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LaVar Ball no consiguió llegar a un acuerdo con ninguna de las marcas más importantes en lo referido a indumentaria deportiva. La razón fue sencilla, no quería un simple contrato de patrocinio para su hijo Lonzo, sino que Nike, Under Armour o Adidas se hicieran socias de su propia marca: Big Baller Brand. La respuesta de las empresas también fue obvia, huyeron despavoridas ante la propuesta.

Así fue como hace unos días, BBB (como también se conoce a Big Baller Brand) lanzó la primera edición de las zapatillas de Lonzo, con las que debutaría en la NBA. Eso sí, el precio es exorbitante: 495 dólares o 7600 pesos argentinos si se hace la conversión. Se llaman ZO2'S y pronto fueron tendencia por una declaración absurda de su padre, un poco para darles marketing y otro porque sencillamente es así su forma de ser. "Si no podés comprar las ZO2'S es porque no sos un Big Baller", fue el tuit enviado por LaVar.

Al compararlas con los precios de la competencia, es decir el valor al que las diferentes marcas venden las zapatillas que crearon para las diversas estrellas de la NBA, las diferencias son irrisorias: las de Lebron cuestan 175, las de Durant 150, las de Curry 140 y las de Kyrie Irving 120.