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Argentina sigue sumando rodaje de cara a los partidos frente a Venezuela y Panamá y se llevó el segundo amistoso ante Uruguay por 74 a 67. El equipo de Néstor García mostró varios pasajes interesantes de juego y en esta oportunidad no dependió tanto de un Facundo Campazzo que tuvo menos minutos pero sumó su intensidad, con 7 puntos y 5 asistencias en poco más de 23 minutos.

Carlos Delfino y Leandro Bolmaro fueron los goleadores con 12 puntos cada uno, seguidos por 11 unidades de Patricio Garino. Se vio un mayor juego colectivo, con 20 asistencias para 25 conversiones de campo y un goleo repartido, con 11 jugadores anotando.

Los primeros minutos mostraron la capacidad de conducción de Facundo Campazzo y un Carlos Delfino efectivo, con 8 puntos. A su vez, Leandro Bolmaro aportó un poco de todo, con intensidad defensiva y tiro de tres puntos. En ese contexto, y con un quinteto inicial en el que anotaron todos, los locales cerraron un buen primer cuarto con ventaja de 26 a 16.

En el segundo parcial las rotaciones de ambos equipos favorecieron a los uruguayos. En este contexto, Argentina perdió fluidez en ofensiva (5 pérdidas en la primera mitad y un 4/12 de campo en el segundo cuarto) tuvo algunas desconcentraciones en defensa. En ese contexto, llegaron al entretiempo al frente por un doble, 36 a 34.

Al regreso del descanso largo, Uruguay mantuvo su fiereza defensiva y le siguió creando problemas a la Argentina, sobre todo en el rebote defensivo y cerca del aro. Pero allí apareció nuevamente un José Vildoza determinante, para devolver tranquilidad, aunque los visitantes llegaron al último cuarto arriba por 54 a 52.

El cierre del juego se disputó con una gran intensidad, como en el primer amistoso. Allí tuvieron grandes tareas un Pato Garino que toma cada vez mayor rodaje y un Nicolás Brussino que hizo gala de su visión y encontró siempre al marplatense bien ubicado. Para el final reingresaron Bolmaro y Campazzo, quienes se hicieron cargo de la conducción y tuvieron un ladero efectivo como Nicolás Romano. Además, Tomás Chapero ingresó y tuvo un pasaje muy interesante como pivote definido en ambos costados. Fue victoria para una Argentina que suma rodaje y ya piensa en Venezuela y Panamá.