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Playoffs LNB 2014/15

Se definen tres series buscando las semifinales del Sur

09:28 31/05/2015 | Domingo cargado e intenso, con tres juegos 5 para conocer a quienes avanzan de ronda: Argentino-Quilmes, Peñarol-Bahía Basket y Gimnasia-Boca.

Franco Balbi (Argentino), Walter Baxley (Quilmes), Leo Gutiérrez (Peñarol), Mariano Byró (Bahía), Nicolás De Los Santos (Gimnasia) y Lucas Faggiano (Boca).

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CUARTOS DE FINAL – CONFERENCIA SUR
 
- ARGENTINO (2) – QUILMES (2)
 
- Argentino (Junín) – Quilmes (Mar del Plata)
. Horario: 19.30. TV: DirecTV Sports. 
. Árbitros: Pablo Estévez, Diego Rougier y Mario Aluz
. Estadio: El Fortín de Las Morochas.
. Historial: Quilmes 11-7. Fase regular 2014/15: Argentino 73-50 y 95-83 (en Junín); y 81-74 (en Mar del Plata); Quilmes 78-61 (en Mar del Plata).
 
La primera serie que se definirá en esta intensa jornada será una que hasta acá tuvo dominio de los locales. Por lo tanto, Argentino parte en los papeles un pasito arriba por tener que ser anfitrión en la definición contra Quilmes, cuyo ganador será el rival de Obras en las semifinales del Sur. 
 
De todas maneras, el momento quizás está en poder del Cervecero, quien viene de ganar dos partidos seguidos (en Mar del Plata) que le sirvieron para recuperar la confianza y un poco de su juego, algo que le faltó en las dos primeras presentaciones en Junín. De todas maneras, no puede dejar de lado que el último se definió por detalles y un poco de suerte, de la mano de un triple increíble que metió Lucas Ortiz cerca del final. 
 
Dentro de las mejoras de los de Ramella se destacan una defensa mucha más sólida, sobre todo en el segundo juego (borró al Turco y lo dejó en 59 tantos) y un ataque mucho más cómodo que supo brindar respuestas en casi todo momento. En ese sentido, la explosión de Baxley fue determinante. El goleador de la temporada fue frenado en Junín (10.5 puntos de promedio y 33.3% de campo), pero en sus dos presentaciones en La Feliz recuperó la pólvora y castigó con 23.5 tantos y 60% de cancha. 
 
Cequeira y Vildoza siguen formando una muy buena dupla en la base, y Maximiliano Maciel logró dar el salto que el equipo necesitaba ante la ausencia de Marín. El alero sufrió un desgarro en el cuádriceps derecho durante el segundo partido y generó un dolor de cabeza, pero Maxi dio un paso adelante, brillando en el juego 4 con 21 puntos y 5 rebotes. 
 
Para Quilmes, quizás, el mayor desafío es quemar los antecedentes, ya que hace bastante que no consigue ganar como visitante. Más precisamente son nueve las derrotas seguidas que acumulan los marplatenses. Si quieren tener mañana en la temporada, es el momento de quebrar esa racha. 
 
Argentino, por su parte, tiene esos papeles a su favor, ya que en el Fortín de Las Morochas ganó siete de sus últimos 10 encuentros. Y es conocido el crecimiento que muestra cuando le toca jugar ante su gente. 
 
Pero para volver a festejar tiene que recuperar esa fortaleza defensiva que supo mostrar un varios pasajes de los dos primeros partidos, sobre todo ante Baxley. Y claro, también es vital imponer su propio ritmo de juego. Y para ello necesita que Franco Balbi, su manija, tome el control. 
 
Ramella dijo que si el base de Argentino conseguía imponer condiciones, para Quilmes se iba a hacer muy difícil revertir la serie. Por eso hizo foco en frenarlo y lo consiguió, bajando sus números a 8 puntos, 5.5 asistencias y 3 rebotes en los dos partidos en Mar del Plata, cuando venía de promediar 19 tantos, 7.5 recobres y 7 pases gol en las presentaciones en Junín. Y también logró subir sus pérdidas: de 3 pasaron a 4.5. 
 
Si Balbi recupera su mejor cara y se siente cómodo, el Turco puede tener gran parte del problema resuelto. Después, claro, confía en lo que dan Cangelosi (15.8 puntos de promedio), Alessio (11.3 y 4.8), y Stewart (10.5 y 5.8). Aunque también será fundamental recuperar a Fernando Funes, una de las principales vías de gol perimetral, quien se ausentó en el juego 3 por un problema en su hombro izquierdo y será duda hasta última hora. 
 
Hasta acá, la serie tuvo una victoria cómoda para cada lado y otra en la que los detalles del final terminaron inclinando la balanza. ¿Para qué lado caerá la moneda esta vez?
 
