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Si bien no se puede comparar la magnitud de un título y otro, Leonel Schattmann y todo Gimnasia de Comodoro se sacaron parte de la espina que todavía tienen clavada por la final perdida ante Quimsa, en la 2014/2015.

Los de Gonzalo García se llevaron el Super 4 Circus venciendo a Obras en la final y confirmaron lo que muchos pensaban de ellos: hoy son el equipo a vencer en el torneo. A continuación, el análisis de lo sucedido de parte de una de sus figuras, Leonel Schattmann.

¿Les puede cambiar algo esto?

No es la idea. Cuando se logra algo bueno, se trata de sumar sobre lo mismo. De seguir con la misma mentalidad y no relajarse. Querer más. Nos caracterizó a nosotros todo el año pasado. De hecho nos quedamos con una espina muy grande por la final. Sabíamos que teníamos material en esta Liga para pelear por cosas y se logró. El primer objetivo era tratar de entrar al Súper 4 y fue un premio muy grande. Una vez que estás adentro, querés llevártelo. Vinimos con esa mentalidad y por suerte lo pudimos lograr.

¿Son mejores que el año pasado?

Teníamos lo nuestro. El año pasado quizá no teníamos jugadores con tanto nombre, pero que nos daban un montón de cosas. Este año se sumaron jugadores con más jerarquía. Eso por ahí potencia y le da más respeto al equipo. Bienvenido sea. El año pasado dejamos todo e hicimos un gran año, y esta temporada va a pasar lo mismo.

Hice un quinteto ideal de la primera fase y puse de media cancha titular De Los Santos-Schattmann. ¿Es mucho?

Yo creo que venimos teniendo un buen año. Gonzalo nos venía remarcando que estábamos haciendo una gran temporada con Nico. Yo estoy con él en la habitación y hablamos mucho. Llevamos varios años juntos y nos proponemos este tipo de cosas. Colectivas sobre todo, pero después en lo individual. Queremos ser regulares y tener un buen nivel, y este año se nos viene dando. Somos protagonistas o por donde más pasa el juego, buscamos generar para los demás. Cada uno sabe el rol que tiene que cumplir y como aportar su granito de arena, estamos cómodos.

Más allá de la partida de Scala, ¿el equipo tenía algunos huequitos que los taparon Sandes y Mainoldi?

Puede ser. Convengamos que no tuvimos mucha suerte con las lesiones, el año pasado nos lesionamos varios en diferentes partes de la temporada. Eso influye. Tratamos de ser fuertes de la cabeza porque era lo único que nos iba a sostener para hacer un buen campeonato. Matías nos da muchas cosas, entiende el juego y sabe cuándo hacer el pase extra, que es algo que nos pide Gonzalo. Es un jugador de mucha jerarquía. Coco es un jugador de selección, con una mano increíble. Nos da muchas cosas y nos hace abrir la cancha un poco más. Podemos jugar un poco todos más sueltos. Y Gastón en los minutos que le toca darle descanso a Nico, también lo hace bien, está muy metido mentalmente. Quizá no tiene tanta participación pero siempre está preparado para rendir en sus minutos.

¿Cuándo sos subcampeón, te sirve alguna otra cosa que no sea ser campeón?

En el momento sentís que no sirve nada. Cuando empieza la temporada te vas poniendo objetivos a corto plazo, pero cuando estás en la final sabés que tenés que dar el máximo para ser campeón. No es fácil, el año pasado nos tocó con un rival durísimo, que hizo una Liga casi perfecta y la ganó bien. Nosotros pudimos sacarles dos juegos en Comodoro, pero nos ganaron con el equipo un poco más largo que tenían. En ese momento sentís que no sirve nada.

¿Pero y en esta, ya lo único que vale es ganar la Liga?

Lo tomamos así, de esa forma. Sabemos que la Liga es durísima, es muy larga. Hay muchos equipos con nombres y que juegan muy bien. Por ahora nos ponemos objetivos cortos. Vamos a tratar de hacer un buen enero para sostenernos y ser regulares.