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El general manager de Atlanta Hawks, Danny Ferry, ha decidido solicitar una excedencia por tiempo indefinido de sus tareas en la franquicia tras la polémica generada por el uso de comentarios racistas durante una reunión en la que se hablaba de Luol Deng.

La controversia sobre los comentarios de Ferry, quien, durante una reunión en junio para tratar sobre agentes libres leyó un informe de los ojeadores en el que se objetaba que Deng tenía aún “un pequeño africano dentro de él”, se ha visto multiplicada tras la publicación previa de un correo del principal accionista de la franquicia, Bruce Levenson, salpicado de estereotipos raciales respecto a los aficionados negros del equipo.

Levenson anunció que vendería su participación en la franquicia tras conocerse el contenido de ese correo, dirigido a Ferry, y ahora es el propio general manager el que también decide desaparecer, al menos temporalmente, de la escena pública de la NBA tras las críticas recibidas por no haber omitido el mencionado comentario sobre Deng.

El presidente de los Hawks, Steve Koonin, anunció la decisión de Ferry de solicitar la excedencia de forma “voluntaria”, aun cuando se sospecha que ha habido presiones dentro de la franquicia para que tomara tal decisión. El entrenador del equipo, Mike Budenholzer, asumirá de forma interina sus funciones.

Ferry pide disculpas

Por su parte, Ferry pedía ayer nuevamente disculpas por lo sucedido en un comunicado y aseguraba que su objetivo en el futuro no era otro que “trabajar sin descanso para reconstruir la confianza con esta comunidad y con nuestros aficionados” y que para ello se reuniría durante su excedencia con diversos líderes de la comunidad negra en Atlanta.

Atlanta, capital del estado de Georgia, tiene más de un 50% de población negra entre su casi medio millón de habitantes y el estado de Georgia es también uno de los 4 estados de la Unión que cuenta con una mayor presencia de negros (un 30%) entre sus habitantes.

Una amplia minoría muy sensibilizada respecto a la discriminación racial desde que Atlanta fuera uno de los centros impulsores de la lucha del Movimiento por los Derechos Civiles en las décadas de los años 50 y 60 del siglo pasado. De ahí que, unido al precedente del ya ex dueño de los Clippers Donald Sterling, la polémica en torno al comportamiento racial de los Hawks se haya visto amplificada.