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A la hora de hablar de resultados finales que no terminar de explicar el verdadero trámite, esta serie entre los Cavaliers y los Pacers podría ser un ejemplo claro: Indiana tuvo chances concretas para ganar los cuatro juegos, pero no pudo dar el zarpazo en ninguno de ellos y el campeón terminó barriendo el cruce por 4-0. Jerarquía individual/Lebron, las principales razones para ello. Este domingo, Cleveland sobrevivió a una remontada tremenda de los locales y se llevó el 106-102 para avanzar a las semifinales del Este.

Sacando un primer cuarto levemente favorable para los Pacers (24-22), Cleveland estuvo siempre en control de las acciones. Ganó la primera mitad por 58-52 y se metió a los 12 minutos finales arriba por 11: 88-77. Los de Lue parecían encaminados a un 4-0 sin sobresaltos, llegando a tener incluso máxima de 13 en el cuarto período. Sin embargo, los Pacers todavía tendrían un último empuje ante su gente.

Como le ha pasado en otras ocasiones, la ofensiva de los Cavaliers se trabó en el cuarto parcial y poco a poco, Indiana fue metiéndose en partido. A tal punto llegó la reacción que con dos conversiones consecutivas de Thaddeus Young, los de McMillian tomaron ventaja de 102-100 restando un minuto y medio. De todas maneras, Cleveland respondió con una bomba de James, la cual sumada a un par de pérdidas inoportunas de los locales, terminaron inclinando la balanza para la visita. Paul George tuvo una última chance restando dos segundos y abajo por tres, pero su triple no ingresó y Lebron definió la historia desde la línea.

James fue el máximo anotador del partido con 33 puntos y 10 rebotes, mientras que Kyrie Irving lo acompañó con 28 tantos. Por el lado de los Pacers no alcanzaron los 22 de Lance Stephenson ni los 20 de Myles Turner, en una tarde donde Paul George lanzó 5 de 21 de cancha. Ahora los Cavaliers esperan por el ganador de la serie entre Milwaukee y Toronto, actualmente igualada en dos.