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Trae Young es uno de los mejores guardias del planeta. Su caja de fundamentos roza lo infinito, jamás parece terminarse. Mide apenas 1,85, pero aprendió a utilizar su pequeña altura de forma positiva, siendo una amenaza constante con el tiro exterior, controlando los tiempos y liquidando con variantes cerca del aro.

Ayer le tocó a Leandro Bolmaro intentar mitigar su relevancia, nada más y nada menos que saliendo como titular para los Timberwolves, que no contaron con D´Angelo Russell ni Patrick Beverley (los dos bases más importantes de la franquicia).

Con muchísimo para mejorar, pero abrazando el desafío, el cordobés se mantuvo competitivo hasta que debió salir a mediados del tercer cuarto por un golpe en el muslo, que afortunadamente no pasó a mayores.

En ambos costados de la cancha dejó puntos positivos y negativos que se intentarán explicar en este informe, luego del primer juego de Bolmaro en el cuadro titular de una franquicia NBA, ¡con apenas 21 años! Sí, ¡21!

Puntos positivos: defensa, organización y carga al rebote ofensivo
“Es muy bueno el momento de Leandro Bolmaro más allá de su golpe en el muslo. Se está consolidando en la rotación y ha sumado buenos minutos en los últimos juegos. Lo que más valoro es su defensa. Tiene talento, agresividad, corazón y caradurez: buen combo”, dijo Andrés Nocioni en su cuenta de Twitter.

¿Algo sabrá no? Según NBA.com/stats, vía Leandro Carranza, el cordobés fue el jugador de Minnesota que más tiempo defendió anoche a Trae Young, marcándolo durante 4:29 minutos en los que el de Atlanta logró nueve puntos, cuatro asistencias, 2/5 en tiros de campo y 1/2 en triples.

Los guarismos fueron satisfactorios para Young, pero Bolmaro logró el objetivo por momentos de hacerlo jugar incómodo en diferentes esquemas propuestos por Chris Finch. Le provocó tres pérdidas a través de la defensa seguidor, y en los atrapes o saltos de Karl-Anthony Towns, y con el tiempo aprenderá a utilizar aún mejor su físico para molestar atrás.

Leandro Bolmaro transition layup after forcing the turnover from Trae Young pic.twitter.com/dy1B4JDzFS

— Timberwolves Clips (@WolvesClips) December 7, 2021

Por otro lado, fue el armador principal, pero por momentos terminó siendo Anthony Edwards el portador de balón primario. A pesar de eso, Leandro supo mantenerse vocal y generando para el resto, con una habilitación en el pick and pop (apertura del grande en la cortina), y favoreciendo la circulación.

Solo cuatro compañeros lograron otorgar más pases que Bolmaro (26) y también logró realizar una asistencia potencial (oportunidad clara de anotación para un jugador tras un pase, con solo un pique posterior para que quede registrada como tal) y una secundaria (la anterior a la asistencia propiamente dicha).

Por último, el punto positivo final fue su insistencia al rebote ofensivo. En una liga en la que la norma es regresar rápido a la transición defensiva, el guardia de Minnesota buscó siempre generar segundas oportunidades y, como su rendimiento atrás, poco a poco empezará a acostumbrarse a finalizar con agresividad en esas chances.

Capturó dos rebotes en ataque ante Atlanta, en un juego en el que apenas lo superaron en el apartado Towns (cuatro), Jarred Vanderbilt (cuatro) y Jaden McDaniels (tres).

Puntos negativos: tiro de tres, defensa en el poste bajo y finalizaciones cerca del aro
El argentino solo logró anotar uno de sus siete intentos de tres puntos esta temporada en Minnesota, algo sumamente disímil a lo que le pasó en la G-League, donde convirtió 12/31 en la tercera dimensión. Los tiempos, la calidad de los rivales y las defensas de los equipos tienen un impacto considerable en la cuestión y Bolmaro todavía debe adaptarse.

En el poste bajo, a su vez, el exjugador del Barcelona sufrió cuando en la primera mitad Finch por momentos probó los cambios en las cortinas directas. Danilo Gallinari le anotó un up-and-under exquisito (arriba y abajo con los brazos) y Clint Capela logró otorgar una asistencia cuando lo defendió Bolmaro. 

Necesitará estar más establecido en esa zona, algo similar a lo que hace Campazzo que compensa su falta de talla con movimiento de manos e intentando ponerse siempre delante de su marca para que no reciba y genere.

Finalmente, solo pudo anotar dos puntos (en transición) y falló en esos dos intentos tras capturar los rebotes ofensivos. Su atleticismo está ahí y, como se explicó anteriormente, es cuestión de tiempo para que se ambiente.

Conclusión: el futuro es esperanzador
Activo en defensa, dispuesto a mantenerse siempre aprendiendo en ataque y utilizando su impávida personalidad, Leandro Bolmaro tiene todos los atributos para ser un sólido jugador de la NBA. Paciencia, se cocina a fuego lento. 

Ignacio Miranda/ [email protected]
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