- PEÑAROL (2) – BAHIA BASKET (2)
 
- Peñarol (Mar del Plata) – Bahía Basket (Bahía Blanca)
. Horario: 21.30. TV: TyC Sports.
. Árbitros: Alejandro Chiti, Juan Fernández y Oscar Brítez. 
. Estadio: Polideportivo Islas Malvinas. 
. Historial: Peñarol 58-36. Fase regular 2014/15: Peñarol 93-83 y 69-58 (en Mar del Plata); 84-79 y 81-74 (en Bahía Blanca).   
 
Peñarol y Bahía Basket animaron, quizás, la serie con más condimentos de estos cuartos de final. Por el desarrollo y por lo que se generó entre ambos equipos, con la suspensión de Leo Gutiérrez por un partido como situación que más controversia produjo. Por lo tanto, el quinto partido de esta noche, en Mar del Plata, promete y mucho. 
 
Hasta acá hubo siempre dominio local, con Peñarol ganando los dos primeros en La Feliz y Bahía demostrando autoridad en su casa, donde acumula 12 victorias seguidas. Cada uno lo hizo a su manera y es la misma que tratarán de imponer para salir victoriosos esta noche y avanzar de ronda. 
 
El campeón, de todas formas, no lo hizo con la naturalidad y autoridad que lo caracteriza, o al menos la que quiere tener para ser candidato a repetir el título. Es cierto que en el juego hace rato que no encuentra estabilidad y que sus buenos rendimientos se deben más a ráfagas que a regularidad, pero también es real que tuvo y tiene que atravesar varios problemas que van más allá del juego. 
 
Adrián Boccia, pieza vital y termómetro en los dos costados de la cancha, sólo pudo jugar el primer partido, justamente el de mayor diferencia para el Milrayitas (89-72). Allí sufrió un desgarro en el sóleo de la pierna izquierda que lo sacó de las canchas. Si bien evolucionó, la realidad marca que está en duda para esta noche. Su estado se definirá a última hora y si llega, está claro que no se lo verá al 100%. Por su parte, Martín Osimani, de gran valor en el cierre de la fase regular, se perdió los tres primeros duelos por un desgarro y recién pudo volver en el cuarto (7 puntos en 18 minutos). Y lo mencionado, Leo Gutiérrez se perdió el juego 3 tras ser suspendido de oficio por el codazo que le pegó a Byró en el primer encuentro. 
 
Estamos hablado de tres jugadores determinantes, de calidad, jerarquía y experiencia, y no hay dudas que cualquier equipo siente su ausencia. En sus lugares, Fabián Sahdi (14.8 puntos, 3.8 rebotes y 2.8 asistencias en la serie) y Alejandro Diez (13.5 y 5.8 recobres) dieron la talla y produjeron para tratar de tapas los huecos. Martín Leiva está siendo bien controlado por los bahienses (10 tantos y 6.3 recobres), pero se sabe que en partidos calientes dice presente. 
 
Desde lo colectivo, el equipo de Fernando Rivero necesita recuperar su defensa, ya que Bahía le metió 86 puntos de promedio en los juegos 3 y 4, cuando en los dos primeros había anotado 72 en cada uno. La zona que intentó el Tulo no le dio muchos resultados, ya que los de Ginóbili castigaron a distancia (24 triples combinados en las dos victorias). Y claro, será vital bajar el número de pérdidas, ya que tuvo una media de 20 en sus derrotas. 
 
Bahía Basket, por su parte, viene con el ánimo y la confianza bien arriba que se alimentó en el Osvaldo Casanova, donde a lo largo del año demostró un nivel muy superior. La receta es simple y efectiva: defensa dura, intensidad bien alta sostenida por una rotación muy larga, jóvenes que se animan a todo y ataque rápido tras generar recuperos. 
 
Dentro de esa juventud, Lucio Redivo viene dando la nota. En los juegos 3 y 4 anotó 20 y 24 puntos respectivamente, convirtiendo cuatro triples en cada encuentro y demostrando mucha personalidad y varios recursos. Así, se transformó en el máximo anotador de su equipo (15.8 tantos en apenas 19 minutos de promedio) e hizo olvidar la ausencia de Diego Gerbaudo (afuera de todos los playoffs por su conocida lesión en el hombro). 
 
Pero claro, lo de los bahienses a nivel individual no queda en Redivo. Trevor Gaskins demostró ser determinante, mató en el juego 3 (28 puntos) y lleva una media de 14.5 en la serie. Byró aportó su experiencia y gol en momentos decisivos (10.3 tantos); Pancho Jasen y Juan Pablo Vaulet colaboran dando equilibrio; mientras que Rasio y Levy bancan la parada en la pintura. 
 
El gran desafío para el equipo de Sebastián Ginóbili, claro está, es conseguir que esa imagen de equipo sólido y peligroso que exhibe en casa se vea en la ruta, ya que como visitante ganó sólo uno de sus últimos 12 partidos y en la temporada es el tercero que menos ganó: apenas cuatro encuentros. 
 
