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Instituto está pasando un momento brillante en la Liga Nacional y luego de vencer a Quilmes este jueves, quisimos conocer más del presente de los cordobeses. Para eso hablamos con una de sus figuras, Pablo Bertone, autor de 18 puntos ante los marplatenses.

- ¿Qué análisis te dejó el juego? Fue un poco al revés de lo que fue buena parte del torneo para ustedes, porque esta vez arrancaron muy bien y después tuvieron un pequeño bajón en la segunda mitad.

. Sí, en la primera parte de la Liga el problema eran los primeros cuartos, que arrancábamos muy, muy mal. Después en esta racha de victorias que tuvimos hicimos énfasis en no volver a cometer esos errores, aunque contra Peñarol nos pasó de vuelta eso. Entonces dijimos, vamos a meterle hoy, porque Quilmes es muy complicado de visitante. Así que la clave era empezar bien y después ir trabajando el partido como queríamos nosotros. Con nuestro ritmo, nuestra defensa y corriendo.

- ¿Y por dónde pasa el tema de haber corregido los arranques?, ¿concentración o hubo algo táctico?

. No creo que sea táctico, sino la preparación mental de cada uno. No hay mucha explicación de por qué pasan esas cosas, la verdad. Pero desde que empezamos a ganar, empezamos a jugar bien los primeros cuartos. Ayer también no solo era importante el primer cuarto, sino el tercero, porque sabemos que Quilmes juega muy bien ahí. Ahí era donde iban a hacer el empujón para remontar, sabíamos que teníamos que arrancar fuerte. Lo cual es jodido, porque cuando vos vas arriba te sentís un poco cómodo. Tenés que estar muy concentrado para arrancar fuerte. Tuvieron una rachita, pero pudimos reaccionar y volvimos al partido, así que contentos por eso.

- Me parece que estas victorias tienen un valor doble, teniendo en cuenta que están jugando sin De Groat...

. Sí, obviamente. Hoy le decía a John, cuándo iba a estar listo para jugar, porque lo necesitamos. Espero que para el partido que viene ya esté. Pero por suerte tenemos a Miguel que nos da una mano grande de cuatro y Ale Zilli que tuvo más minutos y jugó un gran partido. Así que siempre que falta alguien, lo compensamos con algún otro. Estamos bien, jugando mucho más como equipo. Cada uno se distribuye mejor los puntos, los minutos... si falta uno, lo podemos suplantar bien por ahora. Pero bueno, John es importantísimo para el equipo y lo queremos de vuelta lo antes posible.

- ¿Dónde encontrás las mayores diferencias entre el Instituto de hoy, y el que arrancó la Liga?

. Yo creo que todo es parte de un proceso. Teníamos jugadores muy buenos, mostramos picos muy altos, pero a la vez teníamos demasiada irregularidad. Por ahí algunos equipos se encuentran en el primer mes de trabajo y otros en el último. Nosotros antes de terminar el 2016 nos pusimos el objetivo de ganar los cinco partidos que quedaban y de hecho lo hicimos. Después otro desafío era arrancar bien la segunda fase, porque es jodido cuando el equipo está en su mejor momento, tener el parate. Fue como empezar de cero y era un desafío tomar el nivel con el que habíamos dejado. La clave está en que empezamos a ganar y simplemente esas victorias te forman esa mentalidad ganadora. No hay otra manera de tener esa seguridad. Pero todo también nace de la defensa, el rebote y correr. Esas son las palabras que más se nombran en el vestuario. Ahí es donde nos sentimos jugando bien al básquet. Sin jugar tanto en la media-cancha, ni darle tanta vuelta... simplemente correr y jugar al básquet.

- En ese juego de libertades y correr la cancha, vos te sentís muy cómodo. Hoy quedó en claro.

. Sí, todo el equipo nos sentimos bien en ese aspecto. Más allá de que Rodney es quizá quien suele brillar en ese aspecto, yo estoy tratando de ayudarlo y darle otra opción al equipo en esa cancha abierta. Quizá al principio de la temporada, en el primer o segundo mes, yo estaba con algunos problemitas físicos y no podía correr, ni sacar ventajas en eso, que es una parte importante de mi juego. Pero ahora ya estoy bien y estoy volviendo a encontrar ese ritmo.