NBA 2014/15

Derrick Rose: “Tengo mucha confianza en mi juego”

10:47 09/05/2015 | La estrella de Chicago vivió su noche mágica tras el triplazo ganador contra Cleveland. Pura alegría después de las dudas y el calvario que atravesó por las lesiones.

Así se mostró Rose segundos después del triple. La alegría fue por dentro.
El destino a veces se empeña en hacer las cosas complicadas, en poner muchísimas piedras en el camino. Pero en otras ocasiones nos regala situaciones que parecen un guiño y acomodan todo en su lugar. En 2011, Derrick Rose se convirtió en el MVP más joven de la historia y fue apuntado como la estrella del futuro. Sin embargo, las graves lesiones en sus rodillas modificaron los planes y fueron una tortura. Incluso hasta ahora mismo, cuando el base carga con esa mochila y con las dudas sobre si alguna vez volverá a ser lo que fue. Pero anoche, tanto sacrificio tuvo su momento de descarga y felicidad. 
 
Rose fue el encargado de sellar la victoria de Chicago, 99-96 sobre Cleveland para ponerse 2-1 en las semifinales del Este, con un triplazo sobre la chicharra y con tablero que hizo explotar el estadio. Un lanzamiento que, seguramente, pasará a la historia de los grandes momentos de playoffs. Una conversión que sirve para poner en perspectiva todo el trabajo que tuvo que realizar el base para dejar atrás las lesiones y llegar a este momento. 
 
Si hasta incluso se dudaba si podía llegar a estos playoffs, cuando en febrero pasó una vez más por el quirófano para operarse los meniscos. Sí, Rose se recuperó. Y anoche demostró que está más que vigente. “Fue una jugada rota. Se suponía que iba a ir a la esquina, pero cuando fui hacia allí no estaba abierto así que decidí buscar la pelota y encarar hacia el otro lado. No quiero sonar agrandado, pero ese es un tiro que querés tomar si sos un jugador en esa posición. Estoy agradecido a mis compañeros por haberme dado la pelota. Creen en mi”, explicó Rose sobre esa jugada. 
 
Los más de tres años conviviendo a la sombra de las lesiones y escuchando críticas desde todas lados no cambiaron la mentalidad de Rose. “Cuando la gente habla, son sus opiniones. No me puedo enojar por eso, dejo que Dios lo maneje. Mi trabajo es asegurarme de estar preparado para cada partido y salir a competir. No puedo hacer nada con lo que todos dicen, son libres de opinar”, señaló el base en relación a las críticas. 
 
Y claro, demostró que está preparado para todo pese a los golpes. “Tengo mucha confianza en mi juego y en mi habilidad para anotar lanzamientos”, expresó. Su entrenado, Tom Thiboudeau, quedó rendido a sus pies: “Esa es la grandeza de Derrick. No hay muchos como él. De hecho, no hay nadie como él”
 
Rose terminó con 30 puntos (14 en el último cuarto), 7 rebotes y 7 asistencias en 39 minutos de acción. Y claro, también hay que sumarle una conversión para el recuerdo. Un guiño del destino después de tantos cachetazos que recibió. A los 26 años, la estrella de los Bulls está de regreso con todo. 
 

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