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Una victoria que sirvió para tomar aire y cortar una mala racha. Libertad salió del derrotero y este jueves le propinó un golpe a Obras Basket por 80-72. Los sunchalenses se quedaron con una victoria importante, volvieron a ganar después de dos caídas (ante Boca y Quimsa) y se esperanzan con subir escalones en el cierre de esta fase regular.

Alejandro Alloatti realizó un partidazo, marcó un doble-doble con 14 puntos y 13 rebotes y fue una de las grandes claves que tuvo el local junto con Bruno Barovero (15 puntos) y Jonatan Slider (17 unidades). En Obras, lo más destacado estuvo en las manos de Bruno Fitipaldo (21 unidades), aunque lo expuesto por Ramón Clemente (15 puntos y 7 rebotes) también fue muy positivo.

Libertad arrancó con todo, mentalizado desde el primer minuto y deshaciendo la frágil defensa de Obras. Los sunchalenses gozaron de muchísima libertad, no permitieron que el rival tenga segundas chances y además añadieron una buena seguidilla de puntos desde el perímetro para empezar a quebrar el juego. Sorpresiva y fugazmente, el equipo de Piccato se disparó con un demoledor 15-2 de la mano de Barovero (7), Sheard (5) y Hubalek (3).

Obras se mostró muy errático, hasta que a falta de 3m30s Aguiar descontó y cortó un marcado trámite nulo de gol por parte de los capitalinos. Sin embargo, a pesar del corte de sequía por parte del equipo de Lamas, Barovero siguió desempeñando un tremendo pasaje. Con una efectividad casi perfecta hasta el momento (2/2 en dobles, 3/3 en triples y 0/1 en libres), el escolta oriundo de San Francisco siguió estirando sus números y fue imparable.

El Tachero careció de ideas. A pesar de que descontó unidades con Delía y Clemente, el cuadro metropolitano fue superado claramente por un Libertad sorprendente, piloteado por Barovero pero con otras buenas incursiones como las de Sheard y Hubalek. La ventaja se fue estirando hasta un fulminante 31-11 que bajó el telón del primer episodio.

La defensa de Obras dio muchas ventajas y Libertad fue aprovechando cada error con una efectividad altísima. Los capitalinos se vieron obligados a correr desde atrás, intentaron cambiar la cara y de a poco empezaron a potenciar su cuidado en el aro propio. Con poco, el partido entró en un pequeño trámite mucho más trabajado, con carga de foules pero sin mucha variación en cuanto al marcador. Obras, con arrestos individuales y falto de ideas colectivas, se puso 33-15 abajo en los primeros dos minutos del segundo cuarto.

En ese ínterin, Libertad experimentó un bajón esperado porque tan alta efectividad era casi imposible mantenerla. Ese fue el momento en el cual Obras creció, levemente dentro del juego pero sobre todo recortando diferencias. Las alternativas de Obras empezaron a crecer a partir de una reacción defensiva-ofensiva, Safar, Gutiérrez, Clemente y demás pusieron en órbita al Tachero y así la visita se animó hasta ponerse a 33-21 a menos de cuatro minutos para el entretiempo.

Libertad bajó su rendimiento con respecto al primer cuarto, lo cual fue un poco entendible. Sin embargo, la mala noticia fue el susto sobre Sheard, que debió retirarse lesionado con una lesión en su hombro izquierdo (producto de una cortina). Obras reaccionó con creces, Zanzottera se convirtió en una pieza clave y puso a su equipo abajo por once (39-28). De todas formas, Libertad cargó con buenos puntos de Alloatti, Fierro y Slider en el cierre, los cuales sirvieron a modo de oxígeno para que los santafesinos se vayan al descanso largo ganando por 43-28.

Obras apretó el acelerador en el inicio del tercer cuarto. El empuje por dar vuelta la historia empezó a ser un condicionante en contra para Libertad, que no pudo detener a un rival muchísimo más asociado y que se puso a tan solo ocho unidades en los primeros cinco minutos (52-44). Los santafesinos contaron con la potencia de Alloatti y la buena mano de Slider, aunque Obras fue de lo más colectivo, siguió evolucionando y cada vez que atacó generó muchísimo peligro.

El cambio de cara de la visita, entre lo expuesto en el inicio de la noche y lo demostrado en el tercer parcial, fue notorio. El juego cayó en un trámite un poco más impredecible. Obras siguió empujando con los triples, sobre todo de la mano de Fitipaldo que atravesó un momento de alta efectividad (tres bombas al hilo), lo que permitió que Obras rompa la estructura del partido gracias a su lanzamiento perimetral y se ponga a tan solo cinco (58-53).

Libertad aguantó en los segundos finales, pero cada vez que el base uruguayo tomó tiros se le hizo difícil. El equipo de Piccato cerró arriba por 62-57, pero Obras le anotó 29 puntos en el tercer cuarto (24 de ellos desde los triples) y decididamente se metió en partido. La carga de tantos anotados por Obras puso al equipo local en un serio aprieto, sobre todo porque el rendimiento fue en crecimiento y cada vez se mostró más sólido.

Los sunchalenses optaron por aguantar la ofensiva de Obras y tratar de pinchar el partido poco a poco. En ese tramo, el Tachero siguió mostrándose más enérgico, tomó relevancia la tarea de Clemente y detrás de ello apareció el buen aporte de Basualdo. Así, el conjunto capitalino se puso a tan solo cuatro unidades (66-62), arremetió restando siete minutos para el cierre y el aguante de Libertad ya no parecía ser negocio para el local.

El dueño de casa encontró respiro en las manos de Slider, que clavó un triple y permitió algo de oxígeno. Sin embargo, la diferencia no era lo suficientemente holgada (71-64) y Libertad siguió un tanto errático para concretar sus situaciones ofensivas. Obviamente, el empuje de Clemente debajo de los aros terminó siendo un factor determinante para Obras, porque gracias a su potencia la visita capturó varios rebotes y tuvo nutridas segundas chances para atacar. De todas formas, los capitalinos abusaron un poco del tiro de tres puntos y ahí desperdiciaron algunas oportunidades de gol.

Slider fue un bastión ofensivo interesante en el equipo santafesino (sin olvidar el trabajo clave . Obras siguió apretando, con ráfagas lujosas del boricua Clemente pero sin tanta claridad en sus demás miembros exceptuando la muy buena de labor de Fitipaldo. Libertad siguió al frente y llegó a dispararse a nueve tantos (73-64), Obras presionó pero los arrestos del equipo visitante se apoyaron mucho en lo expuesto por Clemente. Así, de a poco, Libertad empezó a jugar con el tiempo a su favor.

Una serie de faltas de Obras, apretado y acelerado por el objetivo de revertir la situación, inclinaron la balanza en favor de un Libertad que tomó aire con los puntos desde la línea. El local apretó los dientes, fue más sereno a la hora de pinchar el partido y se quedó con una victoria importantísima por 80-72. El equipo de Piccato retornó a la victoria después de dos derrotas en fila. Obras, por su parte, no encuentra reacción y perdió su cuarto partido al hilo.

Planilla del partido.

Lucas Leiva / [email protected]

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