Basquetplus.com

Hace mucho tiempo que venimos diciendo que irse a la NBA se ha transformado ya no en un objetivo, sino en una obsesión. Y si bien casos como Luka Doncic son los que llenan los ojos, la mayoría de los que intentan el viaje de forma temprana terminan perdiendo el tiempo o, como mínimo, buenos años de sus carreras para desarrollarse. 

El francés Evan Fournir, que llegó a los 20 años a la NBA y lleva 11 en la máxima competencia basquetbolística del planeta, habló al respecto en medio de la apabullante difusión mediática que está teniendo todo lo que se refiere a su compatriota Victor Wembanyama, el chico de 18 años y 2.20 metros que será el uno del draft 2023. 

Fournier habló con el sitio de su país, Basket USA, y dijo: "Evidentemente su juego es impresionante, pero personalmente lo que más me llama la atención de Victor es su comportamiento en relación a todo eso, cómo se posiciona... No quiero decir que sea una forma de madurez pero está seguro de sí mismo. Seguro de sí mismo, seguro de su fuerza. Él sabe a dónde quiere ir. De verdad, el chico, es muy centrado. Y es realmente raro. Es muy, muy sabio para su edad. Tengo muchas ganas de codearme con él en la selección de Francia, ver cómo se comporta, descubrir un poco al chico y ver su debut en la NBA. ¡Porque como francés, tienes que apoyarlo y esperar que lo haga todo bien! Es una muy buena esperanza para el baloncesto francés".

Sin embargo, Fournier, como sus excompañeros en la selección, Nicolas Batum y Tony Parker, alertó con la obsesión que muestran los jóvenes por irse a la NBA. Evan se centró en los chicos franceses, pero su idea puede trasladarse a los jóvenes de cualquier lugar del mundo: "Los muchachos hacen todo lo posible para ser reclutados, solo piensan en la NBA. De hecho, tienes la impresión de que el baloncesto es menos importante que el amor por el baloncesto, el amor por la pelota y por este juego, se volvió menos importante, de modo que el brillo de la NBA se está poniendo más grande. Redes sociales, darse a conocer, etc. Estamos en una pendiente, me parece, en Francia, lo cual es bastante preocupante. Y claro, como los chicos lo piensan cada vez más, se van cada vez más temprano, sin haber probado realmente en Francia ni en el mundo profesional. Es un gran problema, francamente es un gran problema real". 

Fournier hace un análisis interesante, además, de por qué ocurre esto: "Antes, los europeos eran reclutados solo si tenían un buen desempeño en su liga. Ahora apuestan cada vez más, en cuanto a los estadounidenses, por el potencial. Así que ahora los niños están siendo elegidos cada vez más alto en el Draft, lo que no era el caso antes, cuando realmente no han demostrado su valía. Para mí, esto es un error".

De alguna manera, el camino es: equipo NBA aprovecha el draft (a veces ni siquiera eso), para tirarse un lance con un extranjero con potencial, ese joven le sale barato (para lo que es el mundo NBA), lo prueba uno o dos años y, si sale, lo deja. Si no, lo descarta. El joven todavía tiene tiempo para volver a Europa y jugar, pero si esa prueba no fue la esperada, perdió dos años importantes de formación. Un ejemplo de este tipo es Leandro Bolmaro, pero hay decenas. 

Fournier cierra la idea yendo más lejos aun: "Como eres drafteado alto, al principio jugarás. Excepto que si no rindes tus primeros dos años y no muestras suficientes cosas, en el tercer año te conviertes en suplente. El cuarto año igual. Y desde el momento en que firmes tu segundo contrato, tu rol será el mismo que el año anterior, y no cambiará. Es decir que te ficharemos diciéndonos: 'Vale, es un 8º hombre, un 10º hombre…'. Entonces, subir en la jerarquía, aspirar a ser titular y tener mucho tiempo de juego, es súper complicado. Por eso hay que llegar siendo eficiente. A menudo tomo el ejemplo de Nico Batum. Cuando Nico, justo después del Hoop Summit, acierta todo, en todos los drafts simulados se espera que sea quinto. Excepto que Nico sabía, avisó y dijo que no estaba preparado, que venía de una temporada con 6 o 7 puntos en Le Mans. Que tenía que seguir con su aprendizaje, y así sucesivamente. Al final, fue drafteado en el puesto 27 cuando podría haber hecho un top 5, ¡excepto que el tipo estaba mucho más armado! Estaba más preparado, y sabemos la carrera que tuvo Nico". Clarito.