Peñarol tiene una prueba de muchísimo riesgo, pero cuenta con la experiencia, chapa y jerarquía de los últimos años, donde ganó todo. Bahía Basket tienen sus armas y, sin presión, puede dar el golpe si el hecho de animarse le gana a la presencia que impone el rival en estas instancias. La mesa está servida para un final de serie apasionante. 
 
- GIMNASIA (2) – BOCA (2)
 
- Gimnasia (Comodoro Rivadavia) – Boca (CABA)
. Horario: 21.30. 
. Árbitros: Fernando Sampietro, Fabricio Vito y Leonardo Zalazar. 
. Estadio: Socios Fundadores. 
. Historial: Boca 58-46. Fase regular 2014/15: Gimnasia 101-76 y 79-66 (en Comodoro); y 88-70 (en Boca); Boca 78-58 (en Boca).
 
Una de las series más cambiantes de estos cuartos de final se definirá esta noche en Comodoro Rivadavia, cuando Gimnasia reciba a Boca en el quinto partido, buscando un lugar en las semifinales de la Conferencia Sur. 
 
Decíamos cambiante. Bueno, el Verde comenzó la eliminatoria con el pie derecho y dejando en claro la jerarquía de haber sido el Nº 2 de su zona pese a no jugar bien en la noche inicial. En los dos siguientes partidos, Boca lo controló, demostró su carácter y personalidad y lo dio vuelta ganando uno en Comodoro, algo que se vio poco en la temporada. Y en el cuarto, Gimnasia pegó otro cambio de dirección y ganó con enorme autoridad pese a tener la obligación y presión de hacerlo para seguir con vida.. 
 
Esto último es, quizás, lo más importante para el equipo de Gonzalo García. Es que más allá de lo que reflejó el resultado final del cuarto partido (92-73), los de la Patagonia se reencontraron con su mejor versión en La Bombonerita. Se sintieron cómodos por primera vez en la serie y dominaron de principio a fin, al margen de alguna laguna, con las armas de toda la temporada: orden, defensa dura, inteligencia para atacar y triples, una de sus vías de gol principal. 
 
En la fase regular, Gimnasia había sido el mejor en el rubro, con 38.6% en bombas y 9.3 conversiones por juego, pero Boca lo había controlado en los primeros tres encuentros de la serie (28.6% y 6.7). En el cuarto, el Verde explotó con un genial 10-20 que le permitió quebrar el desarrollo, sobre todo en el último cuarto (5-6). 
 
También hubo crecimientos individuales que resultaron decisivos. Sam Clancy terminó con 7 puntos y 11 rebotes, pero al margen de los números volvió a dominar y ser el faro por donde pasa todo el juego interior de su equipo. Scala trajo aire desde el banco como lo había hecho en la fase regular (18 tantos, 11 en el último período); y De los Santos (17, 6 rebotes y 5 asistencias) y Aguerre (17, 9 y 3 tapas) fueron pura solidez y calidad. 
 
Boca, por su parte, retrocedió un escalón, desde el juego y quizás también desde lo mental. Cuando las cosas no salieron a lo largo del año, siempre hubo carácter y personalidad para lucharla. Sin embargo, los de Ronaldo Córdoba se vinieron abajo en el último cuarto y prácticamente no brindaron oposición. 
 
Por un lado, bien podría jugar en la cabeza del Xeneize que dejó escapar la enorme chance de cerrar la serie en su casa. Pero la realidad es que, por lo demostrado durante la 2014/15, muy  pocos lo veían forzando un quinto juego en esta llave. Y está el agregado de saber que ya ganó en el Socios Fundadores. 
 
Para repetir, Boca debe volver a las fuentes, sobre todo en defensa. En los primeros tres juegos, Gimnasia no había podido pasar los 70 puntos y la media que permitieron los de Capital Federal fue de 66.7. En el cuarto, todo lo opuesto (92). Adelante, tiene una media de 69 tantos por encuentro en la serie. En ese aspecto, quien todavía no explotó es Isaac Sosa (9 por choque), quien no encuentra sus tiros y a veces pierde terreno por su floja defensa. Axel Weigand seguirá afuera por su lesión en la rodilla, así que será importante, además de Ramírez Barrios, lo que pueda dar el pibe Lucas Gargallo, valioso en el juego 4 (8 tantos, 2 rebotes y 2 asistencias en 15 minutos). 
 
En lo que va de la temporada, Gimnasia perdió sólo cuatro partidos en su territorio. Dio muestras suficientes de que allí se potencia y en el último encuentro de esta serie recuperó la memoria en cuanto al juego. Pero claro, Boca fue uno de los pocos que ganó allí. Y tiene el carácter necesario como para dar un nuevo golpe. 
 

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