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Sam Smith es uno de los periodistas más reconocidos de la NBA y, particularmente, de Chicago. Durante muchos años trabajó en el Chicago Tribune y desde hace 25 escribe en NBA.com y en el sitio oficial de Chicago, www.nba.com/bulls, pero su nombre se hizo conocido cuando en 1991 publicó el libro "The Jordan Rules", que analizaremos en otra nota. En 1995 hizo un segundo libro: "Second Coming", parafraseando la segunda etapa de Jordan en Chicago, y aquí fue donde lanzó uno de sus dardos más virulentos. 

Smith, polémico siempre, publicó en ese libro que, luego de un acercamiento que tuvo con Jordan un candidato demócrata negro al Senado de los Estados Unidos, para que lo apoyara en su campaña contra otro, republicano y blanco, además de racista. Jordan se negó, argumentando que no se metía en política. Pero luego, según Smith, le dijo a un amigo "los republicanos también compran zapatillas". Cabe recordar que Jordan ya era el ícono máximo de Nike, marca con la que siguió relacionado toda su vida, incluso al día de hoy. 

La frase quedó para siempre, pese a que Smith, que con el tiempo fue bajando los decibeles de su polémica con los Bulls y con Jordan, dijo que se había malinterpretado la frase, que no había sido tan así, que fue en broma y unas cuantas cosas más. No fue suficiente para acallar las críticas. La más dura fue de Kareem Abdul-Jabbar, un reconocido defensor de los derechos de la raza negra.

En 2015, en un documental que se hizo sobre su carrera, Karemm fue contundente: "No puede temer perder las ventas de zapatillas si te preocupan sus derechos civiles y humanos. Eligió el negocio por encima de la conciencia. Es desafortunado para él, pero tendrá que vivir con eso". 

Smith, aprovechando la popularidad que tomó todo lo relativo a Jordan en estas semanas, escribió un artículo antes de la salida del docu en donde dijo: "Perdón Mike, esto pasó por mí. No te mereces todas estas críticas baratas que te has comido durante tantos años por lo que fue una fantástica observación de cállateynomejodas. Hubo mucha hipocresía en los que le recriminaron por su aparente indiferencia ante los problemas sociales".

Smith da a entender que la frase fue una broma como para demostrar una vez más que él ganaba a todo y competía permanentemente. En The Last Dance, Smith (que en 2014 escribió un tercer libro, esta vez sobre Jordan solamente, No habrá un próximo) fue reporteado para hablar del tema, algo que se verá en los próximos capítulos. La realidad es que quedó pegado a un tema confuso y difícil para su gente, que nunca se lo perdonó del todo.