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La prensa era muy simbólica. Unas zapatillas Nike Air Jordan I, primer modelo que tuvo el atleta con su nombre, con la clásica combinación blanca, negra y roja. Las usó en 1985 y la semana pasada habían salido a remate por parte de la prestigiosa casa Sotheby's, con una base de 150.000 dólares. 

Durante toda la semana la contienda fue aumentando el precio del artículo, pero lo sorprendente fue que, en las últimas horas, se produjo una pelea entre varios vendedores que llevó a que el valor casi se duplicara ayer domingo en la hora final de la subasta. Según informó la empresa, participaron 10 personas de 6 países distintos en la disputa.

La cuestión es que se las terminaron llevando por 560.000 dólares, destrozando el récord anterior por unas zapatillas deportivas, que era de 435.000 dólares pagados el año pasado por unas Nike Moon Shoe, el primer modelo de la marca en la que se utilizó la revolucionaria suela de tacos de goma.

Las Air Jordan salieron a subasta conjuntamente con el final de la serie The Last Dance y el artículo pertenecía a la colección de Jordan Geller, fundador del primer museo del mundo dedicado a las zapatillas de deporte, Shoezeum. Además del valor del modelo, estaban autografiadas.