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Argentina viene de hacer un partido interesante frente a Japón en el que lució mucho más fino en ataque y sólido en defensa que en los dos juegos anteriores. Aún así, el seleccionado que dirige Sergio Hernández tiene algunas cosas que ajustar, como también otras en las que debe seguir afirmándose.

Mantener la buena circulación ofensiva, sin confundir ataques rápidos con lanzamientos tomados en posiciones incómodas, ocupando rápido las esquinas y dando el pase extra, será clave y ante el elenco de Julio Lamas hubo excelentes lapsos en los que se vio eso.

Hasta ahora, Argentina se ubica como el octavo equipo del torneo en rating ofensivo (104,5) según los datos de Tubscout y mucho de eso no tiene que ver con lo mostrado contra Japón, ya que si bien hubo notables pasajes al enfrentar a España, especialmente en el periodo inicial, el partido contra Eslovenia impactó negativamente la estadística.

Lo mismo al evaluar su tiro de campo efectivo, que evalúa todos los tiros de dos y tres puntos y les da un punto extra a los triples. Allí los de la celeste y blanca están en el décimo puesto entre los seleccionados activos con 50,9% y esa media podría seguir igual o elevarse si continúa el ascenso en la producción ofensiva.

El impacto en la línea de libres continúa siendo también un punto positivo para los argentinos, que supieron sobrecargar la pintura y atacarla constantemente en los tres primeros partidos del certamen olímpico.

Solo Japón lanzó más tiros de dos puntos que Argentina en el Grupo C (62/135 para ellos y 70/126 para los de Hernández) y la eficiencia de ambos elencos terminó siendo superior para los mencionados en segundo orden, con un 55,6% que distó mucho del 45,9% de los asiáticos.

Fuente: @data_basket

Esa irrupción en la zona pintada se materializó en la línea de libres y Argentina solo falló diez de sus 51 intentos para mantenerse como el cuarto mejor conjunto en ratio en el apartado, con 18,39.

El trinomio Gabriel Deck, Facundo Campazzo y Luis Scola lució mejor que nunca frente a Japón y que ellos se despierten ofensivamente es clave para Argentina. Es un punto positivo que abre espacios para el resto, tanto dentro como fuera de la llave.

Gabriel hace daño desde los posteos o en transición, Luis en el pick and roll (irse para adentro luego de la cortina directa) o el pop (abrirse en vez de correr a la pintura) y Facundo controlando el ritmo, lastimando de tres y siendo frontal en los contragolpes para anotar o asistir.

19,7 puntos para Scola, 16,0 Campazzo y 11,7 Deck. Cada uno en su rol debe mantener el aporte para que Argentina compita al máximo y frente a Japón también se pudo ver algo de eso, con Luis anotando 23, Facundo 17 y Gabriel 16.

La ausencia de Garino en defensa para cuidar la primera línea es algo que tendrá que compensar Argentina y viene siendo un punto negativo desde que salió en ese cuarto inicial contra España, en el que los de Hernández lucieron sumamente sólidos atrás y luego perdieron el molde.

Lo mismo ocurrió ante Eslovenia y en diferentes momentos frente a Japón, obligando a los interiores a cubrir zonas que luego terminaron siendo explotadas, sobre todo frente a los dos primeros rivales del equipo nacional.

El rebote para poder correr es otro segmento en el que Argentina todavía no puede dominar. Eslovenia le atrapó 18 ofensivos, Japón 11 y solo contra España bajó esa media, con tres en el juego. Además, Australia es el tercer mejor equipo en eficiencia rebotera (no tiene a Aaron Baynes por lesión, pero sí a Nick Kay) y buscará generar segundas oportunidades en todo momento.

Si se tiene en cuenta el ratio de rebotes defensivos de todos los equipos, Argentina fue el sexto peor con 71,68 y para continuar con vida es nodal proteger el aro para anotar en transición, algo que supo hacer muy bien en China para llegar a la final.

El poco acierto exterior también es otro problema a sobreponerse, en un partido contra Australia sin mañana. Lanzamientos en posiciones incómodas y un tanto apuradas, situaciones forzadas y falta de paciencia fueron algunas de las cuestiones que atentaron frente al conjunto nacional.

Solo en la esquina derecha Argentina lanzó al menos a un 40,0% de tres (44,4%), mientras que desde el codo de ese sector arrojó un 30,6%, en el eje 26,7%, en el codo izquierdo 30,8% y en la esquina de esa zona 20,0%.

Seis situaciones que no muestran el panorama general del equipo, pero que sí podrían servir para delimitar lo que Argentina está haciendo bien y lo que no. Australia será el próximo rival y mañana a las 9:00 se definirán si los puntos positivos superan a los negativos. 

Ignacio Miranda/ [email protected]
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