Basquetplus.com

Si hay un equipo acostumbrado a dar sorpresas en los plaoyffs en estos últimos años, sin dudas es Quilmes de Mar del Plata. Los dirigidos por Javier Bianchelli sumaron un nuevo capítulo a esa historia este jueves, imponiéndose en Bahía Blanca por 90-77 en el quinto partido de la Reclasificación y dando vuelta una serie que habían arrancado abajo por 2-0.

La gesta no solamente trajo recuerdos de la postemporada del 2015, donde el cervecero dio un par de golpes ante Argentino y Obras, sino que además sirvió para seguir aumentando la mística del equipo en los juegos definitorios: desde el 2000 en adelante, jugaron seis quintos partidos decisivos. ¿Cómo les fue? Seis victorias.

Como mencionamos, los antecedentes inmediatos al de ayer, fueron dos años atrás, con algunos nombres repetidos como Luca Vildoza, Ivory Clark o Maximiliano Maciel. Aquel conjunto dirigido por Leandro Ramella había finalizado en la quinta colocación de la Conferencia Sur y en la primera ronda de la postemporada se enfrentó al Argentino de Adrián Capelli. El turco se impuso en los primeros dos duelos en Junín, pero Quilmes se recuperó en el Once Unidos, igualó la serie y luego festejó en el quinto como visitante por 87-81.

En la siguiente fase, los de Ramella llegaron a estar abajo 2-1 ante Obras, puntero de la Conferencia Sur. Sin embargo, lograron empardar el cruce en el cuarto (65-62 en Mar del Plata) y se llevaron el quinto en Capital Federal con un memorable 97-95, en uno de los mejores partidos que haya visto la Liga en estos años.

Para encontrar otro antecedente de quintos juegos para Quilmes, hay que retroceder al año 2002. El equipo, que contaba por ejemplo con la presencia de Diego Cavaco, finalizó en la tercera colocación durante la fase regular y en cuartos de final, se enfrentó con Gimnasia y Esgrima La Plata. La serie debió definirse en un quinto (Quilmes ganó los primeros dos, pero luego perdió ambos en La Plata), donde los marplatenses lograron imponerse por 99-86 con 24 puntos y 8 asistencias de Daniel Farabello.

Por último, nos remontamos al año 2001, donde el cervecero sumó dos nuevas victorias en quintos juegos. Tras finalizar octavos en la fase regular, superaron en la reclasificación a Gimnasia de Comodoro por 3-2, llevándose el triunfo definitivo en casa por 88-82, con 23 tantos de Milton Bell y 18 de Ya Ya Dia.

En los cuartos de final, los de Oscar Sánchez iban a repetir el logoro, aunque ahora ante un rival aún más complicado: Atenas de Córdoba, segundo mejor preclasificado. Los cordobeses se impusieron en los primeros dos encuentros, pero Quilmes se llevó el tercero por 102-93, el cuarto por 96-92 en suplementario y el quinto por 100-92 como visitante. Nacía por entonces una mística que aún sigue intacta e invicta en el nuevo milenio.

Ultimos antecedentes de Quilmes en un quinto partido