El factor justo que encontró Denver para amargar a Lillard y los Blazers
18:41 03/06/2021 | Dame es Dame y es capaz de ganar un juego él solo, pero los Nuggets no pueden permitirse que se los gane un actor de reparto y no lo hicieron.
A Portland Trail Blazers se le escapó la victoria en el quinto juego de la serie ante Denver Nuggets (Foto: Getty Images)
Damian Lillard es el gran factor de desequilibro en la serie de primera ronda de playoffs entre Portland Trail Blazers y Denver Nuggets, eso está claro. Sin embargo, en una llave donde la paridad es altísima, los actores de reparto toman un papel trascendental en el desarrollo de los partidos.
Dame viene de firmar una actuación histórica con 55 puntos y el récord de triples en un partido de postemporada con 12. Pese a esto y a los dos tiros heroicos que metió para forzar los dos suplementarios, al base no le alcanzó para guiar a los suyos a la tercera victoria. Una de las claves estuvo en la defensa sobre CJ McCollum.
Los dos intérpretes del trabajo atrás sobre el escolta fueron Austin Rivers y Monte Morris. De hecho, fueron los únicos dos jugadores que pasaron más de ocho minutos de promedio en estos últimos cinco partidos frente a frente con él. Y lo hicieron perfecto.
Frente a Rivers, McCollum tiró 4 de 17 de cancha, incluídos 2 de 7 en triples; repartió seis asistencias y tuvo dos pérdidas de pelota. Ante la defensa de Morris, el escolta tiene mejores números, pero no suficientes. Lleva 8 de 20 de campo, con 1 de 5 desde la línea de 6,75 y cuatro pases gol.
En contraposición, contra todos los demás jugadores que intentaron pararlo, sus estadísticas aumentan de foma considerable. Alcanzá el 51 por ciento en tiros de cancha, producto de sus 29 conversiones en 58 tiros y 9 de 22 en triples.
Con la defensa de Rivers y Morris, Denver encontró las vías para secar a McCollum en esta postemporada y encaminó la clasificación a la segunda ronda. Era algo sabido. Son dos equipos que se conocen a la perfección y se enfrentaron en varias oportunidades, incluída una serie de playoffs en 2010. A lo largo de los 12 partidos, el desempeño del escolta fue uno de los factores que decantó la victoria para los suyos.
En cuando a los números, Portland se quedó con seis de los nueve partidos en los que el escolta alcanzó los veinte puntos, pero en los tres que no alcanzó esa marca su equipo se fue derrotado.
Lillard acapara toda la atención y es de esos jugadores que, a pesar de cuán bien lo defiendas, es capaz de volverte loco una noche. Ya pasó en esta serie. No puede solo, necesita de un jugador del pueblo. Necesita de un héroe que nunca se vio venir. Hubo innumerables casos de brillantes espectátuclos individuales que se fueron a casa prematuramente.
Que Dame meta 60 puntos y se lleve la gloria, pero que no te lo gane otro...
