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Desde hace ya más de dos meses la Liga Nacional está suspendida y queda como una de las pocas del mundo que ni se cancela ni se confirma cuándo va a volver. La Euroliga, una de las que quedaba, se canceló, al igual que la Eurocup, mientras que la ACB ya fijó fechas. La otra que no se termina de resolver es la NBA, pero falta poco. 

¿Qué debería pasar para que la Liga Nacional se juegue? Varias cosas. La primera y primordial, que el gobierno autorice su realización, algo que pareciera no estar tan lejos, pero tampoco demasiado cerca, porque el tema es que la Argentina vive varias realidades distintas, de acuerdo a qué parte del país se analice. 

El doctor Diego Grippo ya le envió a la Mesa Ejecutiva un protocolo de retorno a la actividad que, como todos los que se han hecho en el mundo, no varía demasiado en cuanto a formas para volver a entrenar, uso de instalaciones, medidas de seguridad e higiene en casa caso, avance paulatino hasta poder entrenarse en grupos, etc. 

Acá el punto clave es qué pasará el día que el gobierno diga: ok, pueden jugar. ¿Está previsto dónde, cuándo y cómo? El cómo sí: dos cuadrangulares, todos contra todos, semis y final. Son 13 partidos en total y dos semanas más o menos de juego. El cuándo dependerá del gobierno, no solo de la autorización, sino también de la viabilidad para transportarte dentro del país, ya sea por carretera o por avión.

En este caso, no es un detalle menor, porque por carretera tenemos, si tomamos a los 8 equipos que jugarían los cuadrangulares, tres en el Norte (Corrientes) y uno bien en el Sur (Gimnasia), más otros dos en Capital Federal, uno en Córdoba y otro en Santiago del Estero. Entre Corrientes y Comodoro hay 2600 kilómetros, y ahí entra a jugar el tema del dónde. 

¿Cuál es el sitio ideal si la situación estuviera como está hoy? Porque resulta difícil imaginarse cómo estará en 15 días o en un mes. En la Ciudad de Buenos Aires todo indica que en un mes las cosas no van a estar mejor, todo lo contrario. Con lo cual, imaginarla como sede de dos cuadrangulares parece difícil, aunque tiene a dos de los ocho participantes y estaría equidistante para los del Sur y los del Norte. Improbable. 

Si fuera por lógica, Corrientes es la ideal, por muchas cosas. Primero, tiene dos equipos de los ocho también, más Comunicaciones a 250 kilómetros. Santiago del Estero a 625 kilómetros, Córdoba a 900 y Buenos Aires a 920. Todos ellos podrían ir por carretera. Gimnasia de Comodoro, casi imposible. De todas maneras, como estamos hablando para setiembre, quizá ya haya vuelos en ese entonces. 

Pero lo mejor de Corrientes no pasa por las distancias, aunque también. Veamos: tiene dos canchas de Liga (Regatas y San Martín), para poder planificar entrenamientos y partidos. Pero lo más importante, es una provincia y una ciudad con muy pocos afectados por el COVID-19 y sin muertos por la pandemia.

Al día de hoy, según información del Ministerio de Salud provincial, hubo solamente 80 casos en total, y salvo por la aparición de dos infectados ayer, que son internos de la Unidad Penal Uno, hacía 17 días que no había ningún caso positivo. Para tener una idea, hace ya varios días que los comercios están abiertos y el lunes abrirán gimnasios, bares y restaurantes. 

También se habilitó la apertura de hoteles, pero los dos más grandes de la ciudad, el Turismo y el Guaraní, no abrirán todavía, ya que necesitan hacer una inversión de dinero importante para cumplir todas las reglas de protocolo. De todos modos, se espera que eso ocurran en el transcurso de las próximas semanas. 

Desde la AdC todavía no han dado señales claras de la decisión que tomarán, pero Básquet Plus pudo averiguar y por todos estos motivos, Corrientes está hoy como una de las favoritas para recibir a la competencia. Aquí está el otro punto central: si el gobierno correntino querrá recibir alrededor de 120 personas (entre jugadores, cuerpos técnicos, árbitros, TV, etc) de distintos puntos del país, sobre todo de Capital Federal, si la cantidad de infectados sigue subiendo en Buenos Aires. No olvidar que la ciudad está muy cerca de Chaco, donde hay otro foco infectioso, y controla al máximo el ingreso de gente. El temor está latente.

Aquí hay otro tema que juega a favor. Si bien la decisión final puede terminar en el gobierno provincial, el intendente de Corrientes es el presidente de Regatas, y miembro de la Mesa Ejecutiva de la Asociación de Clubes, Eduardo Tassano.