Informe Especial

Desde Madrid hasta México, Giovannetti está dando que hablar en el U16

10:10 28/08/2021 | Está promediando 11,5 puntos y 4,5 rebotes para el seleccionado argentino masculino en el FIBA Américas, pero su relevancia va mucho más allá.

Giovanetti promedia 11,5 puntos en el U16 (Foto: FIBA)

Madrid es la capital de España y el perfil de este jugador también es preponderante como aquella mágica ciudad europea. Las luces encandilan el presente, aunque el futuro es aún más esperanzador en los dos ámbitos.

Lucas Giovannetti es su nombre y desde Estudiantes de Madrid llegó hasta México para continuar demostrando su proyección contra los mejores de su categoría.

Tras ser MVP del Argentino de Selecciones U13 y del Sudamericano U14, está logrando una participación importante en el equipo que dirige Leo Gutiérrez, que mantiene hasta ahora el invicto en el FIBA Américas U16 tras cuatro victorias.

Listado en 2,01 metros, se destaca por su capacidad para hacer un poco de todo en ambos costados, especialmente en ataque, en donde aprovecha su agilidad contra internos más grandes y su movimiento de pies ante los más pequeños.

Pero, como la mayoría de los chicos de su edad, aún tiene muchas cosas por afianzar.

Partiendo por el costado ofensivo, asombra su versatilidad, esa que le permite estar jugando de ala en el U16 masculino, pero ocupando diferentes roles conforme a cómo avance el partido.

Puede poner las cortinas y hacer el pop (abrirse) para tomar el lanzamiento, pedir el balón y ser él quien sea el portador en el pick, correr la cancha con la naranja en su manos como receptor o finalizador, tirar en estático o incluso convirtiéndose en el generador.

11,5 puntos, 4,5 rebotes y 1,0 asistencias son sus medias en el certamen, con un más que respetable 35% en triples y 68,8% en dobles.

Su tiro de tres es uno de sus enclaves, con todavía mucho por crecer en el apartado. Cuenta con una mecánica muy similar (cerca de ser igual de natural) a la de Nicolás Brussino, lanzando casi con las dos manos, una leve flexión de piernas para generar el arco y con el punto de descarga inicial en la frente sin que eso dificulte su visión hacia el aro.

Sin embargo, todavía le falta ganar fluidez y en estos dos casos se pueden ver las dos variantes, anotando sin problemas en una acción y quedándose corto en la otra. 

 

 

Otra de sus armas principales es su control de pies, que le permite encontrar variantes desde la creación cuando las defensas mitigan su relevancia. Giro, contra giro, uso del paso cero, bandejas pasadas y coordinación técnica perfecta son sus herramientas.

Así se puede ver en esta situación en la que primero pide el aclarado y después ataca el aro ante un rival más chico. Cambio de dirección saliendo desde la derecha (crossover), giro, finta de tiro y pie cruzado para luego anotar con la izquierda y además generar la falta. 

 

 

Por último, posee la tendencia a mantenerse calmado en todo momento y a realizar siempre la jugada correcta. Con poca frecuencia se mete en problemas con el balón. Si puede atacar el aro, lo hace. Si entiende que no hay forma de vulnerar da el pase extra y detecta quiénes se encuentran abiertos para limpiar el sector en el que se posiciona.

Al igual que el tiro de tres, su protagonismo adelante todavía puede desarrollarse aún más. Quizás por solidaridad para hacer jugar al resto o debido a que todavía no se siente listo para el desafío, entre otras posibles hipótesis, Giovanetti tiene pasajes de irregularidad ofensiva en los que por momentos anota mejor que nadie y por otros solo aguarda la recepción en codos y esquinas.

Independientemente de eso, su calidad es innegociable y seguramente con el tiempo vaya limpiando las falencias de su espejo y convirtiéndose en ese basquetbolista contundente que la mayoría proyecta.

En defensa sus faroles también se prenden y utiliza su envergadura para solucionar la mayoría de sus desafíos. Su talla es internacional y en el FIBA Américas U16 la viene aplicando con creces.

Ordenado táctica y estratégicamente y, por encima de cualquier media tangible, con una actividad verbal propia de un líder. Constantemente se comunica con sus compañeros, tanto en las defensas hombre a hombre como en las zonales.

Uno de los mejores hechos se produjo en el partido contra México. Realiza la defensa seguidor y luego hace el cambio, pero le avisa al grande que se quede con su marca secundaria para que no haya una ventaja favorable para el rival. Después atrapa el rebote y da la apertura del pase antes de cruzar la mitad de cancha, como dicta el manual.

 

 

Además, su agilidad de pies le permite evitar sufrir en los uno contra uno desde el eje o los codos y tampoco lo mueven con facilidad en los posteos, siendo útil como defensor en casi todas las posiciones de la cancha.

Todas esas cualidades físicas muchas veces lo llevan a cometer distracciones también propias de su edad. Eso se puede ver en estas dos acciones en las que, primero, no realiza la ayuda al tirador y, segundo, se olvida de hacer el box-out (cerco reboteador) y permite otra chance de anotación a Canadá. 

 

 

Le queda mucho por recorrer y su futuro es tan esperanzador como el torneo que viene cocinando en México. Un talento único, que deberá continuar siendo cuidado y orientado. Está en buenas manos. 

 

Ignacio Miranda/ [email protected]
En Twitter: @basquetplus
En Twitter: @nachomiranda14

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