Informe

¿Cómo les fue históricamente a los argentinos en los playoffs NBA?

17:07 19/05/2021 | Siete nacionales supieron lo que es competir en la postemporada. Facundo Campazzo, a partir del sábado, será el octavo. El balance de todos.

Campazzo, Ginóbili, Scola, Nocioni y Prigioni

El play-in comenzó ayer. Los playoffs arrancarán el sábado. La mejor época de la NBA dio inicio y, de nuevo, la presencia argentina gritará presente. Facundo Campazzo y sus Nuggets se medirán en la primera ronda ante los Blazers, el segundo día de los mencionados a las 23:30. Expectativa, nerviosismo, ansiedad y emoción, se despiertan múltiples sensaciones, inconmensurables en su mayoría, inexplicables en demasía. 

¿Recuerdan el número de camiseta del cordobés? Esa cantidad de argentinos es la que supo lo que es competir en una postemporada, cuando los aros se achican, los planteamientos se ajustan, la planificación se acrecienta y el margen de error escasea como las monedas en el país. 

La hora de la verdad, que muchos nacionales conocieron, está más cerca que nunca y el que mejor récord tuvo en la postemporada fue, quién más si no, Manu Ginóbili. El bahiense se retiró con un balance de 29 victorias y apenas 11 derrotas, logrando cuatro títulos (2003, 2005, 2007 y 2014) con los Spurs y siendo el octavo jugador en la historia de la NBA con más presencias en esa instancia (218 encuentros disputados).  

 

 

Otro que supo levantar el anillo hacia el cielo fue Fabricio Oberto, campeón con los Spurs en el 2007 junto a Manu y segundo argentino con mejor balance de ganados y perdidos, con 7-3. Además, lo que quizás no aparezca en muchas estadísticas de revisión es el que de Las Varillas tuvo un papel clave en el trabajo sucio, llegando al punto de salir desde el inicio en esos cuatro choques que tardó San Antonio en derrotar a Cleveland en las finales de esa temporada. "El mejor peor jugador", lo apodó Gregg Popovich. 

El único otro argentino con récord positivo es el gran Luis Scola, que consiguió cinco triunfos y cuatro contratiempos. Incluso, el interno que disputó la 2020/21 en el Varese se encontró a la vuelta del campeonato en dos ocasiones, cayendo en las finales del Este en dos oportunidades, en 2013 con los Pacers y en 2014 con los Raptors.

Carlos Delfino rozó la paridad con un balance de 4-5 en la postemporada, en la que siempre aportó lo suyo como tirador o corriendo la cancha. Como Scola, también estuvo cerca de llegar a la instancia decisiva con los Pistons, pero cayó en las finales del Este en 2006 y 2007, con papeles mucho menos protagónicos que los de Luifa.

Pablo Prigioni es, junto a Carlos, quien casi llegó a un balance positivo, perdiendo en tres ocasiones y ganando la misma suma. Curiosamente, la última vez que los Knicks jugaron playoffs (2013), el argentino fue uno de los nombres más sólidos de la rotación, dando orden y generación. No solo eso, se encontró golpeando la puerta del anillo en 2015 de la mano de los Rockets, pero los suyos cayeron en la final de la Conferencia Oeste. 

 

 

Los últimos dos fueron Andrés Nocioni y Walter Herrmann. Ambos pudieron ganar solo un partido cada uno, a la vez que el primero perdió en cuatro partidos y el segundo en apenas uno. Con Chicago, Chapu estuvo cerca de llegar a las finales del Este en 2007, pero perdió en la ronda anterior, mientras que el de melena rubia se quedó a una llave de la pelea por el título un año después, vistiendo la blanca, roja y azul del equipo de la Ciudad del Motor.

El sábado aguarda Portland y Campazzo tendrá un país alentándolo. Arribó por la puerta de atrás, no lo conocía nadie y sufrió la falta de respeto de algunos árbitros y rivales. Nunca dejó de intentarlo, se quedó listo y preparando para la oportunidad.  

 

 

Tic, tac... pasa el reloj, se cae la arena. Facundo y el sueño del anillo que a muchos argentinos desvela. 

¿Hasta dónde llegará su faena?  

 

Ignacio Miranda/ [email protected]
En Twitter: @basquetplus
En Twitter: @nachomiranda14

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