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La última vez que en una serie a siete juegos, ganaron cincos veces consecutivas los visitantes fue en 1995 en aquel recordado Houston versus San Antonio, donde los Spurs tenían ventaja de localía pero no la pudieron hacer pesar ante los Rockets que a la apostrofé fueron campeones de la mano de Hakeem Olajuwon. En esta serie, donde se presumía un favoritismo para los angelinos, Doncic desde el primer punto demostró que está hecho para los playoffs y que le encanta jugar ante la adversidad y los pronósticos que no lo ponen como candidato en un cruce.

En ese contexto, Dallas sorprendió en el juego uno y dos y cuando fueron a Texas, un cierto relajo y mucho otro de buen trabajo del rival con Kawhi Leonard a la cabeza emparejó la serie. El cimbronazo de los triunfos Clippers daba entender que con el viento de cola se llevaba puesto a los Mavericks en el juego cinco, pero Luka Doncic como respuesta a todo.

“Estos son los partidos que tienes que jugar con el corazón”, explicó tras el triunfo Luka que salió a la cancha decidido a no amedrentarse por la levantada de LA y puso la vara alta en el primer periodo anotando 19 puntos. Pero eso ya sería algo común en Doncic por su facilidad y calidad para convertir, pero en este juego fue tan dominante que tuvo participación en 31 de las 37 conversiones de Dallas en toda la noche.

Los números lo ponen como el tercer jugador en la historia de la NBA en un partido de playoffs en participar en un 80 % de las jugadas positivas del equipo. LeBron James y Allen Iverson fueron las otras dos estrellas que lo logaron y con ello Luka vuelve a codearse con la historia en una jornada donde terminó con 42 puntos, 14 asistencias y 8 rebotes.

Al no ser un equipo de punta Dallas y en apenas su segunda postemporada, Luka promedia 32.8 puntos en solo once partidos, solamente superado por Michael Jordan en ese guarismo con 33.4 en un comienzo de carrera en PO. Además sumó su tercer juego con más de 40 puntos, un hecho que lo pone a la altura de los grandes, igualando a Magic Johnson, Tim Duncan y Karl Malone, quienes consiguieron 40 puntos o más en tres juegos de playoffs a lo largo de toda su carrera.

Los números no mienten, su ascendencia en la liga tampoco, Luka Doncic va camino en pulverizar muchas estadísticas que aún están escritas, pero que el talento esloveno va camino a superar. No obstante para conseguir un título deberá estar mejor rodeado, ya que en la era de los súper equipos, un solo jugador determinante termina generalmente desgastado y derrotado por el talento y el juego en conjunto de otras franquicias.

¿Podrá Doncic salirse con la suya en Dallas o deberá buscar otros aires para tener su anillo?