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El Draft está a la vuelta de la esquina y las franquicias realizaron diferentes tipos de análisis en las promesas que participarán del mismo, con el objetivo de tener la radiografía exacta de cada uno de los prospectos y así utilizar sus diferentes picks de la mejor manera posible. Uno de ellos consiste en la típica entrevista individual entre miembros de las organizaciones y los prospectos en cuestión.

Es icónico el descarte que realizaron los Suns sobre Kawhi Leonard en la previa al Draft por el hecho de haberlo notado nervioso en esta charla mano a mano, más precisamente por un exceso de sudoración. También suelen darse algunas preguntas un tanto extradeportivas, algo que volvió a suceder y que trascendió en la previa a este Draft. A Kevin Knox, jugador que formó parte de la Universidad de Kentucky, le consultaron si tenía un hijo. Sorprendido, el atleta les confirmó que no, pero desde la franquicia (que no se ha develado), respondieron que tenían razones para creer que sí.

Finalmente, ante la insistencia en la negativa de Knox, desde la organización dieron marcha atrás con su determinación, excusándose de que todo era una broma. Una de los principales facetas que tienen en cuenta en esta clase de entrevistas es la psicológica, así como la capacidad de los jóvenes para afrontar diversas situaciones; quizás haya tenido que ver con eso, pero no quedan dudas que fue una pregunta inusual.