San Antonio sumó una nueva victoria, la segunda de forma consecutiva y en un domingo por la noche donde se impuso con claridad ante los Phoenix Suns. El triunfo de los Spurs fue por 112-95, victoria que los adentra una vez más y de lleno dentro de los ocho mejores del Oeste (quedaron 5° ahora). Los texanos volverán a presentarse el martes, nuevamente en casa como hoy pero en la próxima oportunidad midiéndose ante los Clippers.
Manu Ginóbili finalmente tuvo descanso este domingo. Sin minutos y sabiendo que no iba a entrar dentro de la rotación del partido de hoy (en un principio Pop le iba a dar descanso el viernes pero terminó siendo hoy), el bahiense fue uno de los jugadores que vio el partido y alentó desde afuera. Recordemos que los Spurs siguen sin recuperar a Joffrey Lauvergne, Kawhi Leonard y Tony Parker, quienes aún no han vuelto de sus diversas lesiones.
La figura de los Spurs fue LaMarcus Aldridge, autor de 21 puntos y 9 rebotes. El interno volvió a ser tan importante como lo había sido semanas atrás en el arranque positivo de los texanos, recuperando gran parte de su buen nivel y siendo uno de los pilares del equipo como también sucedió con jugadores como Patty Mills (17 tantos, 4 rebotes y 4 asistencias), Rudy Gay (12 unidades y 5 rebotes) y Pau Gasol (7 tantos, 9 rebotes, 3 asistencias y 3 recuperos).
San Antonio arrancó muy sólido en el primer cuarto, con un buen trabajo defensivo que le permitió tomar distancias de 28-20. Los Suns recuperaron terreno en el siguiente periodo y lo dieron vuelta, yéndose al descanso largo 55-51 arriba. La historia cambió definitivamente en el tercer cuarto, porque San Antonio se enchufó y terminó de anular a Phoenix, sacando una ventaja de veinte unidades y empezando a quebrar el duelo. Los texanos entraron al último cuarto 85-68 arriba, para luego llegar a escaparse por una máxima de 27 unidades y cerrarlo con comodidad: 112-95 y triunfo para los de Pop.