BP Tour 2018

Vildoza: "La llegada de Pedro me hizo ver cómo eran las cosas acá"

15:44 08/05/2018 | Hablamos con Luca Vildoza en Vitoria sobre su adaptación a la ACB, los cambios en la conducción del Baskonia y el impacto de jugar la Euroliga.

Vildoza y su presente en el Baskonia

Seguimos recorriendo Europa con los argentinos que juegan en las principales ligas. Ahora, Luca Vildoza, que cuenta su temporada, la salida de Prigioni, cómo cambió con Pedro Martínez y el tremendo nivel de la ACB y la Euroliga.

- ¿Cómo fue tu adaptación, después de ser amo y señor en Quilmes?

. La verdad que el principio fue muy bueno. Con Pablo me sentía muy cómodo. El equipo estuvo unido desde el primer momento. Siempre se lo vio con buena onda y eso ayudó a que mi adaptación sea más rápida. Después vino el golpe bajo de la salida de Pablo, que eso me tiró un poquito para abajo, pero son cosas del básquet. No tuvimos una buena racha en el arranque y eso generó la ida de Pablo. Con Pedro costó un poquito al principio, porque siempre me sentí con los entrenadores argentinos que tenía una relación directa y esta fue la primera experiencia con un entrenador español. Fue diferente. Pero al pasar los partidos e ir ganándome los minutos, me sentí muy cómodo.

- ¿Lo de Pablo lo podés explicar un poco más? Porque fue raro.

. Fue raro, demasiado rápido. El arranque no fue bueno y eso lo tiró un poco para abajo. Él pensaba que no nos estaba dando lo que merecíamos. Pero sin dudas los que estábamos ejecutando éramos nosotros en la cancha y no podíamos conseguir resultados positivos. Eso hizo que Pablo tomase la decisión.

- Fue muy fuerte verlos yendo a la casa. Habrá sido toda una experiencia para vos.

. Sí, primer mes y ya tenía un golpe de esos. Al principio fue un golpe bajísimo. Lo hablé mucho con mi papá, lo traté de hablar con mi novia. Pero recién al pasar los días y las semanas lo fui llevando mejor.

- ¿Se te complicó la adaptación en ese momento?

. Me vine un poco abajo. La confianza que tenía con Pablo era muy buena y me sentía diferente en el equipo. Tuve que empezar de cero, como si recién debutara en la liga. Pero muy cómodo, todos me ayudaron y me están ayudando, porque obviamente me falta muchísimo por mejorar. Pero me siento cómodo, protegido, ayudado. En la ciudad me siento de 10.

- Pedro es otra cosa completamente distinta a Pablo...

. Son maneras diferentes. Pablo se metía mucho en la relación del entrenador con el jugador y teníamos una relación directa. Pedro marca más la diferencia que hay entre entrenador y jugador. A mi me vino muy bien, porque estaba muy acostumbrado a los entrenadores argentinos. El que llegase Pedro me hizo ver cómo debían ser las cosas realmente cuando llegás acá.

- ¿Hoy a la distancia pensás que el sistema que buscó imponer Pablo podría haber funcionado en el tiempo?

. Creo que faltó un tiempo. No sé si iba a salir bien. Pero viendo que muchos equipos hacen cambios defensivos, sobre todo cuando tienen jugadores de dos metros de la posición de escolta, al cinco, la verdad que creo que hubiese dado resultado. Pero los tiempos no daban.

- Ahora contame de vos. Tuviste confianza en ese primer momento, hay un corte con la salida de Pablo, pasa un tiempo y tenés una inserción en el equipo muy importante.

. A medida que iban pasando los entrenamientos, me sentía más cómodo. Eso me vino bien, porque entrenar todos los días con esta clase de jugadores te hace mejorar. Creo que Pedro vio la mejora en mi y logré tener mis minutos en cancha. Cuando entraba intentaba ganarme un segundo más de lo que me daba. Durante la temporada siempre hay una lesión o enfermedad y a mi me dio la oportunidad de dar un paso adelante.

- Además acá es difícil encontrar un equipo que no juegue con 10...

. Es difícil. Todos juegan con 10. Todos debemos estar atentos, porque en cualquier momento podés entrar. Yo pienso que más de 7 minutos seguidos no podés competir en este nivel, porque la intensidad es muy fuerte, estás todo el tiempo chochando. Cuando pasa esa cantidad de minutos, no podés aportar de la misma manera que lo hacías al principio. Acá hay que dar más minutos de calidad, que de descanso.

- ¿Esa es la mayor diferencia que encontraste?

. Sí. Allá jugaba más de 30 minutos por partido y no sentía tanto el desgaste que siento acá, jugando 14 minutos. A los 7 minutos estoy pidiendo por favor que me saquen, porque no aguanto. Mis piernas no aguantan. Necesito un descanso y después volver a dar esos minutos de calidad. Cuando pasa ese tiempo, empiezo a hacer cosas que no ayudan al equipo.

- ¿Eso habla de una liga superior?

. Creo que la calidad de jugadores y de físicos es diferente. Por más que me cueste aceptarlo, porque yo a la Liga argentina la tengo muy arriba. Me crié ahí. Pero al llegar acá me di cuenta que es diferente.

- ¿Y cuándo te diste cuenta de todo eso?

