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Hace casi un mes que se encuentra radicado nuevamente en su Bahía Blanca natal. Hernán Jasen decidió abandonar España y mudarse con su familia definitivamente de regreso en Argentina. Y sin dudas su retorno al país encendió muchas ilusiones de que vuelva a jugar, algo que no hace desde hace la 2012/13 pero que está vigente como un fuerte deseo personal del jugador. No obstante, también hay otros proyectos en mente.

Uno de los clubes que salió a buscar a Pancho fue Alem, la institución en la cual se formó. Jasen ya arregló con Alem que brindará entrenamientos a sus categorías formativas y que muy probablemente empiece a jugar el torneo local a mediados de año. Alem ascendió a la primera división de Bahía después de militar 10 años en el ascenso y con el arribo de Jasen la entidad se ilusiona mucho más.

Por otro lado está la gran seducción de Bahía Basket. La organización dirigida por Pepe Sánchez (amigo personal de Jasen) viene tratando de fichar al jugador de 36 años (mañana cumple 37) desde hace mucho, y ahora que lo tiene cerca se abre una nueva puerta para sumarlo a sus filas sabiendo el toque de experiencia y calidad que le puede dar el alero.

Pero Jasen prefiere ir de a poco. Por un lado tiene muchas ideas positivas con respecto a las formativas del básquet, en Alem y sin descartar una chance de contribuir en Bahía, mientras que por el otro sector se entrena para ver en qué condiciones físicas se encuentra. El jugador con nutrido paso en la ACB no desestima ninguna posibilidad, y se lo nota entusiasmado con todos los proyectos que tiene en mente.

En diálogo con Básquet Plus, Jasen habló de este nuevo emprendimiento en Alem y el regreso al club de sus inicios, donde destacó la predisposición del club bahiense desde el primer momento. Dijo que su etapa como jugador no está terminada independientemente de dónde decida jugar y también habló de su relación para con Bahía Basket.

- Si bien el hecho de que un jugador de vasta trayectoria como la tuya regrese a sus raíces es algo que suele darse, no deja de hablar de la humildad y la identificación para con ese club que lo formó. ¿Qué cosas te movieron para decidirte por volver a Alem?
- Si me pongo a pensar hubo un cúmulo de situaciones que me llevaron a tomar la desición por volver al club para estar y ayudar. Desde el primer momento los dirigentes me abrieron las puertas para que exponga mis ideas, del aporte que puedo hacer con los conocimientos de mis pasos por la Selección Argentina y los clubes de Europa, permitieron que ponga todo eso arriba de la mesa y se empiece a armar un proyecto. Me gusta mucho la idea de aportar todo eso al club donde me formé. Me dieron la posibilidad de que me exprese y ahora vamos a tirar todos para adelante para hacer que el club esté mejor, eso fue lo primero. Después también creo que esta es la mejor manera de retribuir todo lo que me dio el club desde que me formé. Arranqué a los seis años a jugar, tenía la puerta del club abierta todos los días, me pasaba más tiempo ahí que en mi casa, y me quedaron muchos recuerdos y amigos de esa época. Te preguntás cómo podés acercarte al club para devolverle todo eso y me parece que esta es la forma, tratando de transmitir todas las cosas que pude aprender a la nueva generación de chicos que salen del club, trabajando para el desarrollo de todos ellos y para que lleguen a ser mejores jugadores.

- Está claro que no solo es un retorno al club que te formó como jugador sino también como persona porque este mismo deporte es el que te lleva a aprender valores como la solidaridad, el compañerismo o la conducta.
- Obviamente, yo lo jugué siempre al básquet y me parece que es el mejor deporte del mundo, me encanta. De hecho todo eso que aprendés está muy a la vista porque para estar en equipos buenos y salir campeón nunca lo hace uno solo, sino que depende del compañerismo, el respeto, la disciplina para el trabajo, el altruismo para jugar. Todos esos valores te los dan los clubes, te los da el propio básquet. Esas cosas también hay que llevarlas y enseñárselas a los pibes, que en el básquet no gana uno solo, que se gana como equipo, y eso es parte de la formación social que deben llevar. Eso es lo que me gustaría trabajar con los chicos para tratar de potenciarlos.

- Puntualmente, desde lo técnico, ¿A qué vas a apuntar?
- Yo soy partidario de que hay que entrenarse sí o sí a nivel grupal porque tenés que tener una dinámica como equipo pero también hay que tener sesiones específicas y técnicas con un grupo más reducido de jugadores. La idea que buscamos hacer se vuelca a trabajar distintas facetas del juego. Me gustaría agarrar un grupo de jugadores y hacer, por ejemplo, etapas de pique, otra etapa que sea de tiro, otra de pases, otra para pivotear. Mi idea es buscar que todos los jugadores pasen por todas las posiciones, no buscar un resultado corto de poner a todos los chicos altos abajo del aro para ganar partidos, me gustaría que todos sepan hacer de todo.

