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La Unión (Formosa) 0 vs. San Lorenzo (CABA) 1

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- LA UNION (0) - SAN LORENZO (2)

. Juego 1: La Unión 73-San Lorenzo 75 (0-1)
. Juego 2: La Unión 60-San Lorenzo 62 (0-2)

. Hora: 21:00. Dónde verlo: TyC Sports.

. Arbitros: Fernando Sampietro, Diego Rougier, Alejandro Ramallo.

. Estadio: Héctor Etchart (CABA).

. Historial: 2-2. En la 2015/16: 2-2 (La Unión 90-80 en Formosa; 83-78 en Obras; San Lorenzo 75-73 y 62-60 en Formosa).

Tras los dos partidos disputados en Formosa, con sendos triunfos de San Lorenzo en la última bola, la pregunta que sobrevuela la serie es: ¿es auténtica la paridad entre ambos o San Lorenzo solo aprieta lo necesario para ganar los partidos? Debemos reconocer que a veces nos queda la primera sensación y, en otras, la segunda.

Suena repetido hablar de este tema, pero la salida de Green primero y la lesión de Konsztadt después como que pusieron la final en un lugar donde no había forma que San Lorenzo no fuera campeón, sobre todo por cómo venía jugando el equipo de Lamas en los playoffs, pero la realidad marca que La Unión tuvo un tiro en el primer partido y dos en el segundo para ganar en la última pelota. ¿Entonces?

Los dos juegos fueron de trámite distinto, más allá del cierre parecido. San Lorenzo ganó el primero con una bestial diferencia en el aporte de la banca (32 puntos a 0), mientras que en el segundo dominó claramente al principio, se dejó estar, llegó a verse 7 abajo a 5:36 del final y lo dio vuelta con un parcial de 12-3 para ganarlo. 

Se podría decir, en resumen, que San Lorenzo está 2-0 arriba por jerarquía individual, porque cometió menos errores en los momentos clave, porque más jugadores aportaron cosas en relación a su rival y, en contraparte, porque La Unión falló cuando no tenía que fallar. 

Quizá suene demasiado simple. Lo es. Es cierto que La Unión pudo hacer mejor algunas cosas, pero ¿se le puede reprochar mucho en estos dos partidos, jugando prácticamente con 6 jugadores? Poco. Claro, estamos en la final, y no alcanza con cumplir o hacer un papel decoroso. Pero la verdad es que, para que La Unión pueda revertir la historia, deberán darse muchas cosas a la vez.

La primera, que esta noche juegue Konsztadt y que, si lo hace, esté al menos en un 50% de sus posibilidades físicas, porque si no no ayudará mucho. Al momento, su presencia sigue en duda, aunque evolucionó bien en estos dos días de su lesión y hay más chances de que juegue a que no lo haga. 

Con él, como dice Narvarte, agregaría "un cuerpo más", que no es poca cosa ante el desgaste tan concentrado en los cinco titulares. Pero pensar que su presencia modificará sustancialmente la serie sonaría ingenuo. Porque la otra parte de la historia es que San Lorenzo sí puede crecer mucho más en relación a lo que hizo hasta el momento.

Defendió muy bien de a ratos, se desconcentró bastante por momentos, tuvo juego interior irregular, perdió muchas pelotas, tuvo malos porcentajes en jugadores clave (Aguirre 4/22, Mata 1/12, Elliott 6/18) y desequilibró sobre todo con Herrmann, pero no mucho más. ¿Alcanza eso? Hasta ahora sí. Habrá que ver cómo se dan los juegos en Buenos Aires. La Unión fue el equipo con más triunfos de visitante en la regular (13) y en los playoffs se llevó 2 de 5. Ahora es una situación distinta, pero no sorprendería que vuelvan a dar la nota tras lo hecho ante Olímpico.

La serie está más abierta que el 0-2 que marca el resultado. La historia juega en contra de La Unión. Solamente una vez un equipo remontó un 0-2 de local en una final. Fue Boca en la 2003/04 ante Gimnasia LP, pero uno de esos partidos ni siquiera se jugó, porque Boca lo perdió por no tener el reloj de 24 en condiciones. De todos modos, las estadísticas de este tipo tienen doble efecto: o te hunden o te motivan. Veremos para qué lado le pega a La Unión.