. Cuando empecé a jugar más de 7 u 8 minutos. Con Pablo lo empecé a sentir en los entrenamientos. Chocar todos los días con Jayson y con Marcelo te ayuda muchísimo. O que venga todo el tiempo Pourier a ponerte una cortina. Te hace mejorar y cambiar la manera de jugar.

- ¿Cuando llegó Pedro habló algo en particular con vos o tuviste que cambiar por tu cuenta, sin que te lo diga?

. Obviamente siempre se tiene una charla de introducción, pero nunca me prohibió hacer nada. Siempre me sentí cómodo en el estilo de juego de él, como en el de Pablo. Pero bueno, el entrenador que llega nunca quiere arriesgar y menos lo iba a hacer conmigo. Me vino muy bien, me hizo sentir lo mismo que el año que debuté en la Liga. Me hizo sentir que tenía que empezar de cero. Me sentí muy bien cuando logré tener esos minutos de calidad y constantes.

- ¿Qué creés que hiciste para convertirte hoy en un mejor jugador?

. Cambié mucho físicamente. Sigo la dieta, pero no estrictamente porque sino bajo mucho de peso y no es lo mejor en mi caso. Pero físicamente el estar rodeado todo el tiempo de jugadores tremendos, te hace mejorar. Yo no tengo la presión de anotar, sino de hacer jugar al equipo. Cuando un jugador está mal, busco a otro, no es que preciso anotar. Eso me hace sentir cómodo, bien. 

- Además cambió tu confianza. En los primeros partidos lo pensabas mucho antes de tirar.

. Cambió la confianza. Al principio intentaba que todos estén contentos con la pelota y que todos quieran que yo juegue. Hoy en día me siento más adaptado a la liga y con un poquito de mayor facilidad para hacer otras cosas. Para tirar al aro, para romper y tocar. Pocas veces podés ir hasta abajo del aro, cuando te aparece un jugador de 2,10.

- Las penetraciones definitivamente, ¿el tiro también se cambia con esta clase de rivales?

. Sí, la velocidad de tiro tiene que ser más rápida. Pero yo tenía un tiro bastante rápido y el tener piernas para saltar, hace que no tenga que adaptar tanto mi tiro a la liga de acá.

- ¿El jugar Euroliga también te aceleró el proceso de adaptación?

. Sí, porque llegaron lesiones y tuve minutos. En Euroliga no me conocía nadie y sentía como todos defendían a los otros. En esos primeros partidos me sentí muy cómodo haciendo jugar al resto. Eso me vino muy bien para la confianza. En los próximos partidos pude hacer esas mismas cosas, pero también con la chance de tirar y anotar.

- Me imagino que te sorprendió un poco el día que jugaste por primera vez en la Euroliga.

. Sí, estaba muy nervioso. La calidad de jugadores era tremenda. Físicamente me sorprendió muchísimo. El primer partido fue contra Olympiacos en Creta y viendo el primer cuarto, era increíble el ritmo constante que tenían. Dudaba que alguno pueda aguantar el ritmo, pero la verdad que los chicos que llevan varios años acá ya están acostumbrados. Pero yo no. Yo a los 3 minutos ya estaba ahogado. A medida que van pasando los partidos te vas acostumbrando, lo que está bueno, porque a mi me gusta correr y sacar ventajas en el contragolpe.

- ¿Qué jugador te sorprendió en la cancha, de Euroliga o de ACB?

. Muchísimos. En la ACB me sorprendió mucho Jayson. Lo había visto en las eliminatorias, pero la verdad que tiene muchísimo talento. Es algo tremendo. Lo tengo que enfrentar todos los días y sé que tengo que defender a un jugador de máxima calidad. Eso me hace mejorar. Después me sorprendió Beaubois, que es un crack. Tiene un talento único, calidad goleadora que no se ve. Con él se hace todo fácil. De los contrarios me sorprendió mucho Nedovic. Es muy rápido, salta mucho y también tiene una calidad goleadora fuerte. En Euroliga, Chacho. Cuando termina el partido es un placer, pero durante no, porque sabés que son bases que les gusta anotar y pasar. A Chacho no lo pude agarrar en toda la noche.

- Estando acá, ¿valoraste más lo que hizo Facu en estos años?

. Sin dudas. Facu es un tipo dedicado al básquet, muy profesional. En el gimnasio se mata y te das cuenta que da un paso adelante todos los días. No baja los brazos nunca. Eso te hace triunfar y tener éxito. Tiene gran responsabilidad en el presente del Madrid.

- Desde lo deportivo tuvieron un cambio de resultado a partir de la llegada de Pedro, entraron a los playoffs de la Euroliga, en la ACB están segundos. Todo eso mezclado con tu primer año.

. Fue buenísimo. Nunca pensé que iba a tener tantos minutos como estoy teniendo. Ya debutar en la Copa del Rey fue algo increíble. Había como 1000 hinchas que fueron a Gran Canaria. Eso te hace sentir que estás en un gran club. Eso fue lo primero que me puso en situación. Obviamente que después jugar contra el Fenerbahce fue algo increíble. Estar rodeado de turcos que te tiran abajo, fue increíble. Fue el ambiente más duro. Panathinaikos también se sentía fuerte, pero en Turquía está la gente más cerca. Con Fenerbahce jugué muchos minutos, sentía nervios, pero no presión. El entrar ahí y jugar más de 10 minutos, lo disfrutás. Aunque hubiese sido un minuto, lo disfrutás.

 

Por Fabián García (Enviado especial a Vitoria, España)
@basquetplus
 

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