- ¿Hablamos de algo full time o cómo venís con tus tiempos personales?
- Lo estamos hablando ahora pero por lo pronto va a ser un poco complicado que sea full time porque tengo otras actividades y cosas que hacer. No voy a poder estar todo el tiempo pero sí voy a estar controlándolo constantemente, junto a los entrenadores del club. Pasaré por el club como siempre, antes lo hacía como jugador y ahora lo haré como entrenador de estas categorías para ver y corregir cosas.

- ¿Está confirmado que vas a jugar el torneo local con Alem y que te estarías sumando a fines de mayo?
- Tengo la idea de jugar y obviamente tengo muchas ganas, lo vamos a ver. Primero quiero observar cómo estoy físicamente para esa fecha pero si estoy bien me gustaría jugar, tener un nuevo ciclo con Alem. Yo sé que en algún momento voy a terminar jugando, y calculo que para esos meses de junio o julio ya podría estar haciéndolo otra vez, jugando algunos partidos para el club.

- ¿Te has venido entrenando últimamente o desde que terminaste la Liga 2012/13?
- No, lo que realmente pasa es que no juego un partido profesional hace un año y medio, desde que jugué la última vez con Bahía Basket. Ni siquiera entrené en un equipo profesional después de eso. La verdad es que a partir de ahí dejé un poco la rutina del entrenamiento diario y ahora lo que estoy haciendo es volver poco a poco para ver cómo me voy encontrando. Por eso te decía que quiero ver cómo estoy físicamente, ahora no me voy a dedicar tan de lleno a la capacitación de los chicos porque una de esas actividades extras que me impiden estar a full es el tema de que quiero entrenarme para ver dónde y cómo estoy. El tema de volver a jugar lo tengo que ir viendo y compaginando.

- ¿Está la chance de volver a Bahía Basket en Liga o te enfocas directamente en jugar con Alem?
- No quiero meterme muchas presiones, sinceramente yo me estoy entrenando para ponerme de la mejor forma posible. Pero si eso me permite ayudar de alguna manera a Bahía Basket desde el lado del jugador entonces no lo descarto. Sé que después de un tiempo influye y cambia mucho la edad, el rol y el papel que uno pueda tener en un equipo de Liga, pero si puedo ayudar a Bahía Basket y me encuentro bien físicamente me gustaría. Eso también podría ayudar a Bahía Basket en la formación de los chicos que hay, porque tienen muchos jugadores jóvenes y también sería bueno entrenar un poco con ellos para que vayan teniendo experiencia. Con Pepe (Sánchez) también tengo muy buena relación y no descarto que el día de mañana trabajásemos con él dentro de la organización. Si Pepe (Sánchez) o Sepo (Ginóbili) me dicen que puedo serles útil al equipo o en lo que sea me gustaría. Son muchas cosas e ideas las que tengo en la cabeza, pero a mi me deja tranquilo el saber que todo va relacionado al básquet y que eso es lo que más me gusta hacer.

- En el caso de que se produzca esto de sumarte al proyecto Bahía sería algo muy positivo, siguiendo la misma idea que manejas de apuntar al desarrollo de los más chicos, algo que Pepe también viene haciendo dentro de su organización.
- Sí, y hasta pueden ir tranquilamente de la mano lo de Alem con Bahía Basket. El nuestro en Alem es un proyecto más chico, pero para mí es igual de importante a nivel institucional porque es el lugar donde me formé. Son conceptos que se unen porque estás hablando de básquet y formación, con lo lindo de seguir ligado al básquet desde un lugar distinto ya sea captación de jóvenes o entrenar promesas para sacar lo mejor de ellos. Pero bueno, tampoco estoy volcado definitivamente a eso porque si físicamente me encuentro bien no descarto volver a jugar en Bahía. Es difícil porque el tiempo que estuve parado es mucho y los años pesan, pero ya veremos cómo estoy.

- Volviendo al tema Alem y tus proyectos allí, debe ser todo un desafío trasmitir todos esos conocimientos y mantener un plan vigente desde un club que trabaja pero que es humilde…
- Sí, lo es. A veces uno no tiene noción de lo que se vive en muchos clubes, porque Alem es un lugar con pocos recursos y todo cuesta el doble, no hay un sponsor que viene y pone la plata para arreglos u otras necesidades. Esa cultura también es linda de transmitirla, que se vean las cosas que se pueden conseguir trabajando mucho. Me pasó que viví esas situaciones y suelo ver cosas reflejadas en muchos chicos. Yo ya soy padre y tengo hijos que juegan al básquet, entonces siento que también soy como una especie de padre para ellos, que con su inocencia me preguntan si voy a volver a jugar.

- Veía en las redes sociales a muchos chicos emocionados con la chance de tenerte, para entrenarlos y también para jugar con ellos. Te tienen como ejemplo amén de lo que representas como jugador e imagino que son cosas que te llenan el alma.
- Sí, porque uno puede anotar muchos puntos o ser un gran jugador pero en algún momento eso se agota y lo que queda es lo que se es como persona. Todavía estoy para jugar, y seguramente lo volveré a hacer porque es lo que me gusta, no me descartes (risas), aunque todavía no tomé una decisión de dónde.

Lucas Leiva / [email protected]
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