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Martín, bueno, te sacaste las ganas.

- Sí, la verdad que sí, después de 19 años en el club la verdad que es emocionante. 

¿Dónde estuvo el secreto de este Gimnasia, en este cuadrangular sobre todo?

- Yo creo que venimos buscando hace mucho tiempo esto, la filosofía, la línea de trabajo del club, la confianza que tienen los dirigentes... Ante la adversidad por ahí no metíamos la bola, estábamos doce puntos abajo y nos pusimos a uno... Y es la mentalidad, ¿no? Le bajamos el score de lo que venían y bueno, terminamos coronándolo por el sacrificio de los jugadores.

Otra vez con dos segundas mitades muy sólidas desde lo emocional, ¿no?

- La verdad que sí, creo que en estas finales juegan mucho los nervios, entonces al comienzo no deja acomodarte en el juego; una vez que aflojamos eso y en el vestuario hablamos sobre que habíamos cometido varios errores defensivos y el juego pasaba por ahí, logramos coronarlo con esto.

¿Te habías preocupado con los 44 de Obras en el primer tiempo?

Sí mucho, porque sabíamos que con ese score perdíamos, porque se iban a 88-90 y bueno, los dejamos en 79.

Tardaron mucho en imponer ese juego interior, tardaron hasta hacerlo

- Porque Obras está en un gran momento y bueno, nos complicó muchísimo. Te raspan, te sacan para afuera, nos hicieron jugar dos metros fuera de la línea de 3 puntos... mérito de Obras.

Hace unos días en Comodoro hablábamos de cuánto podía influir este partido en el resto de la temporada

- Creo que te empuja para arriba, yo prefiero siempre esto y después analizar. No creo que te relajes pero bueno puede ser. Tendremos que construir una mentalidad de equipo ganador para seguir empujando.