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“Personalmente, creo que soy el mejor de toda la NBA defendiendo a LeBron, quitando a Kawhi Leonard. Mido 2.10 metros y peso 108 kilos y me parece que es el tamaño perfecto para defender a alguien que mide 2.10 y pesa 118 kilos. Tener altura, longitud y fuerza también ayuda. Las cosas han cambiado en relación a la serie del 2016 (NdR: jugaba en Detroit y perdieron 4-0, aunque LeBron no se sintió cómodo), soy un poco mayor y tengo más experiencia", había declarado Marcus Morris el sábado, en la previa al inicio de las finales del Este entre Boston y Cleveland.

Esta tarde reafirmó sus dichos dentro de la cancha, ya que le impuso una defensa muy física y agresiva al Rey y logró limitarlo enormemente. Boston borró del mapa a los Cavs (108-83) y LeBron solamente pudo aportar 15 puntos. La estrella de los Cavs culminó el juego con un 5/16 de campo (0/5 en triples) y 7 pérdidas de balón. A su vez, en el mano a mano contra Marcus Morris solo anotó dos de los seis tiros que ejecutó y concretó 5 puntos.

Morris sabe cómo puede intentar detener a LeBron y lo demostró también en el pasado. De hecho, una estadística de SecondSpectrum indica que el alero ha dejado a James en un 33% de acierto en sus enfrentamientos de los últimos cinco años, cuando él era el defensor más cercano. Casualmente, este domingo lo dejó en un 33% cuando le tocó defenderlo individualmente. En términos globales, el Rey terminó el Juego 1 de las finales del Este con una efectividad del 31.2%.

Danny Ainge, luego de que Morris fue fichado por Boston y llegara a la ciudad, le explicó por qué había llegado a la franquicia: “Es una de las primeras cosas que me dijo Danny Ainge cuando llegué, que ellos sentían que era uno de esos jugadores que podía defender a James. Fue sin duda uno de sus grandes motivos para traerme aquí”. Esta tarde de domingo demostró ser la kryptonita del Rey; ¿podrá repetirlo en la continuidad de la serie?