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Bahía arrancó tomando las cosas donde las dejó el sábado ante San Martín de Corrientes y con buenos pasajes de los panameños Jamaal Levy y Trevor Gaskins, más un triple de Mariano Byró, sacó ventaja de 11-4. A Boca le costó muchísimo entrar en juego, sobre todo en el costado ofensivo, donde no sólo estaba impreciso con el aro, sino que además, cometiendo muchísimas pérdidas, algo especialmente peligroso contra este rival, en esta cancha.

Igual, de a poco los de Córdoba fueron metiéndose en el marcador, guíados por una mejoría en defensa. El local ya no pudo correr el contragolpe y con los puntos de Fabían Ramírez Barrios y buenos ingresos de Lucas Faggiano y Matías Sandes desde el banco, el marcador se emparejó. Una seguidilla de conversiones de Lisandro Rasio volvieron a darle aire a los bahienses, pero Boca lo cerró mejor y con dos triples de Nicolás Copello se fue al primer descanso abajo por la mínima (19-18).

Entre cuartos, Ginóbili retó a sus jugadores por algunos errores tácticos a la hora de marcar el poste bajo, pidiendo que se queden los tiradores y dejen jugar a los internos de Boca el 1 vs 1. En principio, esto le quitó la mejor arma al Xeneize, su tiro externo, aunque en su favor, liberó a Sandes para sacar provecho de su buen juego de pies y ganarle en un par de ocasiones consectuvias el duelo individual a Levy cerca del aro. Así, Boca tomó su primera delantera desde el inicio mismo de la noche.

Cuando parecía que la visita comenzaba a asentarse en el partido, Bahía volvió a adueñarse de las acciones. En los capitalinos debutó Dillion Sneed y aunque el pivote generó espacios y mostró su potencia en la zona pintada, también frenó la fluidez que traían los ataques visitantes, además de dar ventajas en defensa, por su falta de movilidad. Bahía le sacó provecho a esta situación, volvió a sumar en transición, se cerró muy bien atrás y con un buen cuarto de Byró, llegó al entretiempo con ventaja de 35 a 29.

El mejor final de primera mitad de Bahía Basket se trasladó al comienzo de la segunda y con triples de Gaskins y Diego Gerbaudo, pudieron romper la barrera del doble dígito (43-29). A esa altura, imposible era saber que aquellos dos tiros de tres terminarían sacando por completo del encuentro a Boca y abriendo el trámite para los locales.

Los de Córdoba comenzaban a irse del partido, sufriendo mucho la terrible velocidad del rival, que con el goleo de Rasio y otro triple de Gerbaudo, comenzó a poner diferencias irremontables. Para colmo, se encendió el joven Juan Pablo Vaulet y de su mano, los bahienses se metieron a disputar los últimos diez minutos con una distancia decisiva de 68 a 47.

El último cuarto ya estuvo de más y ambos entrenadores lo utilizaron para rotar el banco y descansar a sus titulares, situación fundamental de cara al intenso final de fase regular que se viene. Finalmente, fue victoria para Bahía por 90 a 68, consiguiendo la octava de forma consecutiva en el Osvaldo Casanova, donde cada vez se siente más cómodo.

Bahía Basket (90): Diego Gerbaudo 6, Trevor Gaskins 15, Mariano Byró 9, Lisandro Rasio 24 y Jamaal Levy 10 (FI); Gastón Whelan 4, Lucio Redivo 2, Juan Pablo Vaulet 12, Martín Fernández 0, Hernán Jasen 4, Ariel Ramos 0 y Ariel Eslava 4. DT: Sebastián Ginóbili.

Boca (68): Jonathan Treise 3, Isaac Sosa 0, Lucas Gargallo 3, Fabián Ramírez Barrios 12 y Pedro Calderón 3 (FI); Lucas Faggiano 6, Nicolás Copello 8, Axel Weigand 9, Matías Sandes 18 y Dillion Sneed 4. DT: Ronaldo Córdoba.

Parciales: 19-18, 35-29, 68-47 y 90-68

Árbitros: Roberto Smith y Rodrigo Castillo.

Estadio: Osvaldo Casanova.