Shaq: "Cada vez que intentaba hacer enojar a Duncan, me miraba como si estuviera aburrido"
22:00 25/08/2022 | Big Fella reveló la razón de porque le costó tanto imponerse al ex San Antonio, quien tenía un lenguaje corporal inmune al enojo.
Tim Duncan es sin dudas uno de los cinco mejores pivotes o internos de la historia de la NBA con un juego atildado, técnico, exquisito y que presumía poesía en cada movimiento de pies. Y si se habla de centros dominantes, Shaquille O'Neal es el más potente de todos, aquel que poseía la fuerza suficiente para sacarse de encima a cualquier rival sea el tamaño que sea y, muchas veces, agregándole una destreza técnica realmente sorprendente.
Shaq fue hacedor de cuatros títulos y un sin fin de distinciones individuales a lo largo de su carrera y entre los intangibles están las veces que dominó a pivotes rivales de renombre, jugadores franquicias, que quedaban chiquitos ante la opulencia de ex Lakers. Sin embargo hubo uno que no y ese era Tim Duncan, quien nunca cambió su lenguaje corporal y salía a hacer su trabajo sin importarle quien estuviera enfrente.
El ex Heat es de esos jugadores histriónicos, que además de jugar bien, también daban espectáculo cuando podía, casi que en las antípodas de Duncan en ese sentido. Y cuando no podía con el baloncesto también buscaba con el trash talk desestabilizar mentalmente al rival de turno o al menos ponerlo en un plano de enojo y a ver quien era más fuerte en ese momento desde lo psicológico.
Pero con Duncan todo eso fue en vano y por ello Big Fella se sacó el sombrero ante él: "Los Spurs ganaron gracias a Tim Duncan, un tipo al que nunca pude doblegar. Podía hablar basura con Patrick Ewing, ponerme cara a cara con David Robinson, hacer que Alonzo Mourning se enojara, pero cuando iba con Tim, me miraba como si estuviera aburrido. Cada vez que me encuentro un fanático de Duncan que afirma que Tim es el GOAT, no estoy para nada en desacuerdo con él".
Shaq en estado puro al hablar de un rival al que todos ponderan. Nadie cuestiona si Duncan fue un grande en la NBA o si pudo haber ganado más títulos. Obtuvo cinco anillos en seis finales, con una conducta intachable en su carrera y un legado que para los Spurs fue más allá de los títulos y para O'Neal. como para casi todos los que enfrentaron, fue un hueso duro de roer y la única forma de vencerlo era metiendo la pelota en la canasta a un tipo que emocionalmente dentro de la cancha no le entraba ninguna bala, digan lo que le digan. Así era Duncan y así fue la famosa "Spurs way".