Golpe bajo: sin Griffin y Paul, los Clippers se desmoronan
22:40 27/04/2016 | Baldazo de agua fría para los Clippers, que con las lesiones de Blake Griffin y Chris Paul reducieron sus chances en estos playoffs. Duro golpe.
En tan 24 horas a los Clippers se complicó con creces sus sueños de pelear por un anillo. Si bien en el Oeste hay otros equipos que aparecen con ventaja como Golden State y San Antonio, lo cierto es que las dos grandes lesiones que padecieron han dificultado las chances de los angelinos. Con Chris Paul y Blake Griffin sin poder estar en el futuro inmediato, las posibilidades han mermado.
Lo de Paul es un poco más leve pero no por eso deja de ser importantísimo, por su gigantesco peso en el equipo. El base estará afuera de las canchas entre 4 y 6 semanas, después de haber sido operado este martes de una fractura en el tercer metacarpiano de su mano derecha. La figura salió lesionada en el anterior juego ante Portland Trail Blazers.
La baja de Paul es un baldazo de agua fría, porque hipotéticamente no estará fuera de lo que resta de la temporada pero recién podría reaparecer en escena en finales de conferencia. Para estos Clippers, que por ahora están empatando 2 a 2 en la primera ronda de playoffs ante Portland, el llegar a la definición del Oeste parece muy complejo porque si atraviesan su actual llave en semifinales se deberán enfrentar a Golden State o Houston (los Warriors están 3-1).
El caso de Griffin es un poco más complejo. Los Clippers anunciaron en las últimas horas que el ala pivote se perderá el resto de la temporada, emitiendo un comunicado donde advierten que su lesión en el cuádriceps derecho se ha agravado. El golpe duro es que Griffin no podrá volver a jugar en lo que resta de la 2015/16 por esta dolencia.
Griffin no pudo terminar de jugar el pasado juego ante los Blazers, y los exámenes médicos determinaron que no ha sufrido más percance que el de la propia recaída y que estará listo para el training camp previo a la temporada que viene. Su salida, sumada a la ausencia de Paul, deja a los Clippers en la cuerda floja.