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El encuentro entre los Boston Celtics y los Milwaukee Bucks sorprendió a todos al convertirse en un récord de la NBA. En este partido, disputado el martes por la noche, solo se realizaron dos tiros libres en total, ambos por parte de Giannis Antetokounmpo de los Bucks. Los Celtics, por su parte, se convirtieron en el primer equipo en la historia de la NBA en no intentar ningún tiro libre durante un partido completo.

Este fenómeno sin precedentes plantea interrogantes sobre si se debe a defensas pasivas por parte de los jugadores o a un desuso del físico al atacar. El entrenador de los Bucks, Doc Rivers, comentó al respecto: "Pensé que era un juego físico, y luego me entregaron la hoja de estadísticas, y les dije: 'No, necesito el juego completo'. Pensé que eran las estadísticas del medio tiempo. No miré los minutos. Y luego dije: 'Wow, dos tiros libres para un partido de baloncesto. Eso es increíble'".

El hecho de que se realizaran solo dos tiros libres se explica en parte por los 88 intentos de triples combinados entre ambos equipos, en comparación con solo 66 tiros en la pintura. Además, algunos momentos del partido dejaron ver posibles faltas no cobradas por parte de los árbitros. Sin embargo, más allá de las razones específicas de este partido, este fenómeno se enmarca en una tendencia más amplia de disminución de intentos de tiros libres por el estilo de juego adoptado en la Liga. El All-Star es otro gran ejemplo, en el último Juego de las Estrellas se dieron solo tres faltas en 48 minutos.

La falta de tiros libres en este partido puede interpretarse como un signo de que las defensas están siendo más permisivas o de que los jugadores están buscando menos el contacto físico al atacar. Sea cual sea la razón, este juego destaca como un ejemplo extremo de esta tendencia en la liga.