NBA

Kareem-Magic y LeBron-Davis, dos dúos espejados

23:06 08/10/2020 | Uno estaba en la segunda etapa de su carrera. El otro iba en ascenso y llegaba para dominar. La historias tienes contrastes, pero son muy similares.

Kareem-Magic y LeBron-Davis. (Foto: Getty Images)

Uno llegó para completar el último tramo de su exitosa carrera, en la que siempre fue la figura principal e indiscutible de sus equipos. El otro llegó con la juventud y el talento necesario como para hacerse cargo del liderazgo, aunque no dejó de compartirlo con la leyenda que tenía al lado. Juntos se volvieron dominantes en Los Ángeles Lakers. Kareem Abdul-Jabbar y Magic Johnson aplican a este concepto, pero LeBron James y Anthony Davis también van por ese camino.

La primera pareja adoptó esa condición. El pivote, que venía de ser la estrella de mejor rendimiento durante toda su trayectoria, llegó a California con tres MVP de temporada a cuestas y un campeonato como pieza fundamental de los Milwaukee Bucks. En 1980, luego de no poder encaminar a los angelinos hacia un título, recibió un regalo del cielo: un base salido de la Universidad de Michigan State fue seleccionado por la franquicia en el primer puesto del Draft 1979 y, a partir de allí, todo cambió.

Magic impuso el Showtime como estilo, acaparó las miradas y se volvió el motor de los Lakers. Kareem, lejos de volverse menos importante, le cedió el protagonismo para ocupar el rol de copiloto. De esa manera, ganaron cinco anillos y tomaron por asalto la década del ochenta.

La historia entre James y Davis no es idéntica, pero sí puede espejarse en muchos aspectos. El Rey completó etapas de dominio absoluto tanto en Cleveland Cavaliers como en Miami Heat. Luego de obtener tres campeonatos, cuatro MVP de temporada regular y entender que su futuro no tenía final feliz en Ohio, viajó a Los Ángeles con un objetivo muy claro: encontrar a su compañero perfecto.
Pasó un año sin entrar a los playoffs, pero finalmente lo encontró: La Ceja, el joven talento generacional ávido de competir en los grandes escenarios. Como si estuviera guionado, LeBron pasó a ser el base del equipo y AD el interno más determinante de todos. Un contraste genial con el libreto del otro dúo, que no hace más que hermanarlos.

Como Kareem, el alero jamás aminoró su marcha. Al contrario: entendió que, para ganar, debía compartir el liderazgo con el otro integrante de la dupla. Abdul-Jabbar jugó nueve años más desde que Johnson se le unió y la vigencia de The King indica que también repetirá eso. Al mismo tiempo, el joven perimetral se volvió cada vez más trascendente y terminó por quedarse con el cetro. Davis, un jugador de condiciones únicas por su completitud, puede emular lo hecho por Magic si sigue su ascenso.

El deporte suele presentar estas narrativas. Patrones que, aunque difieren en algunos detalles, se repiten casi con exactitud. El primer año que KAJ y el base compartieron equipo, lograron el tan ansiado título luego de ocho años de sequía para los Lakers. En esta primera campaña juntos, AD y LBJ están a una victoria de hacer lo mismo para cortar una mala racha de una década. Quizás, con el tiempo, la historia vuelva a escribirse. Bajo los mismos colores, pero con dos nuevos protagonistas.

 

Leandro Carranza | [email protected]
En Twitter: @basquetplus | En Twitter: @leocarranza99

 

Compartir