin reapareció con puntos importantes en el arranque del tercer parcial, aunque las buenas rachas de Gibson y Gasol permitieron que los Bulls. El transcurso siguió siendo parejo porque Chicago siempre tuvo una respuesta ante cada intento de remontada por parte de los Clippers, con el dueño de casa entrando al último capítulo arriba por diez (64-54).

Siendo un tanto sorpresiva, una lluvia de triples de los angelinos emparejó la historia en un abrir y cerrar de ojos. Rivers (1), Johnson (1) y Smith (2) se anotaron en el bombardeo de los Clippers e igualaron el duelo en 66 con poco más de siete minutos por jugarse.

Los Bulls contestaron con triples de Rose y Gasol, mientras que los Clippers continuaron gozando de la misma fórmula (Paul y Stephenson también se despacharon desde el perímetro). Sin embargo Chicago fue un poco más constante en cuanto a su efectividad, no únicamente desde los triples sino que también lo hicieron a nivel global.

En un peleadísimo final, aunque los Bulls llegaron a colocarse 83-77 arriba restando 45s, los Clippers tuvieron en sus manos la chance de forzar un suplementario. Primero apareció Johnson con un efectivo y nuevo bombazo (83-80), Butler no pudo convertir lo que hubiese sido una aliviadora conversión para Chicago pero en la vereda de los californianos tampoco hubo efectividad.

Con 9 décimas por jugar, Paul erró el triple que hubiese igualado el choque, tras su fallo Butler recuperó la bola y terminó por decretar la victoria para los Bulls por un sufrido pero más que necesitado 83-80. Así, Chicago le puso fin a una racha llamativa de cinco derrotas al hilo en su casa y volvió a sonreír.

. Pablo Prigioni (Los Angeles Clippers): No ingresó.