Richotti: "Traté de mandarles un mensaje que les haga fluir la autoestima"
22:45 10/12/2015 | El entrenador de Argentino habló con Básquet Plus del presente y la levantada de su equipo, su impronta y su momento desde lo personal.
Al parecer, el cambio de aire que tuvo Argentino en las últimas semanas ha generado un impulso importantísimo que de a poco va enderezando su rumbo dentro de la Liga Nacional. Desde la llegada de Marcelo Richotti como nuevo entrenador, el equipo juninense ha ganado en 3 de sus 4 presentaciones hasta el momento, y aunque todavía falta mucho camino por recorrer lo cierto es que el clima y el ánimo se ha renovado.
Argentino era uno de esos equipos a los que le faltaba una vuelta de tuerca, no tenía desempeños tan pobres pero no ligaba y eso lo llevó a una sucesión de derrotas que fueron difíciles de digerir. Un poco de esa giro clave dentro del plantel lo generó Richotti con su arribo, haciendo un trabajo bastante enfocado en reafirmar las buenas condiciones del equipo desde la confianza.
En charla con Básquet Plus, el entrenador bahiense se refirió a la actualidad del Turco después de la nueva e importante victoria ante Atenas en el Fortín de las Morochas (74-69). Richotti dialogó sobre el alentador vuelco que está generando Argentino, los aspectos que restan por trabajar dentro del grupo para darle su sello y también habló del cambio que ha generado desde lo personal en este retorno a la máxima categoría de nuestro básquet.
- Otra victoria más para confirmar esta levantada. Tuvieron un gran primer tiempo y después en el complemento, a pesar de algunos errores, lo supieron aguantar y me parece que demostraron carácter para cerrarlo. ¿Qué análisis te dejó lo de anoche ante Atenas?
. En cuanto al desarrollo del juego es cierto lo que decís. Fue muy notoria la superioridad nuestra en el primer tiempo, jugando bien, tratando de ser disciplinados e inteligentes a la hora de tomar decisiones, muy concentrados para poder llevar adelante nuestra idea defensiva porque dejar en 20 puntos a Atenas no es fácil. Si bien es cierto que ellos tampoco estuvieron acertados creo que nosotros tampoco le permitimos tomar muchos tiros cómodos y eso hizo que nos pudiéramos ir 16 puntos arriba. En el segundo tiempo hay algo que nosotros tenemos que apuntar a corregir y que también nos pasó con Ferro, que es el inicio de los terceros cuartos porque siempre lo empezamos mal. Eso permitió que prontamente Atenas se pusiera en juego con tres o cuatro triples consecutivos. Ahí creo que estuvo un poco el camino de lo que fue el desarrollo del segundo tiempo, donde ellos jugaron mejor que nosotros y nos metieron 49 puntos en esa segunda mitad. Pero si bien pasó eso también es cierto que nosotros tuvimos la capacidad de controlar o contener en cierta medida el embate de ellos y pudimos cerrar el partido ganando por 5. Creo que tenemos que apuntar a ser un poco más constantes, principalmente en el inicio de los terceros cuartos, que es donde estamos fallando.
- ¿Encontraste puntualmente qué es lo que le está pasando al equipo en esos arranques?
. En realidad todavía no, porque con Boca también nos pasó que nos metieran seis u ocho puntos seguidos. Tendremos que buscarle la forma entre todos, yo principalmente desde mi rol de entrenador para encontrar la solución a ese problema y que nosotros podamos ser continuos durante los 40 minutos, cosa que sé que es muy difícil de lograr pero tendremos que optimizar todo para tratar de que esos cinco primeros minutos del tercer cuarto podamos jugar de la misma manera que lo hicimos en el primer tiempo. Está coincidiendo de que los primeros tiempos los jugamos bien y los terminamos ganando, y los inicios de los terceros cuartos de estos cuatro partidos que me han tocado dirigir han sido malos. Esperemos encontrarle la vuelta a eso y corregirlo.
- ¿Te sorprendió tan rápida respuesta del equipo en cuanto a resultados? Porque si bien se notaba que no le faltaba mucho, acá también está el hecho de sumarle una seguidilla de juegos con buenos balances que marca una diferencia.
. La verdad es que uno siempre espera poder adaptarse a las circunstancias lo más rápido posible porque la vorágine de la Liga te obliga a meterte de lleno en el equipo que te toca dirigir, y cuando venís a suplantar a un entrenador es difícil poder meterse en el corazón del equipo o llegarle de la manera que uno pretende en corto tiempo porque permanentemente estás entrenando y jugando seguido. Siempre dije que el equipo estaba bien entrenado, lo que por ahí le faltaba a los jugadores era esa convicción o esa confianza de poder llevar adelante lo que les transmitía el entrenador. No puedo hablar de lo que fue la relación con el entrenador anterior pero sí te puedo hablar de lo que me encontré.
- ¿Con qué te encontraste y qué impronta le empezaste a dar?
