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A principios de este mes, Robert Sarver vendió oficialmente sus acciones en Phoenix Suns a Matt Ishbia. Si bien las cosas no terminaron bien para el antiguo propietario, está tratando de corregir sus errores, o al menos limpiar su imagen. Durante el verano, una investigación descubrió años de evidencia de que Sarver estaba creando un ambiente de trabajo hostil. Después de estar suspendido por un año, tomó la decisión de vender el equipo, y con ello llegó el traspaso de Durant.

Un informe reciente de ESPN sugirió que Robert Sarver está haciendo un último acto de caridad tras su salida. Está entregando bonos de 20 mil dólares a una gran cantidad de empleados de los Suns y está donando cinco millones de dólares a la organización benéfica del equipo. La historia citó que cerca de 300 trabajadores recibirán este bono.

Teniendo en cuenta todos los hallazgos de la investigación, es un movimiento un tanto correcto, y otro tanto con tintes publicitarios para mejorar su imagen; de todas formas Robert Sarver intenta terminar su historia con una buena nota, que dentro de la cancha nunca pudo ser exitosa, y en esta nueva etapa Phoenix ya ha comenzado a apostar fuerte.