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Los últimos cinco minutos para el final del partido, siempre y cuando la diferencia entre los dos equipos que estén compitiendo sea de cinco puntos o menos, atrapan a cualquiera y a lo largo de los años esos instantes no aptos para corazones flojos adquirieron diferentes acepciones. 

La hora de la verdad, la chiquita, el momento que separa a los niños de los hombres, el clutch... Muchas denominaciones, un mismo significado. La mayoría se esconde, algunos pocos piden el balón y deciden con la frialdad que no se hereda, con aquel talento natural que permite decidir mejor cuando todo parece peor, más rápido, más volátil.

Ayer los Nuggets estuvieron en un lapso de esos en el partido en el que se enfrentaron a los poderosos Clippers y fue Facundo Campazzo quien supo demostrar, una vez más, de qué está hecho. El argentino consiguió anotar un triple y dos libres en el cierre del juego para contribuir a que los suyos se queden con una gran victoria 110-104 y escalen al tercer puesto de la Conferencia Oeste.

Lo del base en Los Ángeles fue preponderante y solo descansó 2:87 minutos en el último cuarto. Decidió bien, enmendó algunos errores y activó su mira cuando necesitaban su ayuda. Pero, ¿cómo le está yendo en el clutch a nivel general esta temporada si se lo compara con el resto de los jugadores de los Nuggets? Y, a su vez, ¿qué tal le va con respecto a los otros novatos de su camada? 

Partiendo de sus promedios generales, y sin contar a Gary Harris ni RJ Hampton, que fueron traspasados antes de la fecha límite, el exjugador del Real Madrid es el séptimo con mayor media de minutos (3,1 por juego), el sexto en porcentaje de uso (11,4%), el mejor en porcentaje de robos (75,0%), el segundo en ratio de asistencias (35,7) y el tercero porcentaje de entregas (33,3%). 

No solo eso, a la hora de hablar de los ratings el armador es el tercero en rating defensivo (98,5) de los Nuggets, si se tienen en cuenta los jugadores del equipo que promedian dos o más minutos en el clutch, el tercero en rating neto (22,8) y el cuarto en ataque (121,3). 

Los números totales también están a la altura y hasta ahora Campazzo disputó diez partidos en el clutch, ganando ocho de ellos y perdiendo solo dos en 31 minutos. Repartió cinco asistencias (quinto en el equipo), tuvo cuatro pérdidas (segundo), tres robos (segundo), una tapa (cuarto). 

Por otro lado, sus promedios bajan un poco a la hora de cuidar el balón y anotar en el espacio exterior cuando las defensas se cierran con Nikola Jokic, algo que no ocurrió anoche, cuando Facu castigó esos ajustes. Marcha sexto en ratio de asistencias/pérdidas con 1,25, apartado en el que a partir de 2,0 se considera un buen número. Lo mismo en su porcentaje de tiro verdadero o TS, en el que se posiciona noveno con 42,0%. 

Finalmente, la muestra se acrecienta en los últimos diez encuentros sin Murray, cuando el argentino aumentó su media de minutos a 4,6 y su porcentaje de uso a 16,7% para posicionarse como el primero de Denver en rating ofensivo (114,7), el séptimo en defensivo (90,7) y el segundo en rating neto (24,4), tiro verdadero con 72,5% y porcentaje de asistencias con 33,3%. Desafortunadamente, su ratio de entregas/pérdidas decreció a 0,67, lo que indica que descuidó un poco su seguridad con el balón. 

Tres encuentros fueron los que tuvo Campazzo en el clutch en los últimos diez partidos y allí se elevó en la mayoría de los promedios decisivos, en los que Jokic decide y el resto debe estar listo para liquidar de tres o atacando el aro, con seguridad en el traslado e intesidad atrás, donde Denver mejoró muchísimo con la llegada de Austin Rivers y Shaq Harrison, unidos a Facu, Dozier y compañía.

La personalidad de Campazzo será nodal en los playoffs. El argentino está acostumbrado a esos momentos y vive para ellos. Los guarismos lo reflejan y él se ríe en cada ocasión que lo puede demostrar. 

Se mofa de la presión, deleite y pura diversión.  

Ignacio Miranda/ [email protected]
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