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Steve Kerr parece ser en estos tiempos, aquella persona que todo lo que toca lo transforma en oro, con una carrera como entrenador tan inmaculada como ganadora. Lleva ocho temporadas como entrenador jefe, con cuatro títulos y seis finales disputadas.

Es cierto que cuenta con un plantel de extrema calidad, pero la mano del entrenador está presente en el recambio y en las elecciones, como la chance de reclutar a Andrew Wiggins o mismo pulir a un gran Jordan Poole.

En una charla con Fox Sports, Jason Kidd habló sobre su rol de entrenador y sus colegas, a quien admiraba y quien le parecía el mejor en su rol. Sin dudar que todas las flores fueron para Steve Kerr, el campeón reinante: “En la fraternidad de entrenadores, Kerr es la superestrella. Es el Michael Jordan, Magic Johnson de los entrenadores. Si usas los Spurs como guía es Tim Duncan o David Robinson”.

Ahondando más en las cualidades de su colega Kidd lo puso a la altura de Popovich: “Él está allí con Pop, sin dudas que Steve es parte de los entrenadores superestrellas”.

Admiración, elogios de los colegas y respeto de los jugadores, tres cuestiones importantes con las que cuenta Steve Kerr, el hombre que gestionó a los Warriors y hoy lidera la NBA y va camino a ser un Hall of Fame para cuando diga basta.