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Después de un primer partido en el que San Lorenzo rompió el resultado en el último cuarto con Gabriel Deck, el segundo choque fue muy distinto, sobre todo de arranque, donde ambos equipos tuvieron 10 minutos para el espanto, tirando 7/37 de cancha y con resultado favorable al local 12-11. Demás está decir que, aunque hubo fallos en tiros abiertos, las defensas hicieron un trabajo permanente y sólido, pero que ninguno pudo replicar en ofensiva.

En el segundo período hubo varios cambios. La intensidad atrás no fue la misma y Vildoza y Safar le dieron a San Lorenzo más dinámica, además de abrir la cancha, situación que aprovecharon Deck y los propios Vildoza y Safar. Instituto, de todos modos, encontró el tiro a distancia que no había tenido hasta entonces en la serie y se mantuvo con él como arma central, pero parecía poco para poder aspirar a llevarse el encuentro. Davis no le daba nada (0/8) y tampoco generaba desde la pintura, pero cerró bien el período a partir de algunas desconcentraciones en ataque del local para subir sus expectativas, 35-32 al entretiempo.

El tercer cuarto levantó la media. Primero San Lorenzo tuvo su mejor pasaje, con un ratito de Tucker y de Deck, para sacar 11 muy rápido y amenazar romperlo (45-34), pero esa máxima coincidió con el arranque del partido de Instituto. Apareció Davis (9 en el cuarto), González siguió siendo el arma exterior, pero sobre todo no permitió más tiros cómodos de su rival. Tomó confianza y metió un parcial de cierre de 20-6 para irse al último chico arriba 54-51.

García retomó para el cierre a Aguirre, que no jugaba desde el arranque del segundo cuarto, pero Instituto cada vez construía una telaraña defensiva más compleja de resolver para San Lorenzo, al mismo tiempo que sumaba soldados en ofensiva. Ya no solo González y Davis, también Horner en la zona que más adversa le había sido: la pintura.

De repente, Instituto era el dueño del partido. Se jugaba a su manera, San Lorenzo no podía anotar, ampliaba la ventaja hasta 13 (51-64) y con pocas faltas, lo que le permitía cortar algún intento de salida rápida del local. Pero como le ocurrió a San Lorenzo antes, en el mejor momento de la visita, apareció el local. Primero apostando a San Deck, que metió un par de corridas que contagiaron más entusiasmo que puntos, y después con una buena defensa, favorecida por una desesperación innecesaria que le agarró a Insrtituto, exagerando los tiros de tres puntos (sobre todo Davis), casi sin pases. San Lorenzo metió un parcial de 13-0 y empezó otro juego en los dos minutos finales: 64-64.

Fueron dos minutos de tensión, de malos tiros, de decisiones individuales y de más errores que aciertos. Instituto supo jugar la última pelota con González (golazo sobre Deck), mientras que San Lorenzo se la jugó en la última a un triple de Tucker que no entró. Ganó Instituto 66-64, puso la serie 1-1 y se vuelve a Córdoba con el objetivo cumplido. González fue la figura con 19, pero hubo otros trabajos excelentes, no tanto en números: Clancy, Whelan y algún pasaje de Davis. En San Lorenzo el mejor fue otra vez Deck, aunque no en modo extraterrestre: 16 y 7 rebotes.

Fabián García / [email protected]
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