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El CB Gran Canaria encuentra el gen competitivo a tiempo y sella su pase a cuartos de la Eurocup / Diario Las Provincias

Partido sufrido como se puede esperar en unos octavos de final de la Eurocup jugados a cara o cruz, aunque en esta ocasión, el Dreamland Gran Canaria contó con el apoyo de su grada para no bajar los brazos en ningún momento y salir airosos tras complicarse el partido en la segunda parte, gracias al acierto de Ennis, Simms y Parks, con 15 puntos cada uno en el partido. En el peor momento para los amarillos brillaron en la recta final del encuentro Joe Thomasson y Pierre Pelos para guiar a los suyos hasta la victoria.

Capítulo aparte merece la exhibición de Mehdy Ngouama en una primera parte primorosa que cerró con 18 puntos del base francés que fue clave en las buenas sensaciones de los amarillos en el arranque del duelo.

La victoria de los claretianos ante el Umana Reyer Venezia (84-80), les coloca en cuartos de final donde les espera el Hapoel Jerusalem en una nueva batalla por acceder a las semifinales de la Eurocup.

Final en toda regla la que disputaban sobre el parqué del Arena grancanarios y transalpinos, lo que justificaba el riesgo asumido por Jaka Lakovic de meter en la rotación a su mejor tirador Caleb Homesley, a pesar de los problemas físicos que arrastra y que le dejaron fuera en el duelo liguero ante el Real Madrid.

Nervios, imprecisiones e intensidad defensiva eran los protagonistas en el arranque de un duelo en el que los puntos subían a cuentagotas tras inaugurar Nico Brussino el marcador con un triple y conectar con Mike Tobey en las únicas canastas claretianas en los cinco primeros minutos en los que tomaban la delantera los venecianos gracias a un triple de Wiltjer y dos canastas de pura energía de Carl Weathle y Kabengele (5-7).

Un 2+1 de Mehdy Ngouama encontraba respuesta en el primer triple de Tyler Ennis, en un ida y vuelta que no permitía a ninguno de los dos equipos dominar el marcador, con alternancias constantes.

Un triple de Pierre Pelos y un enchufado Ngouama marcaban las diferencias para abrir la primera brecha seria del partido, obligando a Neven Spahija, técnico del Venezia, a parar el reloj a 2:01 para el final del primer acto con un 20-13 en el marcador.

El parón no mermaba la lucidez en ataque del base francés del Granca que ensartaba un nuevo triple y encontraba la complicidad de Nico Brussino para llevar la ventaja hasta los nueve puntos de diferencia al término del primer acto (25-16).

Un parcial de 0-4 de los italianos, por obra de Tessitori y Simms, en el arranque del segundo acto despertaba las alarmas en el banquillo claretiano, optando Jaka Lakovic, entrenador amarillo, por parar el juego con un 25-20 en el luminoso.

El intercambio de triples entre Homesley, Ngouama y Ennis, servía a los amarillos para frenar de momento los ánimos de remontada de los transalpinos que aumentaban el contacto en su defensa para evitar la fluidez en ataque de los locales.

El Venezia apretaba los dientes en defensa y conseguía correr para que brillasen Simms y McGruder que reducían la diferencia a cuatro puntos superado el ecuador del segundo acto (34-30).

Wheatle, Parks, Kabengele y McGruder se conjuraban en la recta final del segundo asalto para mantenerse vivos en el partido, pero los amarillos encontraban en un triple desde la esquina de John Shurna, que perdonaba el lanzamiento adicional y en la exhibición en ataque de Mehdy Ngouama que cerraba la primera parte con 18 puntos para cerrar el luminoso con un 46-39 que dejaba todo abierto para la segunda mitad.

Un parcial de 0-10 de los italianos en menos de dos minutos invertía las tornas en el partido y obligaba a Jaka Lakovic a parar el partido con un 46-49, ante la incapacidad de frenar a la dupla formada por Ennis y Parks que enmudecían al Arena.

El Granca intenta levantarse con Joe Thomasson y Mike Tobey como guías en ataque, pero el Venezia anotaba con fluidez, de nuevo con Ennis y Parks ensañándose con el aro claretiano desde todas las distancias para mantenerse por delante en el marcador, aunque con una renta exigua que el capitán Andrew Albicy se encargaba desde la línea de tiros libres en reducirla a la mínima expresión, decidiendo Neven Spahija, técnico de los italianos, a parar el duelo a 3:09 para la conclusión del tercer asalto (58-59).

El Granca volvía a ponerse el mono de trabajo en defensa para minimizar el ataque de los transalpinos que ante las dificultades para pisar la pintura amarilla no tenía problemas en abrir el campo, encontrando a Simms que aumentaba la ventaja.

La respuesta claretiana llegaría en forma de parcial de 5-0 con un triple de Pierre Pelos totalmente liberado en la esquina y en una bandeja sobre la bocina de Caleb Homesley que les permitía llegar a la batalla final con un punto de ventaja sobre su rival (63-62).

Simms se encargaba de poner nerviosa de nuevo a la parroquia claretiana con un triple para inaugurar el último acto, pero los claretianos lograban calcar los parciales de su rival, con Conditt haciéndose respetar en la pintura y Miquel Salvó aprovechando un despiste de los italianos para devolverles el triple desde la esquina para mantener la mínima ventaja de un punto con la que habían llegado al final del tercer periodo (68-67).

El Granca lo intentaba, pero cada golpe que propinaba a su rival era devuelto con la misma moneda por un Umana Reyer Venezia que recurría a Simms y a un 2+1 de Casarin que igualaba la aportación de Albicy y Tobey en un final que entraba en el ecuador del último periodo con todo igualado (72-72).

Nico Brussino y Joe Thomasson entraban en escena en el momento más delicado y aprovechaban la buena defensa del equipo para endosar un parcial de 4-0 que obligaba a Spahija a congelar el partido a 2:14 para el final con un 76-72 que les daba un pequeño respiro.

El Venezia se acercaba con una nueva canasta de Ennis, pero Joe Thomasson hacía arder al Arena con un triple que dejaba herido a su rival a poco más de un minuto por disputarse, Munford recortaba distancias desde la línea de castigo pero un gorro memorable de Brussino sobre Parks era coronado con otro triple de Pierre Pelos que era jaleado con gritos de 'pío, pío', por la parroquia local, mientras el Venezia consumía otro tiempo muerto a falta de 16.1" para el final del duelo, pero el triple final de Ennis solo servía para maquillar el resultado final (84-80) que colocaba a los grancanarios en los cuartos de final de la Eurocup donde les espera el Hapoel Jerusalem.

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