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El sábado de la Liga Nacional se sorprendió al conocerse la noticia de que Alejandro Vázquez dejó de ser el entrenador de Platense. Si, el Cholo decidió dejar el Calamar por cuestiones personales y le puso fin a una historia de 15 años, donde pasaron desde la B de Capital Federal a jugar competencias internacionales y ser protagonistas de la Liga Nacional.

Hace un tiempo, el propio entrenador valoró todo este tiempo en charla con Básquet Plus y contó que “Creo que nunca nos imaginamos que íbamos a poder jugar un torneo internacional. Lo pudimos jugar y estuvimos a la altura. Perdimos la final con Olímpico en un final bastante cerrado, con un equipo de mucha jerarquía. Pero lo más importante es que dejando al club siempre lo más alto que podíamos”.

La escalera por el básquet argentino hasta la Liga Nacional

Alejandro Vázquez fue el llamado para tomar las riendas de un equipo que estaba en la B de Capital Federal y desde allí comenzó un trabajo que lo llevó a estar codeándose con los mejores de Argentina. “Llegué en febrero del 2009, que era para empezar el torneo de la B de Capital, en su momento era la B Metropolitana. Había dejado de elegir en julio o en agosto en Banco Nación, que era de la Liga B y me llamó Fernando (Wendt) que es el actual presidente del básquet y también en ese momento lo era, para hacerme cargo del equipo. Tomé una decisión muy rápido y me gustó el desafío. El club recién empezaba, tenía ganas de ascender. Así fue iniciar el club, con el objetivo de que el equipo ascienda y pudiera jugar en la primera A”

Ya ese 2009 dio el primer paso Platense: “El primer año que yo estuve en el club tuvimos la suerte de ascender en San Lorenzo con la cancha recontra llena”. Y solo tres años después, en 2012, lograron el título de la Primera A: “Un momento muy importante para el club también fue cuando salimos campeones de Primera Liga Metropolitana, que llenamos la cancha de River. La gente de Platense fue, la verdad que pocas veces viví algo igual. Llenamos la cancha, pero de una manera increíble”.

Ya en 2013 comenzó su camino en el Torneo Federal, donde se quedó hasta 2015, cuando después de ser protagonista durante dos temporadas del tercer escalón de Argentina. Para 2016 llegó a la Liga Argentina y su crecimiento no paró hasta la 2018/19, cuando el equipo de Vicente López logró el título de campeón de la segunda división con un equipo integrado por Pablo Bruna, Juan Pablo Lugrin, Gastón Essegue, Lucas Goldemberg y Ale Pappalardi entre los nombres más destacados.

La definición de aquella temporada ante San Isidro quedó en la retina del Cholo: “habíamos perdido el primer partido local y pudimos revertirlo en Córdoba. Y me acuerdo que cuando íbamos a jugar el quinto partido, había más de una cuadra de cola para cerrar las entradas. Fue algo muy lindo para el club, para el básquet”.

Desde ahí, ya con cuatro temporadas en la Liga, en la 2020/21 y la 2022/23 se metió en Reclasificación, en ambas metido entre los diez mejores de la Liga.

Todo este camino también fue de crecimiento institucional a la par del deportivo para Platense. “Año a año fuimos creciendo en estructura. Cada vez tenemos más gente trabajando, más gente que se ocupa, más gente que se preocupa. Creo que hoy el jugador que viene a jugar a Platense, no te voy a decir que somos el mejor club de la liga, pero sí que se tiene que preocupar únicamente por jugar y creo que eso es algo importante para los jugadores”. Y en esta línea Vázquez agregó: “Poco a poco Platense se está haciendo un club creíble y un club en el que tenemos la suerte de que muchos de los jugadores que vienen, la gran mayoría siempre se quieren quedar. Siempre digo que cuando los jugadores quieren repetir es porque están contentos con el club, con la estructura, entonces eso para nosotros es importante y creo que año a año estamos siendo un poquito más reconocidos y ya instalándonos de lleno en la Liga Nacional”.

Haciendo retrospectiva, Alejandro expresó: “15 años es mucho tiempo, pero la verdad que la pasé muy bien. La pasé muy bien porque, no voy a decir que los 15 años fueron color de rosa, pero sí muchos, quizás diría 12 o 13. Y después hubo dos años que no fueron tan buenos, pero la verdad que en general fue un proceso muy lindo, muy tranquilo, por así decir. Nos fuimos poniendo objetivos que se pudieran cumplir, que no sean inalcanzables. Año a año fuimos mejorando y hoy estar ya instalados en la Liga Nacional y haber podido llegar hoy a clasificar para jugarla Copa Súper 20 es un motivo de orgullo muy grande y también de compromiso, porque sabemos que año a año la vara queda siempre un poquito más alta y hay que estar a la altura”.

Alejandro Malky / [email protected]
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