. Me encontré un equipo que estaba entrenado, donde quizás a los chicos les faltaba un poco de confianza a la hora de encarar los juegos, de creer un poco más de lo que estaban haciendo. Traté de mandarles un mensaje que les haga fluir o sacar esa autoestima que tiene que tener cada jugador a la hora de encarar un juego y que esa autoestima individual sea trasladada a lo colectivo. Y a partir de ahí crear una química de equipo que corte con esa racha negativa que traían, algo que ya habían cortado antes de que yo llegue jugando contra Peñarol acá en Junín. Después nos fuimos planteando desafíos partido a partido, porque le ganamos a Boca con mucha autoridad, jugando muy bien durante casi todo el partido; después el otro objetivo era ganar de visitante, algo que el equipo todavía no había logrado hasta el momento y se nos escapó Obras por falta de lucidez en el cierre, especialmente en el tiempo regular; y después fuimos a Ferro jugando con mucha autoridad y ganando bien. Creo que los desafíos son partido a partido, y a partir de eso nace un poco lo de ir ganando confianza y que esa confianza haga de que el equipo cambie esa mentalidad de acostumbrarse a perder para acostumbrarse a luchar para ganar. Me parece que por ahí pasó todo lo que en estos cuatro partidos me tocó dirigir y a eso estamos apuntando. Desde lo deportivo obviamente que de a poquito voy a ir agregando cosas que a mí me gustan y que por ahí ahora no estamos haciendo, pero el tiempo a veces es tirano y uno tiene que ir creciendo con la competencia. Y entrenando y desarrollando el equipo de la manera que a mí me gusta, tratando de ganar también. Es complicado poder llevar las dos cosas adelante en simultáneo, pero hay que hacerlo y estamos abocados a eso.
- ¿Qué es lo que más te preocupa o te urge por implementar dentro del equipo?
. Como urgencia, lo que más me ocupa y en lo que más abocado estoy hoy es que los conceptos defensivos que uno quiere incorporar se afiancen y se consoliden, para tratar de ser más compactos defensivamente y sostener el juego de atrás para adelante. Y adelante la idea es poder anotar un poco más en ataque rápido, cosa que no estamos haciendo. El equipo no está acostumbrado a correr y a jugar de contraataque, pero es algo que a mi me gusta y trataré de que eso se logre. También hay que seguir desarrollando los roles de cada uno, que las cosas estén bien claras. Porque cuando las cosas estén bien claras cada uno se va a sentir más cómodo en los aspectos que tiene que ver con el juego, desde lo defensivo hasta lo ofensivo. Creo que esas son las cosas que más me urgen en este momento.
- En el último tiempo se dieron cosas que me parece que venías necesitando mucho. Primero con los chicos del Sudamericano, después con este esperado retorno a la Liga y el buen arranque con Argentino. Supongo que deben ser uno de esos momentos que personalmente te llenan. ¿En qué momento estás hoy, en cómo lo vivís y con todo esto que te pasó?
La verdad es que sí, estoy muy feliz. Estoy contento de estar en el lugar donde crecí tanto deportiva como profesionalmente, tanto como jugador y como entrenador, que es la Liga Nacional. Disfruto mucho de poder estar. Estos dos años que no estuve me enseñaron a desdramatizar un poco todo lo que es la parte del juego, el hecho de trabajar con los chicos, de ver otra faceta de lo que hace a la profesión. Si bien uno sabe que a veces está urgido de resultados en esta Liga Nacional también me parece que aprendí a disfrutar de esto y a compartir lo que significa el juego en sí. Estar dentro de una competencia dentro de un deporte que te da muchas posibilidades, no solamente hay que trabajar y ganar sino también hay que disfrutarlo. Si uno aprende a disfrutar de esto y trabajar contento creo que el éxito y el hecho de las victorias pueden llegar mucho más rápido.
- Me parece que desde ese cambio que gestás en cuanto a la energía y el disfrute uno produce una llegada distinta hacia sus jugadores. Como si esa capacidad permite una mayor fluidez con un equipo que necesitaba cierto impulso anímico y se combinó justo con esto que te está pasando a vos.
. Es lo que estoy tratando de transmitir, que esto hay que disfrutarlo, que hay que laburar y que no hay que sufrirlo. Me parece que pasa por ahí, porque cuando uno empieza a sufrirlo se pone una carga muy grande dentro de uno mismo y esa carga se transmite. Entonces puede hacerse todo mucho más tedioso o complicado. A partir de ahí es lo que yo estoy tratando de transmitir. Realmente estoy feliz de poder estar en la Liga, como también estuve feliz de no estar y de vivir un proceso con el básquet amateur y formativo. Eso me ayudó a crecer mucho como entrenador. A partir de ahí, todo lo que venga es bienvenido y espero poder aportar mi granito de arena para que Argentino pueda cumplir su objetivo principal, que es seguir sosteniendo la categoría. De ahí, lo que venga seguramente será mucho más placentero si logramos ir para arriba. Para eso es para lo que vine, para aportar mi granito de arena y tratar de hacer la mejor temporada posible. Después la Liga te pone en el lugar que merecés y que tenés que estar. Esperemos poder estar en los puestos de arriba, pero si no nos toca la idea y el objetivo es no descender.
Lucas Leiva / [email protected]
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